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Obviamente Amor xd
si no les gusta el shipp no lo lean por favor;-;
esta historia xd tiene inspiración de otras historias como tú eres mía , Deseo destructor y también cambiaré por ti así que no copeo solo es...
Shinobu llegó a la casa y lo primero que hizo fue tomarse un baño. Después del baño, se fue a su habitación y se quedó profundamente dormida.
Después de un tiempo, se escucharon gritos. Se despertó y frotó sus ojos para levantarse. Recorrió toda la casa para ver qué había sido ese grito.
Entró a varios cuartos, pero nada, hasta que entró al cuarto de Douma y se quedó paralizada.
Douma: Oh, hola, Shinobu-chan. -sonríe- Espero que no te despertara. Tranquila, ya no hará más ruido.
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Shinobu: ¿Pero qué has hecho? ¡¿QUÉ HAS HECHO, DOUMA?! ¡ERES UN IDIOTA! ¡¿CÓMO TE ATREVES A MATAR A ALGUIEN?!
Douma: Ah, Shinobu, tranquila, ya no siente dolor. Aparte, tenía hambre y solo puedo comer personas.
Shinobu: ¡¿QUE ME TRANQUILICE?! ¡ACABAS DE MATAR A UNA PERSONA! ¡¿QUIERES QUE ME TRANQUILICE?!
Douma: Shinobu, amor, no grites, te escucho perfectamente bien, querida. -susurra- Tú me prometiste que serías mi esposa, pero bueno, creo que eso es diferente. Además, amor, tenía mucha hambre y ella...
No terminó la frase, ya que, Shinobu le dio una cachetada pero de las fuertes. Él tocó su mejilla y la miró sorprendido.
Shinobu: ¡No quiero escuchar nada de ti, Douma! ¡Confié en ti! 💢
Douma: Vaya, querida, la verdad no me dolió, pero no entiendo por qué te enojas. -la agarra de la cintura y la mira- Te ves tierna cuando te enojas, querida.
Shinobu: ¡Aléjate de mí! -lo trata de alejar, pero él le gana en fuerza- ¡Apestas a sangre! ¡Quítate! 💢💢
Douma: Oh vaya, ¿en serio, cariño? Perdón. -suelta el cuerpo de la chica y la abraza- ¡Shinobu! Lo siento, pero no te puedo prometer que no comeré personas. Jeje... tenía mucha hambre.
Shinobu: ¡No me hables! -desvía la mirada- Si se enteran los cazadores, te van a buscar y te matarán.
Douma: Awwww, Shinobu-chan. -acaricia la mejilla de ella, haciendo que lo mire- Mi Shinobu está preocupada por mí. Tranquila, cariño, seré cuidadoso. ¿Qué te parece si mato a gente mala? ¡Sería un gran favor! Aunque posiblemente no coma mujeres, sería una lástima. -mira que Shinobu se molesta más- Ah, amor, no te pongas así, yo solo te como a ti. -lo dice coquetamente- O bueno, te voy a comer.
Shinobu: ¡Deja de ser un maldito pervertido! -se sonroja-
Douma: Jajaja, tranquila, amor, todavía no te comeré... Aún. -lame su cuello, lo que provoca que Shinobu se ponga roja- Mmmm, qué rico sabor tienes, mi amor. ¿Uh?
Shinobu: ¿Qué pasa?
Douma: No lo sé, tu olor es como las flores de glicinia. -Shinobu rápidamente se fue de ahí, tocando su cuello- Amor, ¿a dónde vas?
Shinobu: No puedo creerlo, ¿apenas se dio cuenta?
Douma estaba jugando con la chica que estaba comiendo, cortándole la cabeza con su abanico y acomodando su pelo.
Douma: Mmm, bueno, no es tan hermosa como mi bella mariposa, debo admitir. Tiene un buen cuerpo... pero... mi Shinobu. -aprieta la cabeza de la chica- Ah, Shinobu, si supieras que te tengo hartas ganas. Muero por comerte y hacerte mi mujer. ¡Eres mi reina! -cierra los ojos e imagina a Shinobu con un vestido de novia, ella muy feliz, mientras los dos ignoran a Tomioka- Ah, Shinobu. -vuelve a cerrar los ojos y se sonroja, imaginando a ella en la luna de miel, gritando su nombre- Ya quiero que ese día llegue.
En ese momento, Douma estaba demasiado caliente, imaginando cosas. Fue a la habitación de Shinobu, todo rojo, su cara ardía por sus pensamientos. Agarró a Shinobu por el hombro y sonrió.
Douma: Shinobu, ya no aguanto. Quería hacerlo contigo en la luna de miel, pero en serio, ya no aguanto más. -besa el cuello de ella-
Shinobu: ¡Douma, qué pervertido eres! ¡Sal de mi habitación! -se pone roja-
Douma: Tranquila, Shinobu. -ya le estaba quitando las prendas lentamente- Te va a doler, pero luego sentirás placer.
Shinobu: ¿¡Qué!? ¡¿Qué haces?! ¡No me quites la ropa! -le da una patada y lo aleja un poco, pero eso no sirve de mucho, ya que se vuelve a acercar-
Douma: Ah, amor, qué agresiva. -besa su cuello y trata de sacar los pechos de ella, pero ella agarra sus manos-
Shinobu: ¡No, Douma, ya te dije que no! -con todas sus fuerzas, lo empuja afuera de su habitación y cierra la puerta-
Douma: ¡Shinobu! No me dejes así, por favor. Me he portado bien. -toca la puerta- ¡Mi amor! Abre, prometo ser gentil.
Después de un tiempo, Douma se quedó tirado en el piso, triste. Quería el amor de su mariposita, pero ella no estaba lista aún. Por el otro lado, Shinobu solo escuchaba a Douma haciendo berrinche y jadeando. Parecía que estaba en celo, y eso la hizo sentir un poco de miedo. Tenía miedo de que él la violara.
