Los misterios de Hell's Grave

5

El ruido de la cafetería no era algo que le gustara a Amity, usualmente se encontraba en la biblioteca de la escuela o en el patio durante el descanso, principalmente para evitar a Boscha y las demás, a quienes divisó en una de las mesas en el fondo.

Tomó su charola con comida y se abrió paso entre la multitud para quedar frente a la mesa dónde Luz, Willow y Gus estaban sentados. Willow fue la primera en notarla y pudo notar la ligera patada que le dio a la otra chica por debajo de la mesa.

Luz se quejó pero se calló de inmediato al ver que Willow le había señalado algo con la cabeza y se giró para encontrar a la joven Blight frente a ella.

—Amity... Hola.

Willow y Gus también la saludaron, sonrientes y expectantes.

—¿Puedo sentarme? —Preguntó.

Luz asintió y se hizo a un lado.

—¿Cuánto tiempo lleva Hunter desaparecido? —Fue al grano.

—Dos semanas apróximadamente... —contestó Willow. —¿Por qué?

Amity volteó a ver a Luz. —No había hablado con él desde hace tiempo, pensé que estaba enojado o algo... Y ayer durante la misa, el padre Phillip dijo que no sabe nada de él.

—No le ha contestado a nadie. —dijo Luz. —Willow habló ayer con el compañero de cuarto de Hunter y dijo que no sabía nada de él desde que salió del campus para venir aquí.

—Utilicé los contactos de papá para ver si alguien sabía algo fuera de la ciudad pero no encontré nada. —agregó Gus, tomando jugo de manzana.

Willow suspiró, tomando su mochila, sacó un pequeño mapa y lo mostró. Había marcado cosas con plumón rojo y encerrado otras. —Marqué algunas rutas que creo pudo haber tomado de la universidad hasta aquí.

—¿Planeas ir a investigar?— preguntó Gus.

—Iré a preguntar si lo han visto en los establecimientos cercanos.

Amity miró el mapa, había una zona que si bien no había sido marcada, la carretera si daba con una de las rutas. Era una pequeña zona de bosque que se usaba para cabañas de invierno en las afueras de Hell's Grave, sus padres eran dueños de una cabaña ahí que era dónde pasaban la navidad, de niña recuerda haber jugado con Hunter en aquel bosque, así que lo señaló.

—Recuerdo que sus padres tenían una cabaña ahí. —Willow miró el punto y asintió, sonriendo levemente como agradecimiento.

—¿Irás sola? —le preguntó Luz. —Porque puedo llevarte. Podemos ir juntos, si quieres.

Gus asintió.

Willow estaba por negarse cuándo Luz la interrumpió. —Queremos ayudar, tenemos que saber que está bien.

Terminó cediendo y después miró a Amity. —¿Vienes también?

Amity asintió inmediatamente. Su preocupación por Hunter no había hecho nada más que aumentar desde el día anterior y la mención sobre la búsqueda la hizo sentirse un poco mejor y si podía ayudar en algo, entonces lo haría.

Los cuatro caminaron un poco más animosos a los casilleros para que Luz pudiera recoger unos libros. Ir así, todos juntos, le hizo pensar en lo cómodo y natural que se sentía el que Amity caminara con ellos y se preguntó porqué, siendo amiga de Hunter, él nunca había hecho nada para tenerlos a todos juntos. Su mente divagó un poco, pensando en que tal vez, si Hunter lo hubiera hecho, entonces Luz no estaría sufriendo con este crush ahora... hasta que al estar frente a su casillero, empezó a escuchar un ruido extraño que apenas y podía oír, proveniente de dentro. Se posicionó detrás de dónde quedaría la puerta y detuvo a sus acompañantes detrás de sí.