El diario de alguien (Sashannarcy)

3. All good?

Bueno, conocí a Anne Boonchuy.
Es una chica realmente linda y tiene una sonrisa igual de bonita como la de Sasha.

Tengo que admitir que ella me trae curiosidad y de alguna manera quiero conocerla más.

— Bueno, ya sabes Marcy, normalmente siempre me va bien con la gente pero con Anne es distinto, ¿me comprendes?, ¿qué puedo hacer? -la azabache no había escuchado casi nada sobre la conversación por estar ocupada en jugar su reciente juego.

— Ah, ¿Anne? —Marcy por fin responde.

— No me escuchaste, ¿verdad? —la alemana suspiró con algo de enojo.

— Eh, solo entendí Anne jejeje —la Wu se sintió intimidada por la mirada de su amiga.

— Bueno, no importa. Yo veré como lo resuelvo —la alemana suspiro cansada y ante esto su amiga se preocupo.

— Sasha, perdón por no escucharte antes —se disculpó por su poca preocupación y la contraria solo miró el suelo, capaz esperando distraerse—. Te ayudaré en lo que necesites, pero necesito saber más sobre tú y ella.

— ¿A qué te refieres con eso? —retomo la mirada en su mejor amiga.

— Me refiero a la relación que ustedes tenían antes, yo vi qué sé llevaban muy bien, pero se distanciaron por alguna razón —la azabache observó fijamente a su amiga—. si puedo saber eso capaz se me sea más fácil ayudarte con ella.

— Es complicado, intentaré explicarte, pero.... —la rubia observó su reloj—. ya es hora de mis entrenamientos.

La alemana cerró su casillero y se acercó a su amiga para despedirse.

— No te preocupes Mar-Mar. Yo lo solucionare pronto —con cuidado dejó un beso en la frente de la azabache—. Gracias por preocuparte y escucharme linda —le guiño el ojo de manera coqueta y se alejo, dejando sola a la taiwanesa en aquel pasillo sonrosada.

Aquellos besos era algo muy usal en su amistad. Últimamente Marcy ante estos gestos se siente extraña, sin embargo no era tiempo para enfocarse en eso.

La azabache estaba preocupada por aquella rubia. La actitud que está tenía por lo que sea que estaba pasando con Anne la tenía realmente estresada y se notaba.

— Mi querida Sasha Waybright, no sé lo qué está pasando pero trataré de ayudarte —la azabache mencionó para sí misma.

A los pocos minutos tocó el timbre para la siguiente clase, arte. Una clase que sin duda amaba la azabache.

Mientras se acomodaba en su asiento de siempre observó a aquella castaña al lado de ella y claramente recordó en que clase tenían que hacer ese trabajo.

La castaña de nuevo le devolvió aquella curiosa sonrisa que cautivó a la azabache cuando se conocieron en la biblioteca.

— Un saludo para usted también señorita Marcy —la castaña recitó una frase del libro mientras hacía una reverencia.

— El saludo también viene de mi parte, Anne —la azabache se levantó de su asiento y completo la frase,ambas terminaron con una sonrisa en el rostro.

— Ejem, me alegra verte de nuevo —la castaña tomó asiento y sacó su material—. Y de nuevo gracias por conseguime el libro.

— No fue nada y ¿Pará qué lo necesitabas? —la azabache preguntó sin más.

— Para un examen que daré el viernes.

La castaña se veía cansada de estar estudiando un tema que entendía, pero a la vez no lo entendía y esto fue notado por Marcy.
La azabache en parte quería ayudar a Anne con aquel examen,sin embargo igual quería ayudar a su amiga y con está oportunidad podría hacerle unas cuántas preguntas a la castaña sobre su amistad.