Prólogo

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Marcy,una chica en aquella etapa de la adolescencia, muchos afirmaran que es una etapa totalmente hermosa y diferente. Aquella afirmación era una excepción para la azabache, para ella es una extraña confusión que la carcome desde adentro.

Simplemente tendrá que soportar aquella etapa tan vergonzosa, pero con inmensas dudas que muy pronto resolverá.

Estás dudas surgieron al ver a aquella chica, Anne Boonchuy. Aunque no sea atractiva y no tenga algo en especial, a la azabache se le hizo algo curiosa aquella joven tras conocerla en aquella biblioteca.

Sin embargo aquella chica no sería la única con la que se hiciera preguntas seguidamente, tendría otras preguntas al respecto de una persona muy cercana a ella.

Pero, lo importante y alarmante para aquella joven era el hecho de se estaba enamorando.

¿Como sucedió esto?

La azabache observaba el techo mientras se cuestionaba sobre aquel amor platónico que tenía a ambas chicas...

¿Amor de amigas o otro tipo?

Mientras ella se mordía el labio tratando de responder a está cuestión, se dijo cuenta que era un amor distinto.

— No, ellas no me pueden gustar -mencionó la azabache en un leve susurro en aquella habitación oscura.

Ella no podría amar a dos personas y de esa forma, ella no podía permitirselo, pero aquellos sentimientos seguirían internados en su ser.

Probablemente decidiría que hacer antes de irse y alejarse casi por completo de ellas.

El diario de alguien (Sashannarcy) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora