Impartial ||Lucius Malfoy||

Capítulo 20

Lucius esperaba con nerviosismo que Blair saliera, hoy era el día, sentía nervios pero eso no le quitaba lo emocionado que está por eso.

Así que cuando vio a Blair bajar por las escaleras con una falda negra, una blusa de manga larga con cuello de tortuga color crema, unas botas cremas y un blazer en su mano, hizo que sonriera como un tonto enamorado, Blair lo tenía muy mal y no se quejaba por ello.

-Lucius, perdón por la tardanza, pero no sabía que ponerme.-Dijo Blair mientras alisaba su falda con nervosismo.-Según ya tenía que iba a ponerme pero no me gusto y me cambie como unas 20 veces y al último me quede con mi primera opción....-Blair iba a seguir hablando pero Lucius la interrumpió.

-Blair, te ves hermosa hoy o con cualquier cosa que te pongas.-Alagó Lucius con una sonrisa mientras besaba la mano de Blair.

Blair asintió como el calor se esparcía por toda su cara.- ¿Nos vamos?

-Claro.-Respondió Lucius enganchando su brazo con el de Blair.

Blair no sabía que pensar todo era muy hermoso, no podía creer que Lucius hizo todo eso para ella, ¿por qué lo haría?

Una parte del bosque prohibido lleno de luces por todos lados, un camino de velas prendidas con pétalos de rosas en cada paso que daba, cuanto más avanzaba Blair se dio cuenta que había una manta en el suelo, una canasta en el medio y con una gran vista hacia el cielo estrellado.

-¿Te gusta? Si no te gusta está no importa tanto y si quieres podemos hacer otra cosa.-Dijo Lucius con demasiada rapidez en cada palabra que con trabajo e le entendía.

Blair lo miró con ternura.-No me gusta Lucius, me encanta, no puedo creer que hayas hecho todo esto para mí.

-¿Por qué no lo haría? Te mereces esto y más, me molesta que tú no lo puedas ver.-Dijo Lucius acercándose a Blair para quedar frente a frente.

-No puedo creer con tanta facilidad que especialmente tú me veas así.-Dijo Blair apartando la mirada.

-Te tengo un regalo.-Dio Lucius sacando una pequeña caja de terciopelo verde.

Blair lo miro con agradecimiento.-No era necesario, Lucius.

-Si lo era, feliz cumpleaños mon chéri.

Blair le sonrió antes de abrir la pequeña caja, sus ojos se abrieron como platos cuando vio su regalo.

-No puedo aceptar esto, te debió costar una fortuna.-Dijo Blair cerrando la pequeña caja y entregándosela a Lucius.

-Es un regalo no lo puedas rechazar y mucho menos si fue hecho especialmente por mi.-Dijo Lucius sacando el anillo de la caja.-Es una pieza única, nunca veras otro igual, fue hecho especialmente para ti.-Terminó de decir Lucius poniéndole el anillo a Blair.

Blair se quedó estática ante las palabras que Lucius le dirigió, fue hecho para ella por él, no le podía rechazar y mucho menos si ya se hizo especial es su corazón.

-Muchas gracias, Lucius.-Dijo Blair con una sonrisa.

-Un placer, mon chéri.-Respondió Lucius.-Ven, estoy seguro que te encantara la comida y la vista.

James corría por los pasillos en busca de Ariel, desde aquel día no la había vuelto a ver y su ausencia se hacía cada vez más presente.

Así que cuando la pudo divisar en las cocinas ayudando a los elfos en las cocinas, se quedó observándola desde el marco se veía tan hermosa y tal vez estaba sonriendo como un idiota pero no le importaba, Ariel valía la pena.

-Te ves hermosa.-Dijo James con una sonrisa.

Ariel se sobresaltó al escuchar la voz de James y su cara no tardó en tomar un color rojizo.

-J...ames, H...ola ¿cómo estás? ¿Te encuentras bien?-Preguntó Ariel con nerviosismo.

James sonrió divertido.-Me encuentro bien Ariel ¿y tú?

-También bien, un poco ocupada ayudando a los elfos, pero estoy bien.

Ariel salió corriendo de la cocina evitando conectar su mirada con la de James que la miro con confusión.

-¿Acaso me está evitando?-Se preguntó James con duda.

Un elfo que estaba pasando cerca de James negó con la cabeza.-Hombres tenían que ser.

-¡Oye!, tú también eres hombre.-Reprocho James antes de salir corriendo en busca de Ariel de nuevo.

Ariel se sentía avergonzada cada que veía a James porque lo único que se le venía a la mente era el beso que le dio James, ya no podía tan siquiera cerrar los ojos porque ese beso la invadía a cada momento.

Se detuvo de golpe al ver como su respiración se iba cada vez más.

-Debo hacer más ejercicio, no puedo tener muy poca resistencia.-Dijo Ariel mientras se asomaba para que le diera el aire.

Ariel escucho unos pasos atrás de ella, giro su cabeza y pudo observar a James que se acercaba cada vez más.

-Piernitas pa que te quiero.-Soltó Ariel antes de salir corriendo de nuevo.

-¡Ariel!, espérame tantito quiero hablar contigo.-Dijo James corriendo más rápido acercándose más a

Ariel trato de correr más rápido, pero James la tomo de la cintura y le dio la vuelta quedando sus bocas a pocos centímetros.

-¿Por qué me evitas, Ariel?-Dijo James acercándose al rostro de Ariel haciendo que sus labios quedaran rozando.

-Yo no te evito James.-Dijo Ariel evitando la mirada de James.

-¿Y por qué no me miras? ¿Acaso me desprecias?-Preguntó James tomando con delicadeza la mandíbula de Ariel para que lo mirara.

Ariel miro los ojos de James y de nuevo el recuerdo del beso que le dio invadió su mente haciendo que su mejillas se pusieran rojas.

James sonrió un poco al sentir de nuevo la sensación de sus labios con los de Ariel.-Quiero besarte.-Dijo con la voz ronca.

-¿Y por qué aún no lo has hecho?-Contestó Ariel en un susurró.

-¿Quieres que lo haga?-Volvió a preguntar James acercándose más a Ariel.

-¿Tú quieres hacerlo?, Porque yo si quiero que lo hagas.-Dijo Ariel juntando sus labios con los de James.

Ambos movían sus labios en sincronía, demostrando el amor que se tenían el uno al otro.

Ambos se separaron con la respiración agitada.

-No me vuelvas a evitar así, Ariel.-Dijo James abrazándola.

-Y tú no vuelvas como si lo que paso no se significó nada para ti.-Reprocho Ariel con molestia.

-Creme que lo último que haría es eso, esto se significa mucho más de lo que crees, Ariel.

Ariel sonrió un poco.

-Te estaba buscando para hablar sobre esto, lo nuestro y déjame decirte Ariel Anderson que me tienes loco.

James sonrió cuando las mejillas de Ariel se tornaron de color rojo.

-Tú también me tienes loca, James Potter.

Ambos juntaron de nuevo sus labios, mientras se sonreían, este momento sería inolvidable.

Hola!!!

¿Cómo están?

¿Qué les pareció el capítulo?

¿Qué piensan de cómo se va desarrollando la relación de Blair y Lucius?

¿No les parece tierno lo que hizo Lucius para Blair?

¿Qué piensan de James y Ariel?

La tensión de James y Ariel....

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