GUSTO CULPOSO | LESBICO

‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎ ‎003. INDIFERENCIA

más de 1000 palabras. ©︎

sugestivo.

Habían pasado dos semanas desde la última vez que las dos chicas se habían visto en la casa de Berta, otra vez. Ahora Berta se encontraba encima de otro de los tantos chicos que había conocido por Instagram. Él tenía la misma edad que Berta, lo cuál no siempre ocurría porque ella acostumbraba a verse con hombres más grandes. A ella le gustaba sentír que podía controlar a esos hombres. Matías era el nombre del chico en este caso, con quien había pegado onda desde un principio. Y Berta pensaba que hasta podrían ponerse de novios después de tener sexo. Y es que con Matías podía hablar no sólo de sexo sino tambien de la vida, de sus amistades, de todo. Igualmente, algo que no le gustaba de Matías era que a veces hablaba hasta por los codos. Y a ver, Berta pensaba que si hubiera querido estar de novia con alguien que le hablara durante horas, hubiera salido con un profesor.

No obstante, la idea de tener novio era positivo porque a largo plazo podía tener sexo con él sin preservativo. Y a Berta le causaba mucho la atención tener sexo sin protección. Era una mente maestra, solía pensar Lucia con sarcasmo. Y ahora en el presente, Berta seguía encima de Matias, se movía con rápidez teniendo a Matías dentro de ella. No obstante, tenía sentido que se sintiera así porque una semana sin tener sexo podía ponerla de mal humor. Aparte, la última vez que vió a Lucia había terminado caliente porque Lucia no había querido activar más allá con ella. Y por esa razón Berta tenía tantas ganas de tener relaciones sexuales con un hombre. Aparte teniendo en cuenta lo que habían fumado con Matías, Berta podía olvidarse de esa situación extraña con Lucia.

El problema con Lucia era que Berta en serio queria tener sexo con ella, probar algo nuevo. Sin embargo, Lucia no había querido seguír después de haber tocado un poco a Berta por encima de su corpiño. Lucia le había dicho concretamente que no hacia falta hacerlo, que no veía la necesidad de hacerlo en ese momento o que no estaba preparada. Recapitulando ese momento, Lucia soltó un suspiro antes de hablarle. "No se porqué estamos haciendo esto, pero no tendriamos que hacer esto. Digo, somos amigas. Ya está, Berta." Y despues de decír eso, Lucia se levantó para ponerse su remera. Se acomodó, guardó sus cosas en su mochila queriendo irse de esa casa. Entonces, Berta se levantó para caminar hacia ella. "¿Me estás diciendo que no querés?" Habló Berta cruzando sus brazos sobre su pecho, a lo que Lucia soltó un suspiro.

Berta agarró su remera del piso para ponersela tambien. Lucia la miró sin expresión, a lo que Berta agarró su teléfono para contestarles a sus otras amigas que le preguntaban sobre salír a la Bresh. "Pensé que estábamos avanzando en algo. Y ahora veo que no. Pensé que las dos queriamos probar algo nuevo." Habló Berta en voz alta, a lo que Lucia le susurró caminando hasta ella. "¿Por qué salís con cualquiera? Nunca hablamos bien las cosas. No digo que las cosas se den por arte de magia, pero Berta vos a mí nunca me hablaste sobre lo que querías hacer." Y ante la respuesta de Lucia, Berta le contestó. "Y pero son cosas obvias, Lucia. Me tenés enfrente, pero no sos capaz de activar una. ¿Tengo que explicarte todo con manzanas? No sos una nena, Lucia."

"¿Cosas obvias? Yo no te puedo leer la mente, Berta. ¿Por qué no usas la boca para explicarme las cosas? Podrías haberme hablado de lo que pensás. O decirme que sabias lo que me pasaba con vos." Habló Lucia queriendo irse, pero esperando que Berta le contestara algo. "¿Y encima vos te ofendes?" Le contestó Berta mientras se levantaba de la cama observando como ahora Lucia se ponia un buzo arriba de su remera. "Lucia, vos a mí no me gustas de esa forma. Y por eso queria que activemos en lo otro. No entiendo porqué te molesta." Habló Berta pretendiendo no conocer los sentimientos obvios de Lucia. "No hables más, con cada palabra la cagas un poco más." Habló Lucia seriamente. "¿Preferís que te mienta, o qué? A mi no me gustas las minas. Solamente quería probar como se sentía estar con una piba. Tampoco es para tanto."

Lucia trataba de encontrar la forma de defenderse frente a los comentarios de su amiga. Sin embargo, se acercó a la puerta poniendo su mano en el picaporte. "Quiero que te quede claro una cosa. No me vas a usar como un animal para tus experimentos. Si tanto querés estar con una mina, ponele una peluca a algunos de tus chongos. Y fue, porque sinceramente dudo que algo te guste más que estar con un chabón. Y no pinta que uses a otra piba para sacarte las ganas nada más." Habló Lucia saliendo del cuarto de Berta. Y por primera vez, Berta se había quedado sorprendida en silencio porque Lucia no solía decirle esas cosas. Y asi, Lucia salió de la casa de su amiga caminando rápido por la calle. Por dentro, Lucia estaba contenta de haberle dicho la verdades a Berta. Mientras que por otro lado, Berta sólo pudo entrar a ducharse para salír con sus otras amigas a la Bresh.

Obviamente Berta iba a subír muchas historias a Instagram presumiendo de los tragos que se estaba tomando, de cómo iba vestida. Tambien subió algunas imágenes a su cuenta con sus amigas. Sin olvidarse de una descripción que Lucia entendió como indirecta. "Las amigas que valen la pena, dice." Habló Lucia en voz alta al leer la descripción de la publicación, soltando una risa sarcástica. Además, Lucia sabia que esas amigas eran las mismas que hablaban mal de Berta en otra época a sus espaldas cuando Berta estaba de novia con David. Y por eso, Lucia no se sentía mal al respecto. Y así, habían pasado esas dos semanas donde Lucia no volvió a comunicarse con su amiga, a provechando para concentrarse en los exámenes de Inglés que tenía que rendír en su instituto de Inglés.

Mientras tanto, Berta había seguido con su vida. Era la primera vez en que Lucia no le habia pedido disculpas de nada, así como tampoco la había buscado para solucionar el problema, lo cuál no era común. Y como Lucia no subia muchas historias a Instagram casi nunca, Berta no podía chusmear lo que Lucia hacia. Por eso, Berta ahora estaba aburrida sin Lucia, pero no podía ser la primera en hablarle. Y por eso tenía que encontrar la forma de provocar a Lucia para que ella la busque primero. Entonces, Lucia se encontraba acostada en su cama revisando el Instagram de su amiga. Berta habia subido una historia en la pileta de su casa, en la cuál se podía ver que Berta mostraba con disimulo el que se habia hecho recientemente encima de su trasero.

Entonces, Lucia se mordio el labio sin saber que hacee. ¿Le respondía la historia o tenía que ignorarla? Y decidió responderle. '¿Nos podemos ver? Tenemos que hablar me parece.' Le escribió Lucia esperando unos minutos hasta que Berta le respondiera. Pese a que nunca habían aclarado la situación de su relación, Lucia no planeaba pedirle disculpas por ahora. Desde esa última discusión, no habían hablado de nada. Y a ver, varian cosas habian cambiado en esas dos semanas. Y es que no solo Berta se habia tatuado un emoticon encima del trasero sino que tambien se había puesto de novia con Matias. No obstante, Berta no le habia contado nada a Lucia. 'Hola amiga. Venite a casa ahora mismo si querés. Trae malla.' Le respondió Berta después de unos minutos.

Lucia no queria esperar más, a lo que decidio no responderle nada más a Berta. Simplemente se levantó de su cama para preparar su mochila. Le avisó a su madre que se iba a quedar toda la tarde en la casa Berta. Y sin esperar mucho más, agarró las llaves de su casa para irse caminando hasta la casa de su amiga que quedaba a varias cuadras de distancia. Eran en ese momento las cinco de la tarde, así que el sol estaba más calmado en las calles en las que Lucia tenia que pasar. Sin embargo, Lucia no pudo evitar ponerse unos lentes del sol con sus auriculares puestos para escuchar un poco de su artista preferida, Melanie Martinez.