╰ 🌼🌼 ╯¹⁰ ╰ 🌼🌼╯

260 22 2
                                        

.

.

— ¿Realmente crees que estoy actuando como un pelotudo? — Tiago le preguntó a su hermana, a quien había recurrido, para que lo aconsejará un poco y le diera su propio punto de vista.

— ¿De verdad quieres que responda eso? — ella dijo, ya que la respuesta que iba a dar era un evidente "Si"

— Entonces si la estoy cagando y estoy siendo una persona horrible. — el mayor murmuró agobiado, sintiendo como Patricio, el gato de su hermana, llegaba a acostarse sobre sus piernas.

— No creo que seas una persona horrible, porque Patricio acaba de recostarse en tus piernas. — es lo que ella comenta, pero al nombrar a su mascota, está no duda en cambiar de lugar.

Siendo su nueva ubicación, las piernas de Ámbar.

— ¿Decías?

— Bueno, una cosa no va con la otra. — la morocha responde, a lo que su hermano suspira cansado. — Tiago, ¿por qué no le haces caso a mamá? — pregunto, y el otro, simplemente se encogió de hombros. — Entonces lo de Thomas no significó nada para vos.

— No, no es así. — Tiago responde, pero la menor mantiene su postura.

— Por supuesto que sí, porque no querés luchar para estar con él. Y en vez de ser valiente, te estás comportando como un cobarde. — asegura, y Tiago siente como un nuevo peso cae sobre su espalda.

— ¿Pero qué debo hacer? — él pregunta, sin saber qué paso dar primero, porque eran muchos para empezar.

— Para mi, lo primero que debes hacer es averiguar, si lo del pastel fue en verdad una equivocación de la pastelería. — comentó con cierta seguridad. — Y de ser así, pedirle perdón a Lit por decirle cosas tan hirientes. — agregó, haciendo que su hermano se sienta después de lo dicho. — Lo segundo sería ir con Thomas, para rogarle que te disculpe. Porque lo has ignorado por mucho tiempo, y casi lo sacas de tu vida. — recomendó.

Siendo, sorprendentemente, el mejor de los caminos por el que Tiago pudiera caminar.

— Si... eso me parece lo mejor. — le dijo, para después ponerse de pie.

Estando más que decidido en buscar la mejor solución para resolver sus errores.

— Gracias, eres la mejor consejera que pude haber tenido, después de mamá, obvio. — comento, y anda de retirarse de la habitación de su hermana, abraza a esta por un par de segundos.

Para luego retirarse a su habitación y buscar algunas cosas que iba a necesitar más adelante.

— ¡Mamá! ¡Voy a salir! — anunció cuando aún venía bajando las escaleras.

— ¿Y a dónde vas? — Griselda preguntó asombrada, porque era la primera vez en mucho tiempo, que Tiago deseaba salir de la casa.

— A arreglar un par de asuntos. — él respondió, dejando un beso sobre una de las mejillas de su madre. — Chao, que vuelvo otro rato. — se despidió sin dar más información.

Pero al menos, estaba tratando de mejorar lo que había deteriorado por culpa de las inseguridades.

Y eso era suficiente para ella, ya que lo único que quería, era ver a su hijo feliz.

.

Tiago respiró de manera profunda, antes de atreverse a tocar el timbre de la puerta, que correspondía a la casa de Monzón.

A quien había tratado de contactar por mensaje, pero ninguno de estos fue leído. Y ahora comprendía lo que Thomas sentía cada vez que lo ignoraba.

Pero no quiso rendirse tan rápido, así que llamó un par de veces más, hasta que el ojiverde o el novio de este, vinieran a abrirle la puerta.

Me Gusta : Tiagsher : FINALIZADA ✅✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora