I SEE YOU...[Neteyam]

Capítulo 2

Su hermana pequeña se puso delante de ella mientras apresuraba su paso para alcanzar a Neteyam el cual redirigió su mirada hacia ésta.
-Mira, tienes que estirar tu brazo y colocarlo así...si, pero tienes que apoyarte aquí.- Nerangti observaba cómo su hermana tocaba al muchacho para posicionar correctamente sus extremidades. El Ilu se puso en marcha y ambas observaron como el intento del mayor resultaba exitoso. Mowang reía y aplaudía mirando al chico, por otro lado Nerangti se encontraba estática, no podía enfadarse por eso con su hermana, aunque reconocía ese ligero sentimiento de celos que había provocado en ella. Optó por permanecer en silencio mirando al muchacho caer al agua.

Tsireya los había conducido a todos a una de las rocas en la que los amigos solían verse de vez en cuando para salir a cazar, iban a practicar su respiración y pensaban enseñarles a aguantar más. Aonung y Rotxo estaban enseñando al mayor mientras que Tsireya enseñaba a Lo'ak, por otro lado Nerangti y su hermana se encontraban enseñando a Kiri y Tuk, o intentándolo, ya que la más pequeña no paraba de estallar en risas cuando aguantaba mucho. -Tuk esto debe ser más serio, no puedo concentrarme por tus risas.- se quejó Kiri. -Es que la cara de Nerangti aguantando me hace gracia jajajaja- la mencionada se empezó a reír aún más. ¿Su cara le hacía reír? No pudo evitar sentirse humillada en cierto modo, aunque sabía que no iba con esa intención.
-Porqué no Mowang nos enseña a Tuk y mí un poco más apartados de Nerangti para que puedan concentrarse, es importante que Tuk aprenda. -sugirió Kiri mientras se levantaba y cogía a ambas de las manos para que la acompañaran.

-Lo'ak inspira...expira...debes respirar desde aquí.-ella señalaba tocando tu abdomen. Todos repetían sus indicaciones mirándose los unos a los otros, sobretodo a la pareja clave los cuales parecían estar teniendo un momento tenso. -Lo'ak debes calmarte, tu corazón va muy rápido.- comentó Tsireya tocando su pecho. -Perdón.- el mencionado bajó las orejas avergonzadlo mientras escuchaba las risas de sus amigos y hermano. Nerangti miró a Neteyam, dándose cuenta de que tampoco lo estaba haciendo bien.
-Neteyam debes concentrarte.- comentaba Nerangti por primera vez dirigiéndose directamente al muchacho. El llamado la miró abriendo los ojos y tratando de comprender sus indicaciones. Que lo hubiera llamado por su nombre por primera vez en toda la mañana y sobretodo que le estuviera hablando directamente le había sorprendido. Ella hizo señas de que tomara aire desde la zona que señalaba, guardando espacios y sin atreverse a tocar al chico. El muchacho puso su mano izquierda en su abdomen y dirigió su mano derecha hacia la chica en el mismo sitio lentamente y mirándola para saber si le daba permiso, el cual fue concedido con un movimiento rápido de cabeza. Ambos inspiraban y expiraban a la vez durante un par de veces, hasta que Neteyam subió un poco su mano.

-Nerangti, tu corazón va súper rápido.- y la patraña de guardar los modos se habían ido al garete. Abrió los ojos mientras bajaba las orejas. No supo qué contestar. -De quién será la culpa...-comentó Rotxo a Aonung mientras ambos se reían sonoramente. Neteyam sonrió para sí mismo mientras dirigía su mirada a la muchacha, la cual ahora portaba un semblante amenazador hacia el autor de la broma. Tsireya y Lo'ak no pudieron evitar reírse.
Una vez que los muchachos ya controlaban mejor la respiración les dejaron disfrutar de las aguas y otro día les enseñarían el lenguaje de señas. Ahora que todos estaban libres Nerangti decidió darse un pequeño paseo por el bosque de algas que había cerca de su hogar, era su sitio favorito para nadar, ayudaba a aislarse de su hermana para tener un momento a solas y de paso para pensar.

Neteyam no salía de su mente, le parecía increíble en todos los sentidos, tenía un aura atrayente pero existía un problema y era que ella le sacaba 2 años, o eso había entendido, puesto que el muchacho tenía 15 y ella 17. En ese momento dio por destruida su mínima idea de que se fijara en ella, estaba claro que no lo haría y que había mayor posibilidad de que se fijara en su hermana pequeña, aunque ella tuviera 14. Y aunque su padre era la mano derecha del Olo' eyktan, no se sentía nadie significante de la clan o impresionante como lo eran Tsireya o Aonung. Por otro lado, sabía que sus padres nunca aprobarían que ambos estuvieran juntos, pues él era mestizo, su sangre era la misma que la de la gente del cielo, era imposible. Salió del agua para respirar y tratar de distraer la tristeza que estaba creciendo en su ser. Se dejó flotar mirando al cielo, el cual empezaba a oscurecerse debido al eclipse que se iba a producir pronto.

-Hola, ¿que haces aquí sola?- esa voz de nuevo. La muchacha pegó un respingo del susto antes de mirarlo. Estaba montado en un Ilu, su silueta esbelta sólo se resaltaba aún más desde ese punto de vista. -Despejarme, ahora que mi hermana está con nuestra madre, sé que está segura y puedo descansar.- respondió mientras daba unos aleteos con los brazos como si removiera el agua. -¿Tú que haces por éstas aguas?-preguntó ella curiosa mientras miraba a los alrededores para ver si divisaba algún rostro amigo.
-Pues estaba nadando hasta que vi a una chica conocida salir de un bosque de algas y decidí acercarme a preguntar si estaba muy ocupada.- decía mientras sonreía enseñando sus dientes, siendo las paletas más largas a la par que sus colmillos, cosa que hacía su sonrisa aún más bonita. ¿Había algo en él que no le gustara?
-Pues ya tienes tu respuesta.-dijo ella apoyándose en el Ilu para acariciarlo. - ¿Te parece bien si me enseñas un poco más de vuestro clan?- preguntó bajando las orejas ligeramente, no estaba seguro de si aceptaría, pero deseaba pasar un poco más de tiempo con ella.
Nerangti se quedó muda ante tal propuesta, obviamente que deseaba dar un paseo con él. Ella le sonrió mientras se montaba detrás de él en el Ilu. Pasó uno de sus brazos por el abdomen del chico para sujetarse mientras que con la otra le tocaba el pecho.
-Tu corazón va muy rápido, te ahogarás si tratas de nadar así, cálmate.- dijo por lo bajo mientras le quitaba la mano del pecho y el Ilu empezaba lentamente a descender.

Espero que disfrutéis y que os guste la historia. Jejeje.