Hate - [Jacaegon]

Parte I: Volver

— ¡Otto Hightower!

Y con ese grito de Aegon, fue como llegamos a esta situación, estando todos aún en camisón de dormir de pie en la sala del trono, únicamente la familia real estaba presente, Aegon caminaba por el salón dando grandes zancadas, mirando con rabia al hombre que estaba hincado enfrente suyo.

¿Puedes explicarme qué mierda es esto? — gruñó entre dientes mostrando una carta que provenía del muro, Otto frunció el ceño fingiendo leer y después se encogió de hombros.

No veo el problema, su majestad — Aegon Tragaryen gruñó y lo tomó del camisón, alzandolo, sacando una exclamación de preocupación de Allicent.

— Aegon, cariño…

Ahora no, madre — dijo entre dientes, sentía como toda la rabia y el enojo lo estaban acalorando — ¿Por qué coño mandaste a mis sobrinos al muro?, ¿¡Tienes una puta idea de los tipos de personas que se podían encontrar ahí!? — lo empujó lejos, dejando caer al hombre viejo al piso, quien se quejo — ¡Eran unos niños!, ¡Joffrey ni siquiera tenía un mes de vida! — Otto Hightower asintió mientras se levantaba.

Era la única manera en que no estorbaran para su ascenso al trono, su majestad — explico, Aegon bufó con ironía.

¿Mi ascenso?, ¡Su madre era la heredera!, ¡Jacaerys  tenía más derecho que yo en la línea de sucesión! — se dió la vuelta y miro a Criston Cole — Sir Criston, le ordenó ir ahora mismo al muro y traerme a mis sobrinos, llévese a todos los hombres si le apetece, pero traigalos — exigió, el caballero miro a la reina madre Allicent, está solo le asintió, indicándole que hiciera lo que su rey exigía, este volvió a mirar al rey y asintió, caminando hacia la salida para preparar todo, Aegon volvió a ver a Otto — En cuánto a ti, querido abuelo, te toca un castigo ejemplar, nadie conspira contra la corona y sale indemne.

Allicent se interpuso entre su hijo y su padre — Aegon, cariño, por favor, ten piedad, tu abuelo lo hizo por la seguridad de ustedes, por la tuya, la de tus hermanos…

¿Seguridad?, ¡Eran unos niños! — reclamó, usualmente le tendría miedo a su madre, pero ahora mismo estaba tan enojado que poco le importaba que la que estuviese frente a él fuera su progenitora, Allicent dió un paso atrás, doblegandose.

— Lo sé, pero Aegon, en la guerra…

¡Guerra es por la que ahora estamos pasando, madre! — recrimino, inhaló y exhaló, cerró sus ojos tratando de encontrar calma — guerra es la que nos declaró Daemon hace 2 semanas, no una que ni siquiera pasaba por la mente de unos niños — miro a su madre con enojo, quien se encogió en su lugar, nuevamente volvió su vista a Otto Hightower — Vas a acompañar a Sir Criston por mis sobrinos y escúchame muy bien abuelo, si alguno de ellos no regresa con vida, tu te convertirás en la cena de Sunfyre, no me importará sino fue tu culpa incluso, tu único trabajo es hacer que vengan con vida — le gruñó, Otto se levantó sin siquiera mostrarse aturdido, asintiendo hacia el rey.

— Como usted diga, majestad.

Aegon le gruñó y salió del salón, siendo alcanzado por su hermano Aemond.

¿Realmente están vivos? — preguntó con confusión, Aegon asintió y le entrego la hoja.

Aemond empezó a leer la nota, era una carta del muro de hace 2 días, dónde se notificaba que los bastardos Waters de cabello castaño estaban bien, a pesar de que en la última exploración Jace recibió una flecha en su hombro, flecha que ya estaba siendo tratada y sanada. Aemond frunció el ceño y miro a su hermano.

Pero aquí dice Waters, ¿Cómo estás seguro que no se trata de otros bastardos? — Aegon hizo una mueca.

Honestamente, ni yo sabía que se trataban de nuestros sobrinos, sólo fue un golpe de suerte que el abuelo confesara — se rasco la nuca con ligera vergüenza, cuando encontró la carta estaba muy perdido debido al vino en su sistema, como usualmente pasaba, toda su mente se llenaba del recuerdo de Jacaerys, entonces al encontrar la carta y leer "bastardos" lo relacionó, nunca se espero que así fuera.