"The moon
And the stars
Tried their best,
But I couldn't
Look away
From you."
[Otoño de 2006]
Suguru es intolerante a la lactosa. Él sabe, desde pequeño, que un poco de leche basta para hacerle añicos los intestinos y para dejarlo internado horas incalculables en el baño. También sabe que está perdiendo su clase de las nueve porque tomó un café con leche por error, y odia cagar en baños públicos, pero realmente no tiene otra opción. Sus manos abrazan su abdomen con vehemencia mientras inclina su mata de cabellos oscuros hacia abajo, como rezando, como en pleno predicamento, como pidiendo por piedad.
Pero los dioses (y los santos y las hadas y el universo) no tienen planes bondadosos para Suguru esa mañana. No cuando los baños de la universidad son tan concurridos, y cuando sólo hay un cubículo funcionando en ese tocador de entrepiso. Entre respiraciones agitadas y sudor salado, Suguru escucha pasos. Pasos ágiles, estrepitosos, de esos que abollan autos a la madrugada. Alguien abre la puerta de entrada del baño de una patada y, en tan sólo un par de segundos, Suguru es testigo de como un querubín baja del cielo.
(Alquien se le mete al cubículo sin siquiera saber que está ocupado, pero Suguru no lo procesa al instante, sino que tarda varios segundos en los que el joven en frente suyo apoya su cabeza contra la puerta y respira cansado)
Cuando el querubín voltea (ah, tiene el cabello blanco, es como un angel) sus ojos están tan sorprendidos como los de Suguru. El joven ya no tiene tiempo para cambiar de cubículo "Alguien me persigue!" Exclama en su divinidad infinita y Suguru piensa, tontamente, que de seguro alguien tan malvado como el diablo lo quiere atrapar.
"Por favor abrí las piernas." Lo próximo que ve son dos manos a la altura de su rostro, enlazadas como cuando las señoras van a rezar a la iglesia. Pero esto no es una iglesia, es un baño.
"Abrir las piernas!?" Suguru tapa su miembro con la parte de abajo de su remera negra, y es espectador de la mirada más desesperada que jamás vio en su vida. Piensa en las perlas, ah, ojos de perlas, bañados en crack. Lo anota en su cabeza para más tarde.
"Hay un tipo que me está persiguiendo, me quiere matar. Necesito apoyar los pies sobre el inodoro para que no vea desde abajo que estoy en el cubículo, por favor!!! Te pago, hago lo que quieras, pero abrí las piernas!!!"
Suguru intenta no pensar en lo bizarra que es la situación, en serio. Mientras abre las piernas lo único que repite su cabeza es "esto es un grave error, no deberías abrir las piernas, no deberías abrir nada". Pero lo hace, Suguru lo hace, como si estuviese perdido entre los cantos angelicales que escuchaba de niño en los coros de la iglesia.
De inmediato el joven coloca sus pies sobre la tapa del inodoro y apoya su espalda contra la puerta. Suguru sólo puede pensar en su presencia, la siente hasta dentro de sus huellas digitales. El querubín es... extraño. Extravagante? Recién salido de otro mundo? Hermoso. Hermoso. Hermoso. Suguru piensa que si entablaran una conversación no podría entender una palabra. Tiene unos pantalones negros ajustados, un par de medias de red que llegan hasta su cintura y no está usando ninguna remera, pero si un tapado de piel de leopardo. Más allá de lo bien que se viste (porque parece recién salido de una pasarela) Suguru ve moretones en su pecho.
Suguru abre los ojos de golpe, acaso dijo que alguien lo quiere matar?
No tiene mucho tiempo para meditarlo, porque de inmediato la puerta principal del baño se abre con la fuerza de una patada atroz.
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love is suicide • satosugu
FanfictionAlfombras amarillas, celulares con tapa y cigarros manchados con labial. O Satoru es prostituto, Suguru está traumado y pensar en el amor es un suicidio.