Capítulo 11

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Todas mis dudas desaparecieron de golpe cuando a lo lejos empecé a ver unos edificios de madera, unos eran bajitos y otros altos, no era para nada a lo que yo me imaginaba. Además el instituto estaba al aire libre rodeado de árboles. Claus paró como en una entrada o recibidor aun no sabia bien bien lo que era, baje del coche con la boca abierta no paraba de ver detalles por todos los lados, daba vueltas sobre mi misma cuando una voz sonó a mis espaldas.

–¿Sorprendida señorita Moon? –Me gire y observe a una señora mayor, sabia que tenia una longeva edad por las arrugas que tenía en su cara, llevaba un vestido blanco acompañado de un collar extravagante con una forma extraña en el medio, me quedé mirando el collar intentando descifrar qué significa ese símbolo. Al ver que yo no respondía mi madre habló por mi.

–Señora Wilver –Vi como mi madre se agachó en señal de respeto y ahi lo supuse esa señora debía ser la directora, antes de que mi madre me dijera algo decidí hablar y disculparme con la señora Wilver.

–Lamento no haberla respondido señora Wilver estaba cautivada por su collar.
–No pasa nada querida. ¿Es bonito cierto? Me lo regaló mi madre, es una reliquia familiar.

–Transmite tantas cosas que es imposible describirlo con una palabra señora Wilver.

–Es cierto, y bueno cuentenme que tal el viaje imagino Julia que a ti no se te habrá hecho tan complicado al fin y al cabo estuvo aquí hace menos de dos meses.

–¿Disculpa? –pregunte desconcertada mirando a mi madre pero ella me evito–

–El viaje ha ido bien, gracias por preguntar.

–¿Qué les parece si pasamos a mi despacho y así le explicó a la señorita Moon como funciona el Odedll?--Ambas asentimos y entramos dentro del recinto ellas continuaron caminando pero yo no pude mis piernas y mi cerebro no reaccionó al ver lo que estaba viendo. Una gran cascada caía desde el cielo nada más entrar en la puerta principal era una imagen preciosa de ver e indescriptible de explicar–Señorita Moon–me llamo Wilver.

–Voy –Las seguí hasta el despacho, llevaba poco tiempo dentro del Odedll pero lo poco que llevaba no había visto nada de magia de la que yo me esperaba solo magia de lo hermoso que era todo, quizás era a ese tipo de magia a la que se refieren y yo era la equivocada.

–Bueno señorita Moon imagino que deseara saber que es el Odedll y cuál será su función aquí.

–La verdad es que sí.

–El Odedll es la Organización de estudiantes de la llamada y es el instituto donde enseñamos  a las nuevas generaciones a descubrir sus dones y a controlarlos.

–Si eso ya me lo comentó mi madre. ¿Y cuál es mi don?--pregunte impaciente–

–Eso es lo que haremos aquí descubrirlo y enseñarte para que lo puedes usar y para que no.

–A, ¿entonces me darán clases particulares?

–No, tu madre me ha dicho que tienes diecisiete años.

–Si bueno cumplo los dieciocho en nada.

–Tienes diecisiete querida no quieras correr, por la edad que tienes te juntaré con un grupo de adolescentes de tu edad.

–En clase?--pregunte asustada–

–En clase y en vuestro bungalow.

–¿Como nuestro bungalow?
–Viviréis juntos–yo me quede con la boca abierta sin saber qué decir–Ari si me disculpas me gustaría hablar con tu madre a solas.

–De acuerdo.

–Puedes esperar fuera.

Salí fuera y me senté enfrente de unos bancos, me tapé la cara, ahora estaba más nerviosa que nunca, era muy tímida y me costaba mucho hacer amigos, me auto abracé las piernas ya que no paraban de temblar y escondí mi cara entre ellas.

–¿Perdona estás bien?

The StainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora