Lazo Roto | Michaeng (Completa)

→Cap 27 ; ❀

— ¿Y haz pedido que te cambien para clases en línea? — aunque Mina se mostrase bien al respecto, la realidad era muy distinta, le hubiera encantado que Chaeyoung siguiera en la universidad, y aunque continuaría con sus estudios, el solo pensar que ya no la vería por el campus la hacía sentir triste.

Chaeyoung no pudo evitar sentirse un poco mal al respecto, sabía que Mina la quería tener lo más cerca posible, pero esto era necesario, ya que a veces Chaeyoung tenía que subir demasiados escalones para poder traspasarse de piso de los edificios para tomar alguna clase, y eso no era tan justo para alguien que le empiezan a doler los pies por la hinchazón y que ahora pesa un poco más, es sumamente agotador.

— No pongas esa cara, Mina, estaré bien aquí — mencionó Chaeyoung acercándose a la mayor que parecía no estar tan convencida por sus palabras.

— No es eso —negó lentamente—, ¿estás segura de hacer esto? Puedo cargarte a tus clases si deseas.

Chaeyoung rió al escuchar eso, era la propuesta más torpe y tierna que le habían hecho en toda su corta existencia en ese mundo, debía admitir que imaginar a Mina cargándola hasta dejarla en sus clases sería algo muy divertido, aunque ella se sentiría muy avergonzada, seguramente las miradas estarían sobre ellas en todo momento en que hagan eso hasta que los de alrededor se acostumbren a los hechos, pero no era como si Chaeyoung quisiera que Mina estuviera perdiendo clases por culpa suya, así que lo mejor era tomar sus clases por Internet y poder estar en casa.

— Te cansarías y no quiero lastimarte, no quiero que por mi culpa salgas lastimada de la columna o que pierdas alguna clase — Mina soltó un resoplido en respuesta—, esto es lo mejor, Minari.

— ¿Sabes qué voy a extrañarte? La universidad no será lo mismo sin ti paseando por allí...

— Podremos vernos los fines de semana — Mina asintió, esa era una buena idea.

La realidad era que Mina no quería estar para nada separada de la omega, le agradaba su compañía en todo momento, y aunque sabía que debía llegar la hora del día en que se tenían que separar, sabía que Chaeyoung siempre estaría en su mente y que podía llegar a protegerla, en verdad se siente como un niño que no quiere despegarse de sus padres, solo que ahora la situación era muy distinta, no quiere dejar a Son, quiere ser parte de cada minuto de su vida.

Miró como la coreana iba de un lado a otro, parecía cansada pero a la vez tan animada, sus ropas eran holgadas y dejaban ver un poco su vientre abultado que resaltaba un poco más.

— Deja de mirarme así — mencionó la menor al sentir la mirada de la alfa en todo momento.

— No te miro de mala forma — mencionó Mina sin siquiera apartar la mirada—, te ves adorable en esas prendas.

— No, no me veo linda ni nada por el estilo —soltó un bufido—, ¡solo mírame! Parece que acabo de meter una almohada dentro de mi ropa y ni siquiera es así.

Mina rodó los ojos al escuchar esas palabras, para ella se ve perfecta, no importa como esté vestida, no importa si sobresale su vientre de esa forma, no importa que sus cabellos estén algo desarreglados, Chaeyoung es perfecta tal cual es.

— ¿Me dejarás abrazarte? — preguntó a lo que Chaeyoung negó divertida.

— Después, cero contacto físico — canturreó Chaeyoung a lo que Mina rodó de nueva cuenta los ojos, le agrada tener que recibir ordenes de su pareja, pero aún así quería abrazarla y darle el cariño que se merece.

Mina sabe que todo omega en cinta a veces se pone demasiado necesitado de mimos de su pareja, y Mina quería complacer esa necesidad para Chaeyoung, pero lo más que la menor le ha dejado hacer, había sido acariciar su cabello, el cual Mina debía admitir que es muy sedoso y esponjoso, le encantó.

— Tengo que irme — mencionó la nipona— tengo que terminar un pequeño detalle de un proyecto en computadora — resopló, no le gustaban esos proyectos—, ¿gustas que te traiga algo que se te ofrezca?

— De hecho... — Chaeyoung se acercó hacia ella—, ¿me harías un pequeño favor?

Mina dio un asentimiento.

— ¿Puedes cerrar los ojos? — frunció el ceño al escuchar eso, pero no quería desobedecer, así que sin más asintió y cerró sus parpados, no sabía lo que pasaría o si acaso Chaeyoung le tenía preparada una sorpresa.

Pero cuando menos lo esperó, sintió algo en sus labios, y abrió los ojos, Chaeyoung le estaba dando un beso, cuando la menor se separó y abrió los ojos, frunció el ceño.

— Te dije que cerraras los ojos.

— ¿Puedo besarte de vuelta?

— No...

— ¡Chae! — la coreana soltó una risa al escuchar la queja de Mina.

Q historias tan soft tengo en mi perfil, hasta no se me nota lo traumadito en la vida amorosa🤭