Lazo Roto | Michaeng (Completa)

→Cap 28 ; ❀

Sana notaba la felicidad en Mina, era demasiado notable y parecía que se estaba volviendo toda una completa idiota.

— ¡Hey! — aventó una pequeña bola de papel hacia su amiga la cual cayó justo en su frente como ella quería.

— ¿Qué? ¿Qué pasa? — Sana soltó una suave risa al escuchar esas dos preguntas hechas por su amiga, pero era necesario sacarla por unos momentos de esa nube de felicidad, pues posiblemente le llamen la atención.

— Nada en particular — se encogió de hombros— pero créeme, no deberías andar paseando con esa tonta sonrisa por todos lados, los profesores seguramente ya han de estar pensando que te haz drogado con alguna extraña sustancia del laboratorio.

Mina frunció el ceño al escuchar eso, no era para tanto, no podía verse tan perdida como Sana le estaba diciendo, o eso es lo que ella pensaba, tal vez si alguien se atreviera afirmarlo, seguramente hasta ella pensaría que se había drogado con algo demasiado fuerte para poner aquella sonrisa de felicidad, ya nadie podía sonreír normal, si lo hacías porque en realidad te sentías eufórico, seguramente pensarían que estas loco o que simplemente te haz metido alguna sustancia, aunque no es necesario para sentirse de ese modo.

— En fin, ¿irás a ver a Chae? — pregunto a lo que Mina soltó un suspiro para después asentir — Entonces seguramente es lo que te tiene por las nubes.

— Un poco — mencionó en respuesta—, me ha besado.

— Por unos momentos pensé que serías tu quien la besaría.

— También lo pensé, pero — sonrió—, fue genial que ella lo hiciera así de imprevisto para mí, sinceramente me tomó por sorpresa y eso me encantó.

— Ella si que sabe lo que quiere — mencionó Sana — usualmente esperan a que des tú el primer paso, pero Chaeyoung se ve que es muy distinta ¿crees que tenga algo que ver con lo del lazo roto?

— No estoy tan segura de eso, me parece que ella tiene una actitud fuerte e independiente, es fabulosa, aunque a veces me gustaría que se dejara consentir un poco.

Sana se encogió de hombros, conseguir parejas como Chaeyoung era algo que no podía ver mucho, y es que casi siempre se regían a las viejas costumbres en las que el alfa le daba todo al omega mientras que el omega se dejaba consentir de por medio y quería que la conquista la llevase a cabo el alfa, por supuesto los tiempos cambiaron, y aunque se siga llevando a cabo la misma tradición de conquistar, ahora podías ver que los omegas gustaban de participar en el mismo, para así poder sentir al alfa querido y viceversa, era mejor y algo más considerado.

— Ya quisiera yo tener a alguien así — mencionó Sana—, tienes mucha suerte amiga.

— No creo que la suerte haya tenido que ver con esto...

— ¿Me dirás que el destino lo hizo? — Mina dio un leve asentimiento sorprendiendo a Sana en el proceso— ¿No se supone que tu intelecto te impedía seguir esas tonterías del pasado?

— ¡Oh, cállate! — empujó levemente a su amiga causándole una risa—. Solo... creo que a veces puedes cruzar tu camino con alguien a quien menos esperas.

— ¿Un encuentro inesperado? Una serendipia.

— Eso es — mencionó Mina asintiendo —, y sinceramente me gusta, por un momento me había visto como una artista incomprendida que se la pasaba solamente encerrada creando obras maestras.

— Créeme que te vi de la misma forma — Mina rodó los ojos ante ese comentario—, pero es bueno que Chae haya llegado a sacarte de esa tonta vida que llevabas, al menos te haz logrado enamorar, parecía que tenías el corazón más frío que la punta del monte Everest.

— No soy tan insensible.

— Corrección, eras una insensible, debiste ver a cuantas chicas tuve que mencionarles que no estabas interesada, y eso que ellas creían que les hacías caso.

— Exageras los hechos.

— ¡No lo hago, amiga mía!

Mina admitía que en realidad no lo hacía del todo, siempre se había imaginado que no tendría a nadie de por medio que la hiciera descolocarse de sus metas, la llegada de Chaeyoung a su vida había sido un golpe directo a lo que ella creía, y definitivamente muy inesperado, por supuesto no quería dejar ir esa oportunidad, tal vez el destino se lo tenía preparado y si podía estar con esa hermosa mujer, entonces aceptaría su destino.

Definitivamente ama su destino.