Taehyung solo quiere acercarse a su pareja que es una linda alpaquita, de nombre SeokJin quien solo huye de él al ser un depredador.
[FINALIZADO] ✓
★Historia original
★Omegaverse
★TaeJin
★BL
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Dorados.
Su profunda mirada es dorada.
SeokJin traga en seco sintiéndose nervioso, pues toda su piel hormiguea por el toque del alfa.
—No te vayas por favor —pide acercándose.
—Es lo mejor, solo déjame ir —Jin evita su mirada a toda costa.
—Tú ya lo sabes.
Jin puede sentir como el aroma de Taehyung se intensifica.
—Tú ya sabes que eres mio, que eres mi omega.
—¿Qué? —Jin siente un nudo formándose en su garganta.
—¡Mírame! —exclama frustrado.
La presa niega y trata de soltarse de su agarre.
—Tú solo quieres seguir huyendo —la voz de Taehyung es más grave.
Tae suspira sintiéndo a su tigre inquieto.
—Solo dilo entonces. Di que me rechazas como tu alfa —Tae lo suelta al decirlo.
SeokJin no quiere, no quiere decirlo. Pero las palabras de Jimin invaden su cabeza, también las advertencias de sus padres.
¿Qué debería hacer?
—Ni siquiera puedes mirarme a los ojos, dime porqué. ¡Maldición di algo! —añade furioso.
—No puedo... —su voz es baja— ,eres un depredador.
—Pero jamás te haría daño, no creo poder hacerlo. Alpaqui... —Tae corta sus palabras— , SeokJin solo dilo y me iré.
Él ya no lo llamo de forma cariñosa y eso le dolió, ya no era ni sería su alpaquita nunca si lo rechaza.
No quería.
No.
SeokJin siente su corazón latir a toda prisa y sus mejillas se calientan, aún así se atreve a mirarlo.
Mira directamente esos profundos ojos dorados y ahí esta esa sensación, siente miles de fuegos artificiales estallar en su pecho.
Pinos y menta. Aroma a alfa.
Su alfa.
Da pasos lentos que son jodidamente tortuosos para Taehyung, Jin se acerca y nota que él solo le lleva unos pocos centímetros de altura, así que solo lo hace.
Choca sus esponjosos labios contra los del depredador, quién se sorprende ante la repentina acción, sin embargo no soportaría tenerlo así y no hacer nada. Tae suspira y comienza a besarlo de manera lenta y profunda, sintiéndose muy feliz al sentir como el omega permitía la acción.
El omega siente como las manos del alfa se posan en su cintura, así que tímidamente rodea con sus brazos su cuello, dejando también que el depredador muerda y bese sus gorditos labios.
Minutos después Jin esconde su cara encendida en el cuello del alfa, justo en sus glándulas de aroma y aspira.
—No quiero, no quiero decirlo Tae —confiesa triste.
