Estaba llegando a la cocina cuando sentí un fuerte dolor de cabeza. Alguien me sostuvo fuerte del brazo y me habló, veía borroso pero lo poco que podía ver era una niña que me llamaba...
Cerré los ojos con fuerza y los volví a abrir, y cómo si nada hubiera pasado, el dolor de cabeza se había ido. Me giré para ver a la persona que me llamaba y que creí que era una niña.
—Lou Anne, ¿estás bien? —Preguntó Katherine angustiada sujetandome el brazo.
—Si si, solo fue un dolor de cabeza que me dió por un momento.
Al ver la cara de Katherine aún preocupada tuve que explicarle que ya estaba mejor:
–Estoy bien, tranquila—Que bueno, porque de veraz me preocupé.
—Le sonreí —Camille dónde está? ¿Cómo le fue?
—No se cómo le habrá ido con Thomas, yo estaba en la cocina socializando un rato con la amiga de Camille. Busquemos a Cam en el patio, ella iba a estar allí.
Fuímos hacia el jardín, justo cuando nos faltaba un par de metros para atravesar la entrada del patio se nos atravesó un montón de gente bailando, se dirigían a la pista de baile. Pareciera que todos los que estaban afuera en el patio estaban entrando para bailar.
Katherine y yo esperábamos a que toda la gente que estaba afuera entrara para nosotras poder salir.
Yo agarré un vaso que estaba en una mesita junto a nosotras, tenía cóctel en el.
—No pensarás en tomártelo, o si?
—Pues si Katherine, me lo tomaré. Es una fiesta, hay que disfrutar —quería divertirme, hacía tiempo que no lo hacía.
—Pero no que no tomabas?
Me tomé la bebida de un trago y lo volví a dejar en la mesa.
—Disfrutemos la fiesta y encontremos a Cam.
La chica pelirroja, la cuál aún no me sabía su nombre, y Camille entraron bailando pasando justo frente a nosotras.
—¡Camille, te estábamos buscando! —dijo Katherine.
—¿¡Cómo te fue!? —pregunté.
—Super bien chicas. Vengan y bailemos un rato, luego les contaré los detalles.
Katherine me hizo un ademán para ir con ellas, y yo acepté.
Bailamos un buen rato, cantamos, saltamos, nos divertíamos mucho.
Yo estaba disfrutando mucho la fiesta y bailar allí con ellas aunque ya me dolían los pies, así que fui a sentarme aunque antes me desvié a servirme otro vaso.
Terminé de servirme el vaso y me fui a sentar en una de las mesa en el jardín, el cual estaba solo ya que todos estaban adentro bailando, a excepción de unas chicas que estaban sentadas charlando en otra mesa lejos de la mía.
—Puedo? —refiriéndose a sentarse junto a mi en la mesa.
Estaba distraída jugando con mi vaso del coctel que Jaden me tomó desprevenida.
—Otra vez tú —Creí que lo había dicho en mi cabeza, pero no, lo dije en voz alta.
—Pues si, otra vez yo. Te molesta eso?
—No no, para nada. Porfavor siéntate —señalé la silla que estaba junto a mi.
—Cuántos de esos ya te has tomado? —preguntó mientras tomaba asiento.
—Bueno, no quería tomar pero después me dije "Heyy Lou es una fiesta, hay que disfrutar" así que solo por hoy tomaré, no te preocupes.
—Se que tu no eres de tomar y está bien que decidas divertirte solo por hoy —me miró serio— Aunque creo que por hoy es suficiente.
—Oye, no te lo-...
Jaden me arrebató el vaso y me miró con las cejas arquedas esperando a ver si yo diría algo más.
—Está bienn, por hoy fué suficiente —puse los ojos en blanco—. Siempre me tratas como tu hermana menor y solo nos llevamos 1 año y medio. Eso molesta ¿sabes?
—¿Que es lo que te molesta? —Preguntó con el ceño fruncido.
—Que me estés protegiendo siempre, ya no soy una niña, tengo 16 años casi 17.
—Lo sé, solo lo hago porque te quiero y no quiero que te lastimes o te pase algo malo.
—Ja! —Dije con una voz victoriosa, ya estaba hablando sin pensar las cosas. Gracias cóctel–. Así que acabas de admitir que me quieres.
—No
—Si lo hiciste
—No lo hice.
—Admitíste que me querías, es cierto si o no?
—Si.
—Lo sabía —dije felizmente.
—Es que por que no lo haría? Nos conocemos desde niños. Además, de todo lo que te dije eso fue lo único a lo que le prestaste atención?
—Emm. Si, fue lo más interesante de todo lo que dijiste.
—Ah claro.
Volvió a darme otro dolor punzante en la cabeza pero esta vez fué peor que el anterior y volvió la sensación de que había olvidado algo importante.
—¿Te sientes bien Lou? ¿Que tienes?
—Agh —me quejé sosteniendo mi cabeza con ambas manos— Siento un dolor punzante.
—Creo que deberías ir a casa y descansar. Vamos, yo te llevo.
—No! —Dije francamente— No quiero que mi papá me vea así, me quedaré en casa de Camille.
—Bueno, voy por ellas. Espera aquí.
—Adonde más iría?
Jaden se fue a buscar a Katherine y Camille, y a mi poco a poco se me estaba yendo el dolor de cabeza.
Jaden llegó con ellas y ya se me había calmado el dolor, ya había vuelto a ser la Lou que se tomó un par de cócteles de más.
Katherine fue la primera en hablar.
—Te dije que no era buena idea lo del cóctel.
—Te sientes bien? —preguntó Camille.
—Si que si, estoy bien chicas.
—Vamos a casa Lou Anne.— dijo Camille.— Ya disfrutamos lo suficiente.
—Okkk, pero antes esperen...
Me agaché para quitarme los tacones, me dolían horrible los pies, no estaba muy acostumbrada que digamos a usarlos.
—No piensas ir descalza —Katherine me miró esperando que la respuesta fuera un no pero sabía que seríalo contrario.
—Me duelen mucho los pies, igualmente caminaré dos casas y ya Camille vive prácticamente al lado.
—Bueno, pero yo las acompaño —Soltó Jaden.
—Está bien Romeo, como quieras.
Jaden se rió. Katherine y Camille se vieron con extrañeza.
—Me agrada esta Lou Anne sin filtro —comentó Camille.
A mí no me agrada para nada.
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La vida soñada no tan perfecta
Science FictionQue harías si tuvieras la opción de poder elegir vivir la vida que siempre anhelaste y soñaste tener o seguir viviendo en la triste y aburrida vida que siempre haz tenido? Aunque la oferta de vivir en tu vida soñada sea muy tentadora, no siempre es...