Hoy me levanté como era costumbre. Sebastian vino a despertarme abriendo la cortina para que los fugaces rayos del sol iluminaran el cuarto. Me vistió y una vez fui a mi despacho a seguir trabajando me leyó correspondencia. Entre ellas una carta extraña a simple vista.
Una carta con el sello de araña.
Aquella era una invitación, más específicamente a un baile de disfraces. Me reí por lo infantil, nunca hubiera imaginado que la Araña de la reina fuese tan inmaduro.
Oh, Sebastian me leyó un nombre de posdata.
Empezaba con "A" ¿Alan?, ¿Albedo?, ¿Armin?
» El conde Alois, maestro. ¿Quiere que le envie otra carta en dónde agradece y confirma la invitación? «
Me quedé perdido en mis pensamientos un momento hasta que oí la cuestión de Sebastian y accedí. Necesito encontrarme más cerca de ese sujeto... Para revelar quien realmente es, el conde Alois Trancy.
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