One Night [enzoxjuli] [adp]

07

-¿Papi a donde vamos?- preguntó la pequeña saliendo de su cuarto con el vestido que su padre le había indicado ponerse.

-Vamos a tomar un café con... tu maestro- admitió esperando que la niña no le hiciera más preguntas.

-¡el señor Álvarez !- dijo la niña, emocionada.

-Sí... el señor Álvarez ― repitió.

-Papá te ves muy guapo hoy- elogió mientras reía tiernamente.

-Gracias mi niña― Enzo sonrió tu te ves como una princesa con tu vestido-la alzó en sus brazos para darle un beso en la mejilla, el cual fue devuelto por la niña.

Salieron de la casa faltando veinte minutos para el encuentro pues la cafetería les quedaba cerca.

Enzo se dio un vistazo en el retrovisor para verificar que su cabello siguiera en su lugar y entonces las preguntas vinieron a su mente. ¿Por qué aceptó la salida? Sinceramente ni él sabía pero en el momento que Julián le hizo la propuesta en su cabeza nunca fue una opción el decir que no.

Supongo que está bien agrandar mi círculo dé amigos trató de convencerse.

Estacionó frente a aquel lugar que había frecuentado mucho en su adolescencia y desabrochó su cinturón para salir de el auto, recibiendo un mensaje de su mejor amigo.
[rodrigo]
Insisto, traeme a oli para que estés a sola con álvarez

rodri ya te dije que no, a parte ya llegamos

Aaaaagh, pero no van a poder hacer nada frente a la
nena

Nunca dije que ibamos a hacer algo, es salida de AMIGOS

Tu falsa heterosexualidad me da nauseas

Yo también te quiero

Puto

olí también salió, tomandole la mano a su padre.

A penas cruzó la puerta pudo divisar a un castaño concentrado en su celular. Sonrió inconscientemente.

-¡Mira papá! ¡Está allá!- exclamó emocionada mientras apuntaba hacia su maestro.

-¿Qué te he dicho de apuntar hacia las personas?- regañó, caminando hacia aquella mesa.

Julian al escuchar a la niña alzó su vista y sonrió agitando su mano en el aire, en señal de saludo.

Una vez Enzo estuvo frente a la mesa el castaño se puso de pie para saludarlo con un beso en la mejilla- Hola, viniste.

El rubio se sintió extraño por aquella demostración, más no incomodo- Sí, no te iba a dejar plantado-bromeó rompiendo la tensión que se sentía.

-Hola pequeña- Julian se agachó un poco y le extendió su mano a la niña, quien la aceptó amablemente.

-Buenas tardes-dijo con mucha educación.

Los tres tomaron asiento en aquella mesa y Julian habló― ¿Cómo estuvo tu día?-se dirigió hacia Enzo.

-Bien, me la pasé acostado cuando llegue a mi casa- contestó tratando de mantener una conversación.

-¿Eso no es aburrido?

-Para mi es la gloría, casi siempre trabajó- comentó.

-¿En qué traba...

-Oh dios mio, hola Enzo que coincidencia encontrarte aquí- una voz ajena interrumpió a Julian.

rodrigo