𝐒𝐀𝐕𝐀𝐆𝐄 | mo dao zu shi

14: maniquíes.

Tan solo en el momento en que este ataúd fue abierto, sabía que algo malo sucedería. Quien se encontraba dentro de este no era nada más ni nada menos que Xiao Xing Chen, aquel discípulo que abandonó la montaña de donde vivía tan solo 17 años quien tenía un mejor amigo conocido como Song Lan, quien ayudó a solventar el caos que se generó por Xue Yang, aquella persona que hizo un desastre con la secta Yueyang Chang.

Tan pronto como esto se dio, la mujer fantasma había desaparecido e inesperadamente un ruido en la puerta también sucedió. Sentía mi piel erizada completamente y tan rápido como pude, me había acercado a Sizhui buscando consuelo detrás suyo, quien no dijo nada mientras sus cejas bajaban entre el espacio de su frente haciendo demostrar que estaba preparado para lo que fuera.

—¿A dónde crees que vas? —mi voz salió de manera inconsciente cuando vi a Mo Xuanyu acercarse hacia la puerta, este se volteó a mí y parpadeó con una sonrisa.

—Voy a abrir la puerta, claro está.

—¡¿Por qué irías a abrir la puerta?! —Jin Ling salió a la defensiva mientras igualmente daba un paso adelante y encaraba a Mo Xuanyu —, la situación está muy mal para dejar que otra persona entre. No sabemos quién es, ¿Y si es amigo o enemigo? ¿Lo dejarás estar entre nosotros esperando que algo nos ocurra?

—No pasa nada con descubrir quién es —apuntó, siguiendo su camino como si no temiera de nada y abrió la puerta sin si quiera observar por alguna ranura de la puerta, el silencio se instaló tan rápido junto a expresiones de asombro, todos contuvimos la respiración tan solo un momento y el lugar se sentía tan tenso que en el momento de observar hacia la puerta, el alma regresó a todos con un suspiro alentador —¡Lan Zhan!

—¡Hanguang-Jun! —saliendo de atrás de Sizhui, me apresuré a correr incluso pasando por el lado de Mo Xuanyu para estrellarme contra el cuerpo de Hanguang-Jun con un abrazo.

Sentía que volvía a la vida con tan solo la presencia de este aquí, recibiendo unas palmadas en mi cabeza, lo sentí murmurar un saludo por lo bajo mientras daba pasos hacia adelante entrando al lugar. Mo Xuanyu no pudo evitar reír mientras se volteaba hacia nosotros.

—¿Ven? —dijo sonando orgulloso —, no había nada de qué preocuparse.

Sin embargo esto no era del todo cierto, apenas Hanguang-Jun entró, las puertas se cerraron detrás de él y se colocaron unas docenas de sellos en esta, con la intención de bloquear todo lo que viniera de afuera. Rápidamente Hanguang-Jun explicó que la persona de afuera no era nada más ni menos que Xue Yang.

En el momento que todo pareció volver a estar en calma, esta mujer fantasma volvió a aparecer y golpeó el piso con el bambú asustandome por lo imprevisto que fue.

Todo pareció muy ilógico en el momento que una conversación silenciosa se abrió paso entre Mo Xuanyu y Hanguang-Jun, quienes se acercaron hacia esta mujer fantasma y decidieron utilizar “empatía” para poder conocer más a fondo lo que sucedía. Esto se nos fue avisado y estuve a punto de ponerme en contra cuando Sizhui se acercó a mí rápidamente murmurando un “comportate”, mis labios se sellaron de inmediato y podía sentir que empezaba a calentarse mi rostro de impotencia.

—¿Pretenden resistir al ataque de Xue Yang con solo una docena de sellos? —La voz de Jin Ling se hizo presente mientras observaba sin creer lo que ocurría con Hanguang-Jun y Mo Xuanyu, totalmente indignado —, ni si quiera han decidido usar “Inquiry”. Maldita loco.

—La empatía requiere su propio cuerpo como medio para sentir lo que siente el espíritu —Sizhui rápidamente explicó pasado levemente su mirada sobre mí y enfocando esta sobre Jin Ling al final —; si bien es el más peligro, es completamente eficaz y el más directo. Su cultivo es bastante alta, además, el joven amo Mo también lo dijo...