𝐒𝐀𝐕𝐀𝐆𝐄 | mo dao zu shi

15: Lan y Jin. parte 1.

—¡¿A dónde crees que vamos?!

Jin Ling no podía perder la oportunidad de pelear y en el momento en el que Mo Xuanyu se fue, Sizhui nos obligó a dirigirnos hacia una morgue, donde estaba el ataúd de Xiao Xing Chen, la lluvia seguía cayendo fuertemente afuera mientras éramos encerrado dentro del lugar.

—Solamente entre, joven amo Jin —pidió Sizhui, unque su voz no sonaba enojada, en realidad ¡Sí que lo estaba! Durante el momento que Mo Xuanyu se fue, Jin Ling no ha dejado de reprochar por el hecho de que Mo Xuanyu dejara a cargo a Sizhui logrando milagrosamente cansar a este —El joven amo Mo me pidió que cuidara de ustedes.

—¡No te haría caso ni en un millón de años! —gritó, su rostro poniéndose rojo mientras se abalanzaba repentinamente hacia Sizhui, diciéndole que lo dejara salir mientras esté repetía un constante no.

Parecía como si hubiera estado aguantando las ganas de pelearse con él desde antes y finalmente era el momento adecuado.

Realmente estaba sorprendido, nunca había visto a Sizhui llegar a los extremos en los que se encuentra ahora, enredado en una simple pelea debido a las rabietas de Jin Ling. Incluso contestando de vuelta a las cosas que decía.

—¡Por favor, Joven amo Jin, quédese adentro! —gritó, logrando empujar un poco fuerte para separarlo pero no fue suficiente.

—¡No puedes darme ordenes! —en otro intento de acercarse a Sizhui, Jingyi y yo nos colamos en la mitad de estos mientras intentamos retenerlos por completo, algo inútil debido a que incluso fui empujado por Jin Ling hacia un lado mientras le gritaba que se detuviera —, ¡No soy tan idiota como ese Lan que todo el tiempo necesita ser cuidado! ¡No soy tan imbécil como para estar recibiendo ordenes tuyas!

Todo se detuvo un momento, me estaba levantando del suelo mientras sacudía mis manos y al escuchar eso simplemente lo miré dolido. El forcejeo entre Jingyi y Sizhui igualmente se detuvo mientras miraban en mi dirección.

Hubo un silencio horrible que mientras más tiempo pasaba, más incómodo se ponía el ambiente; Jin Ling, la persona con la que pensé que estaba llevándome bien y éramos algo cercanos acababa de decir algo que nunca nadie se había atrevido a decir. aunque mucha gente lo pensara, nadie lo diría y respetaría la decisión tomada por la secta Lan. Jin Ling, de la secta Lanling Jin, acababa de decir frente a los discípulos de la secta Lan algo totalmente personal que nadie debía tocar. Acababa de decirlo frente a mí.

Pareció darse cuenta de lo que dijo ya que rápidamente volteó en dirección a mí, una expresión de arrepentimiento y sorpresa plasmado por completo, incluso dando unos pasos para acercarse a mí. Claramente no llegó.

Sizhui se había soltado del agarre de Jingyi llevándose por la espalda a Jin Ling tumbando su cuerpo al suelo mientras este volvía a forcejear con él. El rostro estaba pintado de un rojo de enojo y por primera vez, las manos golpearon el rostro de Jin Ling con un sonido seco que sonó entre toda la habitación.

—¡Sizhui! —me acerqué lo más rápido que pude a este tratando de quitarlo de encima de Jin Ling —¡Detente! ¡Esto no está bien!

—¡Aléjate! —con un empujón fui alejado nuevamente de ellos dos y todo pareció ponerse peor. Mientras los otros se amontonaban alrededor alentando a que siguieran peleando, a excepción de Jingyi, quien igual trataba de quitarlo de encima del joven amo Jin —¡No vuelvas a dirigirte a él! ¡Jamás! ¡Nada de lo que suceda entre él y yo es de tu incumbencia! ¡Nada del clan Lan es de tu incumbencia!

Esta vez fue el turno de Jin Ling para poder golpear a Sizhui en el pecho haciendo que cayera en su espalda. Rápidamente golpeando su cabeza igual: —¡Ja! ¡¿Si quiera te estás escuchando?! ¡Deja de darle órdenes!