O7: Jin Ling. parte 1

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Nueve de la mañana, intenté apaciguar la molestia que seguro se reflejaba en mi rostro mientras Sizhui llamaba a la puerta del jingshi dos veces.

—¿Joven amo Mo? ¿Ya despertó?

—¿Es necesario hacer esto? —susurré, tirando de las mangas de Sizhui como niño pequeño a lo que él asintió.

Dentro del jingshi provino un grito: —¡¿Quién me llama tan temprano?!

¡¿Temprano?!

—Joven amo Mo, son las nueve de la mañana —hablé.

Todos estábamos despiertos desde las cinco de la mañana, bañados, arreglados y listos para cumplir con las actividades que nos correspondían como todos los días, desperté con el cabello hecho un desastre, Sizhui aplastando un brazo mío y su cara pegada en el hueco del mi cuello, la respiración caliente pasando por esta. Aunque mis ojos no se habían acostumbrado a lo que había alrededor, pude diferenciar la silueta de JingYi y le susurré un "Buenos días" mientras él procedía a quitar a Sizhui de encima y a preguntarme ciertas cosas.

Igualmente sigue sin entender cómo llegué anoche porque luego de que ellos llegaron, no sintió ruido alguno.

—No puedo levantarme —Mo XuanYu volvió a hablar.

—Deja de decir tonterías y sal de una vez. —exclamé.

—¿Amiguito, eres tú? —el apodo que salió de los labios de Mo Xuanyu lo reconocí al instante, la piel de mis brazos se erizó rápidamente teniendo un recuerdo de las atrocidades dichas por él —Amiguito, no puedo levantarme.

—¿Cuál es el problema esta vez? —Sizhui intervino, un poco de enojo en su voz, casi imperceptible.

—Su Hanguang-Jun me lo hizo.

Casi se me sale el alma, la voz furiosa de Jingyi salió al rescate de todos mientras intentaba borrar de mi mente lo dicho anteriormente —Si sigues diciendo tonterías, la vas a pagar ¡Sal de ahí

Mientras otros chicos de la secta pasaban y nos miraban atónitos, solo se pudo escuchar al Mo Xuanyu decir sobre cómo Hanguang-Jun se lo hizo toda la noche y algo de no "tener cara" para salir.

—Tomando en cuenta todo lo que hiciste ayer, Mo Xuanyu, tú no tienes cara que perder —hablé, se escuchó una exclamación de indignación mientras Jingyi volvió a arremeter contra él.

—¡No tienes vergüenza! —fue lo primero que gritó —Hanguang-Jun no es manga cortada. ¡Levántate! Llévate a ese burro tuyo. ¡Hace mucho ruido!

—¡¿Qué le hicieron a mi Manzanita?! No lo toquen, les va a dar una patada.

—¿Quién es Manzanita? —preguntó Jingyi

—¡Mi burro!

Como si esa hubiera sido la clave para que él saliera, nos instó llevarlo a donde estaba su burro, quien hacía un montón de ruido debido a que no podía comer por la culpa de ciertos conejos redondos y blancos, que le impedían la tarea de comer pasto.

[...]

Mi mente tuvo una especie de colapso, luego de la tragedia ocurrida en Gusu Lan y que Mo Xuanyu y Hanguang-Jun salieran de los recesos de la nube, mi mente no recuerda el cómo y porqué pero actualmente estoy con el joven amo, mejor conocido como Jin Ling y su perro, Hada; nombre curioso para un perro. La túnica amarilla con el emblema de su clan era todo lo que podía ver mis ojos con claridad mientras su cabello se meneaba de un lado a otro.

—Jin Ling.

—¿Qué quieres? —como siempre, su actitud grosera sale a la luz, seguramente aprendido por su tío —No sé qué haces siguiéndome. Piérdete.

𝐒𝐀𝐕𝐀𝐆𝐄 | mo dao zu shiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora