GANGSTA'S PARADISE; Han Lue

2. Brasil

Al día siguiente, Brian, Mia y Dom se encontraban mirando las calles de Río desde aquel edificio donde se quedaron la noche anterior.

— Hay que repasar los detalles — dice Brian cruzándose de brazos. — ¿Qué necesitamos?

— Necesitamos un camaleón — comienza Dom sin mirar a Brian, repasando el plan que tenían. — que pueda camuflarse donde sea.

— ¿Qué más? — pregunto Mía dando una mirada a su hermano y Brian.

— Un hablador — continúa Dom. — Que puede mentir y salir de lo que sea.

Brian ríe, el nombre de una persona salió en su memoria al escuchar a Dom. — Ya lo tengo.

— Reyes tendrá mucha vigilancia con necesitamos a alguien que sepa de circuitos — habla Mia pensando en el plan que tenían en mente.

— Con esos circuitos, Reyes tendrá muros, necesitamos gente que atraviese esos muros.

— ¿Algo más? — pregunto Mía.

— Herramientas y armas, alguien que no le tenga miedo a pelear — la mirada de Dom continuaba mirando hacia las calles, repasando el plan que se tenía. — Alguien que le dé apoyo a todos.

— Muy bien, ¿qué más? — preguntó Brian.

— Lo más importante, quiero tres pilotos de precisión, personas que no se quiebren bajo presión y que jamás pierdan.

Mía miró a Brian con una sonrisa. Al igual que el O'Conner sonreía.

— Esos ya los tienes — sonrió Brian. — Y una esta en camino.

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Brina llegó a la dirección que Dom le envió, estacionó el auto encontrando a su hermano esperándole.

— Brina — saludó el O'Conner mayor.

— Brian — saluda la chica cerrando la puerta del auto.

Al estar frente a su hermana, Brina sonríe rompiendo aquella aura de frialdad que les rodeaba.

Brian extiende sus brazos, haciendo que Brina soltara una risa y aceptara el abrazo un gesto que hacían desde niños, al separarse golpeó el hombro del mayor.

— Eso es por no decirme del bebé — reclama Brina.

— Dom, te lo dijo — hablo Brian sonando más a una formación que a una pregunta. — Queríamos sorprenderte.

— Mi hermanito no me hablo de que seria tía, alguien tenía que informarme — dice Brina poniendo sus manos en su caderas pareciendo una tetera.

Brian rodó los ojos al escucharla, pasó su brazo con el cuello de la chica guiándola para ver a los Toretto. Los hermanos O'Connor caminaron al interior de aquel edificio deteniéndose en la entrada de la puerta trasera al ver a los Toretto.

Brina se alejó de Brian para abrazar a Mia. Las dos mujeres se conocieron al mismo tiempo que Mia conoció a Brian, y desde el primer momento tuvieron un click.

— Estoy feliz de verte de nuevo, Brina — dice Mía aún abrazando a la chica O'Conner.

— Me alegra estar de regreso.

Mía se alejó de Brina dejando que la  recién llegada saludara a Dom.

Los dos se miraron por unos segundos, en un juego de miradas, hasta que fue Brina quien sonrió y negó con la cabeza.

— Viniste — dice Don mirando a la chica aún pareciendo irreal que estuviera delante suyo.

— Me llamaste — responde Brina.

Dom dio unos pasos para acercarse y abrazar a la chica. Dominic Toretto ha considerado a Brina como una hermana menor desde que la conoció, esa chica tenía colmillo, era ruda y podía romperte el brazo si tan solo le tocas el hombro, pero al mismo tiempo tiene un buen corazón.

— La familia se ha reunido de nuevo — habló Brian. — Será mejor entrar, ya deben de haber llegado.

— Pero antes — lo interrumpe Mia. — Quiero que Brina sepa.

— ¿Saber que? — cuestionó la chica O' Conner fingiendo que no tenía conocimiento de nada.

Mía miró a Brian con una sonrisa para regresar la vista a la recién llegada. — Vas a ser tía.

Brina llevó sus manos a su boca. Estaba feliz por su hermano, feliz por Mia, sabía que ambos serían unos grandes padres.

— Eso.. Wow eso es realmente emocionante — brinca la chica. Se acerca de nuevo a Mia dándole un abrazo. Las lágrimas en ambas no faltaron. — ¿Seré la madrina, cierto?

Los tres se rieron, adentrándose al lugar, Brina poniéndose del lado de Dom. 

Ante los ojos de Brina pudo encontrarse con que no sería la única mujer además de Mia en el equipo.

— Veo que ya se conocen — habló Dom al ver la pequeña pelea que se estaba formando.

— O' Conner — llama Tej al ver a los dos hermanos. — ¿como están?

— Cuando me llamaste para que viniera a Río supuse que sería para algo más emocionante que esto — dice Gisele a Dom.

— Brina O'Conner — la llama Román al verla.

Brina no tuvo tiempo de responder, el Moreno la tomó de la cintura dándole vueltas en el aire, sacándole una risa.

— Mi O' Conner favorita — dice Román al dejarla en el piso.

— Escuchaste eso Brian, soy su favorita — Brina golpeó a su hermano en la cadera con la suya. — Siempre lo supe.

Brian rodó los ojos al escucharle. — Dom te presento, él es Tej — dice señalando al moreno de baja estatura. — Es un experto en electrónica. Y él es nuestro amigo, Román Pearce, tenemos historia lo conocí en el reformatorio, hice un trabajo con él en Miami.

— He oído sobre ti — dice Dom mirando de reojo a la chica al lado de Román.

Brina se ríe un poco camuflándolo con una leve tos al ver el rostro de Román.

— Lindo lugar — dice un chico acercándose a Dom.

Brina pudo distinguir que este tenía rasgos asiáticos, en su hombro cargaba una pequeña maleta y en su mano una bolsa de papas fritas.

— Si, ya no había lugar en el Ritz— responde Dom.

— Entonces, ¿de que se trata Dom? — preguntó el asiático una vez que el silencio se formó y todos estaban reunidos.

Brina le dio la razón, ella solo condujo de regreso a Río sin hacer preguntas, y era momento de respuestas.

— Si hermano porque nos hiciste cruzar medio mundo — secunda Tej.

— Tenemos un trabajo.

La sonrisa en el rostro de Brian le dio entender a Brina que ese "trabajo" no sería algo legal, y que involucraba carrera de autos. Ella ya deseaba estar detrás del volante.