— ¿A qué hora fue el robo?— Aproximadamente a la once — respondió la oficial Elena Neves.
El hombre del equipo de Hobbs tecleó en la computadora buscando las cámaras de seguridad
— Aquí está — mostró la grabación.
— Acércate — pidió el Agente Hobbs.
Le hizo un zoom a la pantalla mostrando los rostros.
— Los rostros están cubiertos — habló Elena.
— Reconocimiento facial — Ordenó Hobbs.
El hombre tecleó en la computadora para hacer un reconocimiento facial de los hombres en el auto, las imágenes de Toretto y otros aparecieron en las pantallas.
— Te encontré infeliz — Hobbs se cruzó de brazos. — ¡Wilkes! Compara fotos de los conocidos de Toretto y O'Conner con los registros de entrada a Brasil de estas dos semanas. Aviones, trenes, barcos todo menos transbordadores.
Wilkes tecleó en la computadora entre la lista de los conocidos de Toretto aparecieron los mismos rostros que en las imágenes en la otra computadora, entre los conocidos y los recién vistos en Brasil apareció la imagen de la Agente Brina O'Conner.
— Tienen diferentes nombres, pero los mismos rostros — habló Hobbs sin haber notado a Brina.
— Están planeando algo grande.
— Señor — lo llamó Wilkes. — Hay un rostro que debe ver.
Hobbs se acercó a la computadora observando el rostro de Brina, tenía el mismo nombre, no se molestó en cambiarlo, no se estaba ocultando.
— Un Charger 1970 — señaló la imagen Hobbs. — ¡Fusco! Sube esto a la base de datos para que la computadora lo coteje con los satélites cada quince minutos, la caminera también, todos los rostros menos el de Brina. — varios agentes miraron a su superior al escuchar el nombre de su compañera. — Si estos autos se mueven en Río, quiero saberlo.
— No cree que, al no mostrar a Brina será un intento de encubrimiento de nuestra parte — habló uno de los agentes del fondo. — Está de su lado. — Ella está del otro lado del equipo.
— Durante muchos años, Brina O'Conner a dado todo por esta agencia, sacrificó a su propia familia, les tengo que recordar que su esposo murió en una misión nuestra y que la obligaron a tomar unas vacaciones, de no ser por eso ella estaría con nosotros aquí — nadie habló. — Hasta no tener la versión de la Agente, la mantendremos lejos de esto.
Elena miró a Hobbs, escuchó ciertas cosas sobre la Agente Brina O'Conner y al igual que todos, tenía conocimiento de que ella dejó Londres por unas vacaciones obligadas, pero cuando la fueron a buscar luego de ignorar las múltiples llamadas de la agencia descubrieron su teléfono en su casa, se había escapado sin dejar un rastro de a donde.
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Roman se acercó a Brina quien hablaba con Tej.
— Para ti — le entregó una bolsa de papel.
— ¿Qué es esto? — Brina la tomó entre sus manos abriéndola. — Eres el mejor amigo que pude tener.
— Tenias hambre — respondió Roman encogiéndose de hombros. — No te iba a dejar morir de hambre.
Roman le había llevado la hamburguesa que Brina pidió.
— Oye hermano — se quejó Tej. — ¿Y yo?
— Tu si puedes salir — respondió Brina dando un mordisco a la hamburguesa. — Yo soy la princesa encerrada en la torre, solo que es la bodega.
— ¡Chicos! — Brian les gritó paga que se reunieran.
Brina comió una papa frita para acercarse a donde estaban los demás reunidos, Han se acercó a ella robándole una papa frita.
— La belleza de las oficinas públicas — Mia apareció con un plano entre sus manos.
Todos se volvieron a reunir en la mesa, Brina se quedó de pie cerca de Roman mirando el plano delante suyo.
— Este es el plano.
— Aquí tiene el dinero — Brian señaló en el plano. — En la bóveda de Evidencia.
— Tonto no es — murmuro Brina.
Tej tartamudeó algunas palabras para llamar la atención del equipo.
— Necesito que me escuchen solo un segundo — pidió Tej. — Estamos hablando de entrar a una jefatura de policía. ¿Reconocen esas palabras? ¿Nadie? ¿Los azules?¿La justicia? ¿La ley? ¿El sheriff? ¿Puercos? Personas que no nos agradan.
— Olvidas que sigo allí ¿no? — Brina lo miró.
— Eres la única policía que me agrada — la miró Tej.
— Las jefaturas evitan que la gente salga, no que entre — hablo Han.
Brina lo miró dándole la razón.
— Han tiene razón — Dejó la bolsa atrás de Roman. — Todo laberinto tiene una salida.
— Es una misión furtiva — dijo Brian. — Entramos y salimos antes de que sepan qué pasó.
— Es necesario que alguien entre al menos para averiguar el modelo de esa bóveda — habló Dominic recargando sus manos en la mesa.
— Entonces la bóveda y luego... Que locura — dijo Roman míranos los planos. — ¿Quién se supone que hará todo esto?
El equipo se miró entre ellos, Brina miró a Brian, luego a Dom, sabían de quien se trataba esa parte, una persona tan amable que le llevó una hamburguesa.
Todos los ojos fueron hacia Roman.
— ¿Qué de que hablan? ¿Yo por qué?
— Por qué eres el más hablador — respondió Brian.
— Definitivamente.
— Tranquilo — Brina palmeó la espalda de Roman. — Iré contigo.
Brian la miró a punto de detenerla, Dom se dio cuenta de eso, deteniendo la posible discusión entre los hermanos O'Conner.
— Iras con él — Dom la miró. — Ella puede ayudar a Roman para que entre.
— Es peligroso — se quejó Brian.
— Hemos estado en misiones más peligrosas y quien sale con un brazo lastimado eres tú, tranquilo voy a estar bien — intento calmarlo Brina. — Además ustedes estarán allí, no vamos a estar del todo solos — Brian la miró. — Por favor, estar aquí encerrada te aburre.
— Está bien — Brian suspiró, Brina dio unos saltos feliz. — Pero estarás supervisada.
— Si agente O'Conner.
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GANGSTA'S PARADISE; Han Lue
FanficGP|| "Dicen que en la guerra y en el amor todo es posible" Brina O'Conner llegó a Río de Janeiro por el llamado de Dominic Torretto, era un trabajo rápido, al menos eso pensaba. Llegar a Río la haría reencontrarse con viejos amigos, hacer nuevos e i...