Mi primer amor

Capitulo 11

Durante los últimos dos meses Jacob y yo la pasábamos genial, teníamos tanta química, el tiempo a su lado se pasaba rápido.

El no me había pedido que fuera su novia pero me decía cariño y era un sentimiento muy lindo, el era el chico de mis sueños.

Mi madre seguía buscando trabajo, mientras yo seguía mintiendole a Jacob sobre mi casa, no quería que el se diera cuenta de mi clase social.

El te había motivado a hacerte un cambio de look, me sentía bonita.

- Te amo mucho, cariño

- Yo igual

El no era el más aplicado de la clase, pero yo le ayudaba a sacar sus clases adelante, ademas también podíamos pasar más tiempo juntos.

Todo era muy romántico, como de película hasta que llegó un rumor sobre una mentira, todos no creían que el fuera mi novio o que estuviera enamorado de mi.

Un día antes del cumpleaños de Jacob fui a verlo a su entrenamiento de fútbol, al terminar el y yo platicamos un poco afuera del campo.

En ese momento llegan sus amigos, esos chicos pesados que solo les interesaba tener chicas para solo entretenerse.

- Laura Jones, que sorpresa.

Sonreí falsamente, ellos jamás me han caído bien era muy falsos.

- Se ven tan lindos juntos, lastima que-

- Cállate y dejala en paz.

Los demás chicos empezaron a reír burlandose, mientras que Jacob solo se molestaba.

- Laurita, siempre has sido muy ingenua pero lo sabes disimular muy bien.

- Vámonos - dice Jacob enojado.

- No, ya se acabó el tiempo o plazo como ustedes quieran decirle.

Te detienes a mitad del camino.

- ¿De que hablas? - le dije confundida.

- Me refiero que tu amado hombre ha sido una doble cara contigo.

- Guarda silencio - dice Jacob levantando la voz.

- Acaso no se te hizo raro que un chico estuviera con alguien como tú.

En ese momento no entendía nada, volteo a ver a Jacob pero el solo baja la mirada.

- No estoy entendiendo nada.

- Haces unos tres o cuatro meses tu amado acepto una apuesta, en la apuesta tenía que enamorar a una nerd y te eligió a ti.

Mis ojos se llenaron de agua.

- Laura te lo puedo explicar - dice Jacob preocupado.

Tenia mucha rabia por todo, le di una cachetada y los chicos solo se rieron.

- No me vuelvas a dirigir la palabra.

Salí corriendo del lugar, caminaba hacia mi casa, no tenía cabeza para nada, mis ojos rojos de tanto llorar por el.

Me hizo creer muchas cosas, jugo conmigo y lo peor de todo se burló de mí. Fui solamente una simple apuesta para el.