El futuro de la suerte || Wenclair

Acerca de visiones y amor.

─Entonces Yoko sugirió que podríamos ir a la tarotista del pueblo.

Wednesday rodó los ojos totalmente ofendida ante la sugerencia de su compañera. Era medio día, las clases se había suspendido por culpa de un accidente en el invernadero y lo que más deseaba era la tranquilidad de su habitación, ahí sentada en su escritorio, poder aprovechar el tiempo para dedicarle a su novela, eso y no una charla sobre un tema de índole tan baja.

─Asegurar el futuro por medio de un ritual de cartas arrojadas al azar es probablemente lo más estúpido que haz creído hasta ahora.

─Según Yoko todos sus compañeros han ido al menos a uno, en diferentes épocas de su vida y les ha funcionado, aparte ¿qué más puedo hacer? Estoy desesperada. Ajax y yo salimos desde hace 6 meses y la pasamos bien, nos divertimos juntos, pero de alguna forma últimamente todo se siente...mal. ─ la voz de Enid se quebró al final ─ se suponía que éramos almas gemelas...

La chica sombría carraspeo la garganta; oír hablar a su compañera de su estúpido novio era lo más irritable del mundo, amaba las torturas, pero no las de este tipo.

─ No sé. ¿Haz intentado hablar con él? Como lo hace la gente normal de la cual habla mi terapeuta. ─

Las quejas sobre Ajax se estaban convirtiendo en una constante en el cuarto. Al principio fueron una, dos... Cosas triviales como que había olvidado la canción de Taylor Swift favorita de Enid. Pero últimamente. por las noches, podía escuchar más el sollozo ahogado del lado colorido de la habitación. ¿Era tan difícil de recordar que era Shake it off incluso cuando la loba insistió mucho en pedirla al Dj en el Rave'n? ¿El no soportaba escucharla cantar a cada rato cuando hacia algo que le gusta? Para ella, el tipo era un idiota, en todo el sentido de la palabra.

─ Lo intente. Durante un mes todo fue perfecto, pero ahora no se... Hay algo que ha cambiado y no logró averiguar qué. ─ la chica bufo frustrada ─ ¡Por eso quiero que me lean las cartas! ¡No pierdo nada! ¡Dicen que es la mejor de todo Jericho! ¡Tal vez la tarotista vea algo que yo no!

─ Oh por favor Enid. Confiaría más en mis visiones que en ese estúpido intento de leer las cartas por una charlatana... ─

Wednesday se cortó de golpe, consciente de lo que había dicho, en ese momento quiso morderse la lengua tan fuerte para arrancársela y dársela de comer a los perros, solo pudo escuchar un chillido del otro lado de la habitación.

─ ¡Tienes razón! ¡Como no lo pensé antes! Tu podrías...

─ No.

─ ¿Pero por qué debería ir con alguien desconocido si tengo a mi súper roommate poderoso? Anda, ven. Toca mi mano. ─
Enid se acercó deprisa a su escritorio y estiro su brazo al aire esperando una respuesta.

─ No funciona así. No te tocó y ya, ni siquiera lo controlo. ─ la chica paso de largo y siguió acomodando la hoja en su máquina de escribir.

─ No lo sabemos si no lo intentamos... ─

La cara de la rubia se transformó en unos ojos de cachorro mojado, y ella sólo pudo soltar un suspiro, sabía que Enid estaría a su alrededor con este tema hasta que cediera y le quitaría tiempo de forma innecesaria , a veces cuando le hablaba fingía escucharla por completo asintiendo con la cabeza. Se había dado cuenta que sus interrupciones duraban menos que cuando se daba cuenta que no le prestaba atención y entonces se disponía a repetir todo de principio a fin hasta que lo entendiera. A veces fingir seguirle la corriente era la salida más fácil, resignada se dio la vuelta para encararla.

─ Bien. Lo intentaré, pero luego de eso tienes que dejarme en paz. Estas tomando tiempo de mi hora de escritura con tus dramas adolescentes innecesarios ─

Enid solo asintió efusiva con la cabeza mientras su compañera le tomaba la mano ─ Tampoco te aseguró que funcio... ─La oración quedo al aire cuando la chica gótica hizo un movimiento brusco hacia atrás con los ojos en blanco.

─ ¿Wends? ─ preocupada apretó con un poco de fuerza la mano de está sintiendo un ligero escalofrío, tal vez por el frío de sus dedos ante su piel cálida, pero antes de que pudiera pensar o decir algo más, su compañera regresó la mirada respirando algo agitada y con las mejillas ligeramente coloradas. ─ Wow... Wow... ¿Está todo bien? ¿Que viste?

─ Nada. ─ La peli negra corto de tajón y se levantó de golpe para irse a su cama, dándole la espalda.

─ ¡Claro que no! ¡Conozco las señales! ¡Se que viste algo!

─ Te aseguro que no es nada que podría ayudar a tu situación. La única visión que tuve fue de ti vomitando, tal vez no deberías pedir el helado nuevo de pistache de esa tienda nueva del pueblo. Comer lácteos de noche puede ser contraproducente. Deberías revisar sino eres alérgica al pistache.

─ Oh... ¿Fue eso? ... ─

Enid miro al suelo tratando de encajar la nueva información, dudosa, si, era cierto que había planeado una cita el próximo viernes en la heladería, pero esperaba las visiones no fueran de algo tan superficial ─ ¿Pero porque tu cara esta roja?

─ La visión de ti dando arcadas en nuestro baño, manchándolo de vomito es incluso para mi algo asqueroso. Sino sigues mi consejo terminaras tiñendo tu abrigo de un color que no es precisamente el rosa que te gusta, no creo que Ajax disfrute que su cita de helados termine contigo manchando su camiseta favorita. ¿No te gustaría mejor ir a cenar pizza? quiero decir no estoy familiarizada con las relaciones de ese tipo pero no creo que en ningún ambiente sea bien visto contar que la mancha verde de tu playera de stranger things es culpa del estomago inestable de su novia. ¿Aparte querrá tener ese asqueroso contacto de labios contigo luego de verte vomitando?

Ahora fue el turno de Enid de que se le subiera los colores a la cara, totalmente avergonzada comenzó a balbucear ─ Uhm. ¡Pizza entonces! ¡Lo tengo!...amm tal vez si debería darme una vuelta a la tarotista, ¡Solo por diversión y pasar el rato con Yoko! ─ tomó su bolsa y salió corriendo. ─ Diviértete escribiendo, ¡Nos vemos más tarde! ─

Wednesday se dejó caer acostada en la cama, llevo sus manos a su rostro sintiendo aún la sangre subir. Las imágenes de su visión aún daban vueltas por su cabeza.

Aun podía sentirse en medio de su habitación fría, sintiendo todo menos frío...

La mano de Enid alrededor de su mejilla, mientras su aliento le rozaba la cara haciendo que su corazón golpeara en su pecho, de forma asfixiante. Los ojos de su compañera se entrecerraban y alcanzaba a pronunciar algo que no entendía, solo alcanzaba a ver sus labios manchados de lo que parecía labial negro, era la primera vez que veía ese tono en ella y le parecía hipnotizante, toda su atención se iba en eso.
En ese momento. Mientras se inclinaba para romper la distancia y entonces...

Despertaba.

La visión había parado ahí pero el corazón de Wednesday no, este iba a lo loco.

─ No. No puede ser que Enid y yo nos besemos.

Sin duda hubiera preferido que la visión hubiera sido de ella vomitando.