05. Nueva... ¿normalidad?

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Como el señor dijo, no tuvimos de otra más que aceptar. Así que nos liberaron del amarre y nos separaron. Yo fui con unos tipos que parecían mafiosos así que los seguí callada. Llegamos a una habitación y me dijeron que yo me quedaría ahí, que había ropa y demás.
Me dirigí al closet y cuando abrí vi una variedad de trajes de baño para mujeres y también sudaderas — agradezco que hayan puesto sudaderas porque me voy a sentir más segura con una puesta — así que atranqué la puerta con una silla y me puse la parte de arriba de un bikini y unos shorts que para mi gusto eran muy cortos pero ahí si no había de otro.
Agarré una sudadera negra y tiré la ropa que traía antes porque ya era una porquería de suciedad — si hubieran sido otras circunstancias, la hubiese lavado — y no me la puse porque sentía calor, en el closet encontré milagrosamente un bastón que sería mejor que las muletas ya que en realidad ya estaba mejor. Agarré la sudadera y la cargué en el brazo por si me la quería poner luego. Salí para buscar a Arisu y Usagi.
Y cuando salí del edificio hacia la parte de atrás vi a la gente jugando en la piscina, la música al máximo y demás, como si este juego infernal fuera normal. Encontré a Arisu y él se veía igual de confundido que yo.

Tn: Increíble como pueden estar como si no hubieran juegos mortales afuera — dije parándome a su lado —

Arisu: Oh Tn... si, no entiendo cómo lo hacen — dijo cayendo en cuenta que estaba al lado suyo — ¿Qué carajos es esto? — dijo y yo solo levanté mis hombros. En eso volteamos a ver que Usagi estaba saliendo y vi como Arisu se le quedó viendo —

Tn: Ahhh Arisu — dije golpeandole el hombro — parece que te gusta alguien — dije riendo, desde un inicio era muy obvio —

Usagi se había puesto un top — que hubiese preferido en vez de un bikini pero en mi habitación no había — y unos shorts que parecían deportivos. Arisu... él llevaba una playera y unos shorts, no cambió mucho.
Usagi se dió cuenta de que Arisu la estaba viendo y decidió ponerse una sudadera que llevaba en el brazo, igual que yo.

Tn: Ya pues Arisu, disimula más — dije riendo y el volteó y cuando Usagi vino todos nos volteamos a ver las pulseras — Cada una tiene un número — dije y quedamos en silencio —

Usagi: De algún modo, siento que nos vigilan — dijo y miramos a su dirección, dos chicas que parecían hermanas nos estaban viendo muy directamente y un escalofrío recorrió mi espalda —

Arisu: Los nuevos siempre llaman la atención — dijo pero era muy rara la forma en la que las chicas nos veían —

No hicimos mucho en el día, la verdad me hubiese gustado en la piscina pero estaba llenísima y además no confiaba en la gente que estaba ahí así que no hicimos más que platicar de cualquier cosa con Arisu y Usagi. Sin darnos cuenta la noche llegó y la gente cada vez se ponía más loca, empezaban a beber, drogarse e incluso tener relaciones... en la intemperie, así como si nada.

Tn: Esto es un escape de la realidad — dije suspirando y en eso escuchamos algunos sonidos y la gente empezó a gritar que era hora de los juegos — ¿Debemos de seguirlos? — dije cuando todas las personas empezaron a dirigirse a el centro del hotel —

Arisu: Vamos — en el camino las personas empezaban a gritar dónde habían arenas de juego y cómo ir —

Cuando todos estuvimos adentro empezaron a gritar "¡Sombrerero!" Y cuando el señor que nos había dicho tanta cosa salió del balcón todos empezaron a gritar pero él los calló.

Sombrerero: ¡Camaradas! Otra vez llegó el momento. ¡No flanqueen! ¡Esta es una guerra contra el miedo! Todos aquí tienen el coraje de superar sus obstáculos. ¡Todos los que están aquí ahora son uno! ¡Debemos unirnos para juntar todas las cartas y volver al mundo original! — mientras él hablaba yo analizaba a las personas alrededor nuestro — Y... ¡llegó el día! — todos empezaron a gritar — ¡Vamos!

Más que un juego  ~ chishiya y tú ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora