-Sungie estás listo? – fruncí el ceño ante la voz de mi madre.
Era la tercera vez que me preguntaba lo mismo.
Ajusté los cordones de mis converses y bajé suspirando.
-Mamá, te dije que me dieras unos minutos para alistarme – le hablé mientras bajaba las escaleras de mi nuevo hogar.
Habíamos llegado esa mañana y desde entonces estuve desempacando y ordenando mi nuevo cuarto.
-Lo sé, Sung, pero si no te apuro seguirías entretenido con tus cosas – me sonrió y no pude evitar admitir que tenía razón, si por cosas se refería a quedarme dormido.
Llevaba casi 24 horas sin dormir. Mis amigos de Incheon, al contarles que me mudaba a Seúl, decidieron que no había tiempo que perder… y bueno, fiesta que perderse tampoco.
Pasamos la última semana de fiesta en fiesta, despidiéndome de mis amigos y mis… más que amigas.
Solo digamos que soy un chico popular en Incheon, y la noche de ayer fue bastante larga para mi.
-Tu padre te espera en el coche, va a llevarte a la escuela para la matrícula.- la miré confundido.
-Pensé que mis primos me iban a acompañar y ayudar con eso…
-Ahh si, pero, resulta que están en una especie de campamento escolar, no regresan hasta el domingo.
-Quéeee? – Demonios!!!- Qué se supone que haga estos dos días en una ciudad nueva sin mis dos locos primos??
-Tranquilo, seguro que tienes mucho sueño que recuperar – mi madre me miró alzando una ceja, y bueno, tuve la decencia de sonrojarme.
-Creo que mejor no hago esperar más a papá – ella rodó los ojos sonriendo y me despidió con un beso en la mejilla.
Que hacía a mitad de semestre matriculando en una nueva preparatoria en Seúl??
Pues, mi padre fue ascendido, y su nuevo puesto de trabajo requería de su presencia en Seúl, y la verdad tampoco pusimos muchas pegas mi madre y yo.
Vamos que es Seúl!

Y por mucho que adorara Incheon… pues… es Seúl, la capital!!!!
Y tampoco estaría completamente solo.
Mis tíos y mis dos locos primos queridos viven aquí. Estaríamos viviendo casi en el mismo vecindario y asistiendo a la misma escuela, así que la verdad no creo que con ellos a mi lado me sienta muy fuera de lugar en mi nuevo hogar.
...
-Sung, voy a hacer las compras de la casa, llámame en cuanto termines todo o si tienes algún problema si? -  mi padre sacudió mi pelo y torciéndole los ojos mientras él se reía de mi, bajé del coche con mi mochila y los documentos que iba a necesitar.
Supongo que no importa cuanto tiempo pase, siempre iba a ser el pequeño niño de papá.
Di un vistazo hacia lo que sería mi nuevo colegio y como era de esperar, la escuela era inmensa.
Suspiré y recé en mis adentros por no perderme en ese lugar.
.
.
.
-Gira a la derecha después de la sala de música y encontrarás la dirección – repetí las indicaciones que me dieron en la entrada, mientras miraba a todos lados en busca de la endemoniada sala de música.
Sí, finalmente, me había perdido.
Pero no era mi culpa!!!
Esa escuela era inmensa!!!
-Sala de música… sala de música... – tal vez si la mentalizaba  aparecería de pronto ante mi vista y...- Auchhh!!!
-Lo siento! Estás bien? – espera… ese letrero de allí no decía “Dirección”?
Finalmente!!!!
Me levanté emocionado.
Después de 30 minutos sin rumbo mis plegarias habían sido escuchadas!!!
-Estoy bien, lo siento mucho! – me incliné a modo de disculpa y sin prestar mucha atención al chico con el cual había chocado ya que no quería perder de vista mi destino, me dirigí a la Dirección.
Sentí una intensa mirada a mis espaldas, pero no le di mucha importancia. Necesitaba salir de allí y dormir antes de que mi cuerpo colapsara.
.
.
.
-Es tan injusto papá!! – arrugué mi frente malhumorado. – pensé que en Incheon teníamos más atraso pero… como demonios no me dejan teñir el pelo en esa maldita escuela???
-Jisung tus palabras – hice un puchero.
-Lo siento… pero en serio…
-Cada escuela tiene sus reglamentos, Sung, además eres un chico guapo, cualquier color de pelo se te ve bien, por supuesto, gracias a mis genes – Bufé a mi padre en lo que detenía el coche y lo ayudaba con las compras.
-Lo sé, pero el rubio me hace mucho más sexy para las chicas – le dije a modo de queja, y él solo sonrió mientras sacudía su cabeza.
-Supongo que el ser un don Juan también te lo transmití en mis genes, pero… no le digas a tu madre ok! – pasé mis dedos por mi boca semejando que cerraba una cremallera y le guiñé un ojo provocando otra carcajada en mi padre.
Continué quejándome, esta vez incluyendo a mi madre en mis oyentes apenas ingresé en la casa, y después de llenar mi vacío estómago obtuve por fin mi tan esperado sueño.
.
.
.
Desperté con la sensación de algo peludo en la cara, y la nariz cosquilleándome lo que me hizo fruncir el ceño. Estornudé y con los ojos aun cerrados toqué algo esponjoso y peludo que acariciaba mi cara.
Qué demonios era eso???
Me levanté asustado para encontrar un lindo, pero inoportuno, gato negro en mi cama, jugando y mordiendo algo entre sus patas delanteras.
Estornudé, y me pregunté porqué había demorado tanto en aparecer mi alergia y qué diablos hacia un gato en mi habitación??
Miré la ventana que se encontraba abierta y me mostraba el sol con destellos naranjas en las nubes. Era muy tarde ya, con razón mi estómago se sentía tan vacío.
El sonido del plástico siendo mordido y de otro estornudo me hizo recordar a mi nuevo e inesperado compañero de cuarto.
Miré fijamente al gato, mientras intentaba ver, sin tocarlo, la placa que adornaba su cuello.
-“Limbo” – leí en alta voz – Quién demonios le pone Limbo a una mascota??? -  me acerqué más al gato y estornudé, pero logré ver las iniciales doradas debajo del nombre del gato – LMH?? Esas son las iniciales de tu estúpido dueño?? – como si me entendiera el gato me miró con sus grandes ojos verdes y fue allí cuando mi corazón cayó al piso.
-No!! Noooooo!!! – el maldito gato huyó asustado por la ventana mientras yo miraba entre estornudos lo que mordía esa rata negra hace unos segundos – no mis lentes de contactooooo!!!!
.
.
.
-Entonces… a qué se debe el look de nerd? Te ves tierno pero, no había gafas más pequeñas?? – miré  malhumorado a mi primo Seungmin en lo que él y mi otro primo Jeongin intentaban ocultar su risa. Bufé torciendo los ojos.
-Mis lentes se estropearon, y como tengo una graduación no muy común, sumándole el hecho de que es fin de semana, tuve que recurrir a mis gafas de casa a tiempo completo, así que no se burlen malditos!! – los golpeé a ambos en el cuello con un corte ninja y ellos solo continuaron riéndose.
-Y el tono rosa de tus ojos y nariz es….- Jeongin me miró con curiosidad aún sonriendo.
-Ese maldito gato!!!! – me lanzaron unas miradas inquisitivas.
-Gato???- preguntó Seungmin.
-Si, el maldito gato del vecino se cuela por las noches en mi cuarto y se trepa en mi cama!!! Cualquiera pensaría que le gusto!!! – esa rata negra llevaba arrastrándose a mi cama las dos noches que llevaba durmiendo en mi nuevo cuarto.
-Tal vez tienes olor a gata en celo – ambos chocaron sus puños tras el comentario de Jeongin, riendo a carcajadas-
-Acaso quieren morir??- los miré  amenazadoramente obteniendo solo más carcajadas de sus partes.
Pero esto no se iba a quedar así no, no, no…
Treinta minutos después nos encontrábamos acostados en la cama intentando recuperar nuestra respiración después de una cruenta batalla de almohadas, que obviamente inicié en venganza y la cual también obviamente gané. Aunque debo admitir que dentro de poco tiempo no iba a poder doblegar fácilmente a mis primos... literal ya ambos eran más altos que yo.
Iban a dejar de crecer en algún momento??
Estábamos en el cuarto de Innie, ya que después de que mis primos regresaran de su viaje escolar enseguida fui a visitarlos.
Resulta que viven a tan solo 10 cuadras de mi nuevo hogar, lo que nos facilitará pasar tiempo juntos.
Innie y Minnie viven uno al lado del otro, son hijos de las hermanas gemelas de mi padre. Ellas decidieron tener a sus hijos al mismo tiempo, y vivir cerca una de la otra, por eso Jeongin y Seungmin se han criado prácticamente como gemelos también, incluso a veces les compraban la misma ropa.
Con lo que mis tías no contaron fue con que su hermano menor dejara embarazada a su novia universitaria al mismo tiempo que ellas salían embarazadas y finalmente todos nacimos en el mismo año.
Jeongin es el mayor, aunque realmente se comporta como el menor, yo soy el del medio, y luego con tan solo unos días de diferencia conmigo, nos sigue Seungmin.

Stalker Who SKZ AdaptDonde viven las historias. Descúbrelo ahora