Solo un beso

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Lan Zhan debía volver a casa, había recibido un mensaje de su hermano donde pedía que por favor regresará pues al parecer los Wen comenzaban a acercarse a sus tierras y esto podría en verdad ser demasiado peligroso por esa razón lo necesitaba.

Los Wen ya habían arrebatado una pieza más y esa era la de el clan Nie aunque se llevó a cabo una batalla no cabía duda que lo hecho con el clan de Yummeng era un signo de venganza pues a diferencia de este clan los Nie no sufrieron bajas alarmantes ni mucho menos la pérdida de un líder.

Lan Zhan y Wei Yin se encontraban en la entrada de Yummeng, pues Wei Ying había salido a despedir al jade, después de estar juntos dos semanas completas, dos semanas donde ambos descubrieron lo que sentían y que además dos semanas donde Lan Zhan se dedicó a brindarle a Wei Ying un consuelo suelo por la pérdida de su padre.

-Ten un muy buen regreso a casa Lan Zhan- dijo Wei Ying

-Mnmm- solo afirmó, pero se arrepintió y continuo su siguiente frase- Wei Ying, por favor mantente a salvo, regresaré pronto y tal vez....

-Sí, Lan Zhan, yo también quiero estar contigo- Wei Ying lo interrumpió pero no estuvo conforme hasta que realizó la siguiente acción

Tomo a Lan Zhan por el cuello haciéndolo inclinarse un poco más hacia él y lo beso, fue un beso suave y tranquilo en donde le transmitía todo el deseo y el amor que comenzaba a sentir por él, de verdad que era lo mejor que le había pasado en la vida, Lan Zhan le devolvió el beso pidiendo permiso para poder explorar la boca de Wei Ying con su lengua a esto se sumaba que el ambiente se estaba poniendo demasiado intenso y sus cuerpos comenzaban a acercarse un poco más y más hasta que....

-Como sea, al segundo jade se le está haciendo tarde, la noche podría caer en cualquier momento y no creo que Zewu-jun este contento con que su hermano pase demasiadas noches fuera de casa- dijo Jiang Cheng recargado sobre la entrada mientras veía como los dos jóvenes se separaban de golpe y mientras que Wei Ying comenzaba a reírse, Lan Zhan tenía los oídos rojos por la vergüenza de haber sido descubiertos.

-Lo siento- carraspeo el jade - podrías permitirme un momento a solas con Wei Ying por favor.

-si, como sea pero nada de besos ya solo dile lo que tengas que decirle y regresa a casa- el tono de voz que uso al principio parecía molesto pero lo siguiente que dijo lo menciono con un tono de preocupación- y por favor regresa a casa sano y salvo, no se te olvide avisar de tu llegada, buen viaje- y con esto él se retiró.

Una vez solos Wei Ying hablo.

-¿Que pasa Lan Zhan?

-Quiero formar una familia contigo- lo dijo, tenía miedo pero no podía permitir que su falta de expresión le quitará, a la persona que más amaba en el mundo.

-¡Ayia! Lan Zhan, deberías de avisarme cuando sueltas este tipo de palabras que vas a ocasionar que se me salga el corazón- dijo Wei Ying, pues las palabras del jade en verdad lo habían emocionado.

-¿Qué piensas?- pregunto el jade.

-Que, que pienso bueno yo pienso que ¡Sí! Lan Zhan si quiero formar una familia contigo, tengo muchos planes, pero sabes que primero tenemos que terminar con esta guerra ¿Verdad?, Una vez está pesadilla termine podremos estar juntos y tal vez podríamos adoptar a algún niño pero solo en el futuro- lo dijo muy emocionado mientras comenzaba a abrazar a Lan Zhan y este le correspondía el abrazo.

-Entonces Wei Ying espero que esto acabe pronto- suspiro pues si bien sabía que esto iba a tardar algo de tiempo tenía la esperanza que una vez que acabara Wei Ying lo estaría esperando a él con los brazos abiertos para poder descansar de todos los problemas que estuvieran enfrentando.

-Eso también lo espero yo- soltó Wei ying con un gran suspiro.

después de despedirse de Lan Zhan y que este se fuera dándole un beso y prometiéndole que todo iba a estar bien Wei Ying entro a su casa, pero detrás de las puertas, se encontraba un Jiang Cheng llorando en silencio, por qué el acababa de escuchar una promesa, una promesa que seguramente no podría ser cumplida.

La delicadeza de aquel hombreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora