one shots BW

¹¹🔥 mi novio es un vampiro.

El hombre saltó y cayó encima del castaño, tay los miró todavía en su sorpresa pero reaccionó rápido y pateó al vampiro, éste quedó intacto, cómo si no acabara de recibir un golpe, lo miró burlón y se levantó del más bajo para tomar al moreno por el cuello.

- ¿Dios griego? - preguntó burlón y lo miró fijamente, tay quedó inmóvil sin apartar la mirada del otro hombre.

Bright recobró un poco las fuerzas y vio al vampiro en el cuello de su amigo, se levantó y corrió hacia ellos a toda velocidad y logró empujar al inmortal, tay cayó al suelo inconsciente. Bright lo miró asustado, se acercó y tomó su pulso, estaba vivo, pero tenía unos pequeños agujeros de los colmillos de aquel ser.
El vampiro se levantó y estaba dispuesto a atacar al castaño pero fue detenido por alguien que lo agarró por el cuello desde atrás.

- ¡Win! - exclamó bright contento.

El pelinegro no respondió y apretó más su agarre al ver al amigo del castaño en el suelo.
El otro vampiro no se quedó de brazos cruzados, en un rápido movimiento se liberó del agarre y con sus largas uñas rasgó la ropa del contrario logrando lastimarlo, win lo miró furioso y se lanzaron a combatir entre ellos.
Bright miró a lo lejos algo brillante, corrió a eso y lo tomó. ¡Las llaves de su auto!
Cargó a su amigo y se dirigió al lugar donde se habían estacionado, metió a su amigo en los asientos de atrás y terminó de arrancar la manga de su traje para ponerlo alrededor del cuello contrario ya que estaba saliendo algo de sangre.
Encendió el carro y manejó hacía donde había dejado a win. Al llegar se encontró con la horrible escena de un win jadeando mientras sostenía sus costados y el otro hombre frente a él tirado en el suelo sin cabeza.

Aquella imagen nunca la olvidaría.

- debes irte - apareció de repente win a su lado y le advirtió.

- estás herido, no te dejaré así.

- no te preocupes por mí. Debo limpiar este desastre. - dijo mientras miraba el cuerpo.

- no te voy a abandonar. - dijo seguro.

- si tanto te preocupa puedes esperarme en mi departamento. Apenas termine aquí me iré.
Por ahora debes curarlo.- apuntó al joven de atrás.- No creo que sea buena idea llevarlo a un hospital, a menos que tengas una buena explicación de lo que le pasó.

- lo resolveré.

- está bien, por favor ve con cuidado.

- tú también. - arrancó directo al lugar donde podrían ayudarlo.

(...)

Una vez me aseguré de que tay estaría bien, me fui al departamento de win, ya era de mañana, las siete de la mañana exactamente. No he dormido nada.
Toqué el timbre y él abrió, su rostro estaba más pálido de lo normal.

- hola - dije una vez entré y cerré la puerta, él no respondió, simplemente caminó hacia el sofá y se acostó.

- no pensé que vendrías - dijo finalmente. Me senté frente a él y lo observé detalladamente.

- por supuesto que vine. Estás herido.

Su ropa era otra, tenía una sudadera y una camisa sin mangas. Me acerqué y la levanté un poco, en sus costillas tenía unos largos rasguños que se veían a carne viva, hice una mueca al imaginar el dolor. Además de eso tenía el labio partido y en el brazo tenía otra raja.

- pensé que te habías revisado. - se sentó y me miró molesto.

- ¿De qué hablas? - no dijo más nada y me golpeó el brazo con uno de sus dedos.

- ¡AAh! - chillé del dolor en mi brazo y lo agarré, sentí mis lágrimas amenazar con salir. - ¡Eso dolió!

Lo fulminé con la mirada.