≪°✾El Doncel✾°≫ // °Kookmin°

°⁶°

El bosque se volvía más frío y oscuro mientras más se adentraba entre los árboles, volando con agilidad entre las ramas y agudizando si vista y oídos para detectar alguna presa.

Amaba distraerse por las madrugadas, casando algun ratón, ardilla o pájaro por diversión y para agudizar sus sentidos de caza. Aunque siendo un murciélago no era tan divertido. El quería más acción.

Cazar en su forma normal no estaría tan mal. Además, los cazadores no iban más allá del bosque oscuro como para que se tuviera que preocupar por ser visto por alguno de ellos.

El no era tonto, el no se confiaría. No cazaria más allá del bosque, pero eso igual no impediria que volviera a su forma.

En una maniobra ágil Jungkook desendio al suelo volviendo a su forma "humana", dispuesto a dar un paseo nocturno en busca de alguna presa.

La luna era la única fuente de luz en ese oscuro lugar. Era relajante la paz que generaba la oscuridad del bosque.

Era perfecto para Jungkook.

Perfecto para los animales que vivian en ese bosque y perfecto para los vampiros que se sentian seguros al ser rodeados por la naturaleza fría de este.

Pero no era para los humanos, para los cazadores que cazaban a los animales en abuso y sin cuidar la belleza del bosque.
Talando árboles, arrancando plantas, maltratando el ambiente por la codicia de oro o algun absurdo premio de mucho dinero que solo ganarían si se animaran a adentrarse a las entrañas del bosque y regresar vivos con una cabeza de vampiro.

Jungkook se enfurecia con solo escuchar la palabra cazador de vampiros.

Los vampiros nunca le an echo daño a los humanos, ellos no empezaron esa ridícula guerra. Como diría Seokjin.
Extrañaba a Seokjin, el era muy importante para el, para todos lo fue.

Seokjin fue como un padre y madre combinados en uno solo para Jungkook.
El siempre estuvo ahí para protegerlo y darle amor y cariño que nunca recibió de sus padres. Nisiquiera había conocido a su madre.

Abanzo más en el bosque, adentrándose por las sombras de los árboles hasta llegar a una zona protegida por sus antepasados y oculta de la maldad del hombre, en donde los difuntos podrían descansar sin que sus tumbas sean perturbadas.

Llenas de rosas rojas que nunca se marchitarian y velas que iluminan el sendero. Jungkook se sento en el suelo para apoyar su mano sobre la lapida bien cuidada de su amigo. Kim Seokjin, el vampiro que se encargo de criarlo y de enseñarle todo lo que sabe ahora.

Asesinado por cazadores a sangre fría a sus cortos 300 años. Los desgraciados lo mataron arrancandole sus colmillos, llenando su garganta de ajo y clavándole estacas en sus bellos ojos para finalmente crusificarlo y marcando una cruz en su pecho.

Clavando una estaca en su pecho seria una muerte más rápida y menos dolorosa. Pero eso no era lo qje querían los cazadores.

Ellos querían que los vampiros se retorcieran de dolor, agonizando y pidiendo piedad para que terminaran de una vez por todas con su vida.

Seokjin no merecía eso. Ningún vampiro enrealidad

-- te extraño mucho Jin hyung...-- dejo salir un triste suspiro mientras ponia su mano en la lapida-- te necesito conmigo. Si tan solo yo hubiera..

Escucho un ruido

Se levanto alerta y agudizó su oído ¿quien se atreve en interrumpir los lamentos del príncipe?

Salio de ese sedentario secreto y avanzo, dispuesto a encontrar al hombre o criatura que estuviera rondando por la zona.

Un sierbo no haría tanto ruido, un conejo o zorro tampoco.

¿Un humano? Menos, nisiquiera tendría sentido que un humano andara por el bosque oscuro de noche.

Había algo recostado en las raíces de aquel pino. Probablemente sea algun vampiro desorientado, aunque seria raro que algun vampiro se pierda en ese bosque.

Hasta un vampiro de menos de 100 años sabría recorrer ese lugar.

Se asomó por la sombra del grueso tronco y su visto choco con un pequeño vampiro que estaba descansando. Parece estar muerto.

¿estará muerto?

Se puso enfrente de este y se agacho hasta quedar a su altura. No se veia nada bien ese vampiro.
Sus labios estaban secos, estaba demasiado palido seguramente no debe estar bien alimentado o no debe haber podido tomar la sangre suficiente, su pelo estaba muy descuidado y enredado, tenia moretones y suciedad en su cara, muñecas y piernas ¿tendra más abajo de esas pobres y mugrientas prendas que vestía.

Nunca en su vida lo había visto antes pero le parecía conocido.

Era el vampiro del viejo granero de los Park ¿será algún sirviente?
No lo parecía porque la servidumbre de los Park era muy bien cuidada y trabajan solo adentro de la casa.

Observo con más cuidado su rostro, parecía un muerto viviente. Aparte de secos su labio inferior estaba partido, tenia rastros de haber estado llorando hace poco, sus pómulos estaban sucios y el derecho tenia un moreton muy feo, su frente estaba raspada y su cuello también tenia marcas de golpes.

Pobre vampiro, al parecer era maltratado en ese granero

¿el señor Park sabrá de esto?

Paso su mano por la mejilla moretoneada del joven y este solto un quejido de dolor.

Seguramente a escapado. Penso

No podía dejarlo ahí tirado, el tenia corazón no podría dejar a un vampiro en ese estado en medio del bosque y a mersed de los cazadores.

¿se lo llevaría con el? Obviamente

-- descuida pequeño --tomo al vampiro entre sus brazos con delicadeza y empezar a correr de vuelta a su hogar-- no te conozco y tampoco se porque estoy haciendo esto, pero te prometo que no dejaré que nadie te vuelva hacer daño.

Nunca más

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