Juntos.

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Ahora si la parte final, voy a tratar de subir los demás que tengo en la otra plataforma lo más rápido posible, esos que ya tengo terminados los subiré a diario, así que estaré actualizando seguido.

En fin, como ya es costumbre en mí, espero que disfruten de leerlo como yo al escribirlo.


Capítulo ocho.

Tsuna caminaba como preso a punto de cumplir su sentencia rumbo a la azotea y seguía tratando de poder ubicar a Hibari en la escuela, si lo llegaba a encontrar no dudaría en correr hacia él, pero no había llegado.

Al llegar a la azotea Masato cerró la puerta con llave, como estaba acostumbrado a hacer para que nadie lo descubriera y así meterse en problemas, Tsuna se colocó sobre la reja tratando de mantenerse alejado de ese sujeto, sabía que eso enfurecía más a Masato, pero debía ganar tiempo para poder ubicar a Hibari y poder buscarlo.

- Dime Tsuna ¿Por qué huiste de mí en la primaria? cuando ya no te vi de nuevo me sentí solo – caminaba lentamente para acorralarlo en una esquina y así capturarlo sin opción a huir – ese día me sonreíste y prometiste volver al día siguiente y me sentí mal cuando no te vi y me sentí peor cuando supe que te habías transferido sin siquiera decirme adiós, así que busque en tu antigua casa y encontré a donde te mudarías y les rogué a mi padres para que me inscribieran en Namimori, para podernos volver a encontrar, de verdad me sentía solo sin ti – dijo mientras se acercaba y lo agarraba con mucha fuerza por los brazos – te eche de menos Tsuna – se acercó para jalarle el cabello y causando dolor en el proceso, así le doblo el cuello y fue cuando se dio cuenta que Masato acercaba su boca al lugar donde Hibari había dejado su marca, fue ahí que reaccionó, no podía dejarse tocar por ese hombre, él le pertenecía al demonio.

- No me toques, que no vez que me da asco tu presencia – gritó Tsuna con el poco valor que había reunido en esos momentos, lo había gritado con los ojos cerrados, así que cuando agarro valor para poder ver a Masato a los ojos, el mismo tenía una mirada furiosa que él jamás había visto en sus años en la escuela elemental y se asustó.

- Con que te doy asco, eh... perfecto - así Tsuna recibió un puñetazo en las costillas que lo dejo sin aire y acabo arrodillado en el piso – voy a hacer que tu cara le de asco a todos.

Masato tomó impulso para dar la primera patada, pero algo lo detuvo en seco, al voltear vio a su peor pesadilla el que le había quitado a su juguete favorito, al sujeto que había alejado a Tsuna de él, lo vio y con toda la ira acumulada giró sobre su propio eje y le dio un puñetazo en la cara, lo cual sorprendió a Hibari, nunca ningún herbívoro se había atrevido a golpearlo, pero este se había ganado un pase directo al infierno, uno por tocar su propiedad, dos por golpearlo a él y tres por romper sus reglas.

Tsuna no podía levantar la mirada por el dolor, así que sólo vio un par de pies extras que detenían a Masato de que empezara a torturarlo, pero en su interior sabía que era Hibari, así que cayó en la inconsciencia de nuevo, esa voz en su interior jamás lo había engañado cuando se trataba de su demonio, así que confió en lo que pasaba a su alrededor y quedó inconsciente.









Fue cuando volvió a soñar, él se encontraba en un lugar obscuro y entonces vio como una luz se acercaba a él a gran velocidad, llenando todo el lugar, fue cuando Tsuna pudo abrir los ojos y vio su escuela, la veía desde arriba, prendida completamente en llamas, era un paraje rojo intenso, y él se veía tan blanco y con unas alas de ángel que no sabía de donde habían salido, fue cuando vio sobre la azotea de la escuela un hombre parado, algo en su interior le decía que no era un hombre malo así que se acercó al mismo y vio como del hombre le nacían unas alas negras de la espalda y al levantar la cabeza, vio a Hibari, pero con el cabello un poco más largo y suelto, con unos ojos rojos y una sonrisa demoníaca.

SOMBRAS DEL PASADO (Katekyo Hitman Reborn) (Yaoi18+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora