Capítulo 21 Temporada 2

73 7 1
                                    

Capítulo 21: Nos vemos

Cuando desperté solamente esa amable chica de cabello rosa que yo mismo aseguro que es mi mejor amiga estaba acostada sobre mis piernas ¿Cuánto tiempo estuve dormido? Pudieron ser un par de días. Ella solo me miraba estando con una expresión de gran cansancio, el cabello grasoso como si no lo hubiera lavado en días.

-Hola Esteban-. Suelta un bostezó demasiado largo. Sonríe.

No sabía que decir, talvez: "Oye ¿Te gusto como destruía a ese demonio que casi nos asesinaba a todos?" Hmmm, no, era demasiado. Pero tenía que decir algo. Mientras estuve aquí siempre me quedaba sin palabras y desesperadamente trataba de dar explicaciones sencillas o aburridas, solo que esta vez era más que obvio que jamás me creerían cualquier explicación aburrida y estúpida que yo vdera.

Fluttershy se da cuenta de que trato de hablar pero no puedo. -Esteban, Rushdell nos lo dijo todo-.

-¿Enserio?-.

Ella asiente -Claro-. Suspira -De principio a fin-.

-Y.....-.

-No te preocupes, al principio a mí y a las demás se nos hizo algo muy difícil de creer pero...con lo que vimos hace una semana es mucho más que suficiente-.

-¿Llevo dormido una semana? ¿Que sucedió en ese tiempo?-.

-Oh, nada importante, Rushdell te hizo una transfusión de sangre ya que sin ella estabas a punto de morir-.

-¿El dio su sangre por mí?-.

-Así es-. Ella pone su mano sobre la mía -Eso es algo que le agradezco muchísimo, él te salvo la vida. Después te trajimos a su casa y aquí has estado un largo rato. Para serte sincera empezó a asustarme creyendo que no despertarías jamás. Con todo lo que tú hiciste...creí que morirías-.

-Je...no fue fácil, pero estoy feliz de saber que lo logre-. Hubo calma, nos sentíamos tan tranquilos y ya no había ningún ruido. Era como si el mundo hubiera querido guardar silencio para que pudiéramos hablar sin ninguna distracción. Ella y yo nos miramos, se ruboriza. -Estoy más feliz sabiendo que tu estas bien-.

Ella agacha la mirada, como queriendo evitarme pero su sonrisa no desaparece -Yo...escuche lo que gritaste al momento en que empujaste esa cosa morada-.

Lo recordé muy bien dije -Eso...emmm...veras..., eres mi mejor amiga y...-Decidí de alguna manera dejar de contener lo que iba a decir -Quiero que sepas que yo odio profundamente verte llorar, no hay nada que me duela más-.

Ella se acerca para abrazarme fuertemente. -Gracias, te quiero mucho Esteban- Dice susurrándome al oído.

Pasaron un par de días, recibí muchas visitas, para empezar vinieron Cherry y sus amigas que jamás me presento. Las chicas me cuidaban muy bien y venían a visitarme de vez en cuando, pero la única que tenía un horario estricto para venir era Fluttershy. Quien en las tardes me traía chocolate caliente, me cambiaba los vendajes y me contaba cómo iba el refugio de animales, eran de las mejores tardes que yo podía pasar. Sentí paz dentro de mí, como si por fin después de ya muchísimo tiempo me diera cuenta de que todo esto es por fin el resultado de una larga y dura pelea.

Una noche cualquiera, yo estaba dormido de nuevo en el largo sillón en la sala de Rushdell, hasta que a las 11:30 pm escucho un ruido en las escaleras que de inmediato me despierta. Me muevo rápidamente y me doy cuenta de que es Rushdell vestido como fuera a salir a un lado. -¿A dónde vas?- Pregunte, es normal tener curiosidad con él, siendo sincero, con Rushdell jamás se sabe nada.

-Ven conmigo, ya es hora-. Dice de manera indiferente e indicando a una silla que tenía por encima mi ropa.

No espere más. Algo que de verdad desarrolle en el tiempo que lo llevo conociendo, es que casi siempre es bueno solo obedecer lo que dice y ya. No es de la clase de personas que te darán explicaciones ahí mismo solo porque tú las pidas.


Rushdell me llevo a caminar por los vecindarios, sintiendo un poco el calor del verano, pero también había una muy agradable brisa que de vez en cuando nos refrescaba. Yo no dije nada. Estuvimos en pleno silencio, solamente se escuchaba el sonido de nuestros tenis por la acera. -Lo lograste-. Habla sin yo que me lo esperaba.

-¿Perdón?-. Dije al no entender.

-Mataste a Tandrius, fue sorprendente como lo hiciste-.

Siempre he sido alguien un poco modesto, para nada consideraba que era algo para alardear o presumir. -Pues...si, pero fue gracias a lo que me enseñaste y el tiempo en que entrene contigo, sin ti yo no hubiera durado nada peleando contra el-.

-Je... sé que sí, igualmente debes darte un cierto reconocimiento tú mismo, has sobre pasado cualquier expectativa que tenía sobre ti, de verdad no pensé que alguien llegaría tan lejos como tú lo has hecho-. Guardo silencio.

Entonces solo me di valor para preguntarle -¿Para qué me trajiste aquí?-.

Rushdell por un momento mira al cielo con unas cuantas estrellas en él, pero es normal que sean tan pocas por culpa de la contaminación lumínica en la ciudad -Esteban, esto aún no termina, de hecho creo que solo diste un muy pequeño paso al derrotar a Tandrius-.

-¿A qué te refieres?-.

-Supongo que debo decírtelo, aclarártelo. Tandrius en realidad es una contra parte maligna mía-. Puse mi típica cara de idiota al no entenderle. De hecho no era sorpresa, solo que no entienda bien. Que estúpido me veo y siento. -Tendré que decírtelo todo desde el comienzo-. Rushdell me hace ir a un parque obviamente este vacío, me invita a sentarme en una banca cualquiera.

El aclara ligeramente su garganta, se ve que tiene mucho que decir -Todo comenzó en Equestria-.

-¿Tú también eres de ahí?-.

-Así es, de hecho tengo mucho tiempo de no estar por allá. Los últimos recuerdos que tengo de esos lugares solo son...Quien sabe. Mi hogar, quizás mi antiguo empleo. Yo era un militar y de los buenos, era mi propio jefe-.

-¿Qué sucedió? ¿Porque estas aquí entonces si todo te iba tan bien?-.

-Tranquilo amigo que ya voy para allá. Veras, esto que te contare fue un poco después de que la princesa Luna regresara de su destierro, y de que esas 6 ponis la vencieron usando los elementos de la armonía. Estábamos todos tranquilos, nadie tenía problemas y mucho menos conmigo al mando de uno de los pelotones más grandes y fuertes de Canterlot. Sin embargo paso algo curioso. Luna me busco en la noche, me conto que el problema aun no acababa. Yo estaba muy confundido pero ella me explica que lo que la obligo a convertirse en Nightmare Moon es un extraño virus que al parecer se alimenta de las dudas, la desesperación, los celos y muchos malos sentimientos-.

-Yo...no lo sabía, pensé que lo hacía por voluntad propia-.

-En parte tienes razón, pero el virus lo único que hace es sacar esa ira y malos pensamientos y se apoderan de tu cuerpo, de tu mente, absolutamente de todo. Tanto el virus como el usuario son culpables. En fin, esa noche ella estaba aterrorizada y tenía lágrimas en los ojos, parecía que no había dormido en días. Ella me dijo que sentía como el virus retornaba en ella, y era algo obvio, en su primera Nightmare Night la princesa Luna no dejaba de hablar como si fuera 2 personas. Ella tenía confianza plena en mí, entonces solo me pidió que la liberara de ese terrible mal. Después de buscar la cura...al parecer solo había una salida-.

-Y... ¿Cuál era?- Dije sintiendo un gran suspenso. La atmosfera era más que perfecta para una de esas historias terribles que a veces deseamos jamás haber escuchado.

Rushdell respira profundo y dice -La única solución era que el virus pasara a otro usuario, a otro poni en pocas palabras-. Su mirada se pierde el vacío, como si sus recuerdos estuvieran siendo proyectados enfrente de nosotros -Así que ella...uso su magia y...transfirió el virus a mí-.

-Espera, si tú tienes el virus y se supone que cambia al usuario ¿Entonces porque estaban separados? ¿No deberían ser uno solo?-.

-Esa era más o menos la idea, sin embargo yo no tengo pensamientos malos o deseos destructivos, el virus no tuvo tanto efecto en mí ya que soy alguien que solo busca hacer el bien a cualquier costo. Hubo un punto en que, para evitar que de alguna manera avanzara dentro de mí, yo solo...lo expulse de mi cuerpo creando otro ser distinto pero...lleno de maldad pura-.

-¿Y qué hiciste?-.

-Je, créeme que esa esa una larga historia pero concluyo de esta manera. Mi parte maligna, que se hizo llamar Tandrius el mismo, destruyo muchas cosas en Equestria, asesino y degolló a ponis, miles de ponis inocentes, hizo un caos. Intente destruirlo pero era más fuerte que yo, además de que también poseía muchas de mis habilidades mágicas. Lo único que las princesas y yo pudimos hacer fue encerrarlo en el Tártaro. Con el tiempo me sentí responsable por lo que sucedió así que solo...-.Hace un ademan con su mano-....Solo decidí escapar de ahí, tratar de dejarlo todo atrás para iniciar una vida aburrida sin que nadie salga herido por mi culpa-.

Me sentí extrañamente identificado con él al mencionar ese detalle. Por fin, después de muchos meses encontré algo en lo que nos parecemos: Nosotros odiamos que alguien más sufra por nuestra culpa.

Yo sin embargo debía proseguir para tratar de darme el alivio de saber que fue todo -Aun así no comprendo porque me trajiste aquí para contarme esto-.

Rushdell me miro y bajo su sombrío tono oscuro dice -Esteban...yo lo siento mucho, pero tuve que darte de mi sangre para que vivieras y la consecuencia de esto es que ahora tu también estas infectado-.

Me pare de la banca -¡¿Cómo?!- Hable enojado de tan solo imaginar la historia de Rushdell conmigo como protagonista.

-Cálmate, lo hice para salvarte-.

-¡Lo sé pero...! ¡Simplemente no puede ser! ¡¿De qué me sirve haber conseguido vivir si es que tengo que tener esto conmigo?!-.

Él se pone de pie -Escúchame muy bien Esteban-. Me sujeta de los hombros y hasta me sacude un poco para que me calmara -Tu pudiste contra mi "yo" malvado, con mucha más razón sé que puedes hacer lo mismo en tu caso-.

Me quede sin respuesta para esa razón casi sin garantía o fundamento -Rushdell.... ¡Maldita sea!-.

-Créeme que me gustaría quedarme aquí a discutir contigo toda la noche, pero el resultado es el mismo, ahora tienes dos opciones: La primera es que te quejas todo el día de tu mala suerte y joderte y la segunda es que te comportes como debes y enfrentas esa situación-.

Nunca supe cuál es la razón por la que siempre tiene razón cuando se tratan de cosas que siempre tienen que ver con golpear hasta la muerte a algo.

-Para acabar, debes volver a Equestria-.

-¿Que?-.

-Equestria te necesita Esteban, estas curado, yo mismo te cure en el instante en que te lastimaron, solo te puse esos vendajes para que tuvieras justificación de descansar un poco.-.

Me mire las manos muy sorprendido, con los dientes me quite las vendas. Tenía razón, mis manos estaban normales, como si nada hubiera sucedido, como si ninguna pelea hubiera pasado. -¿Cómo sé que es el momento de volver?-.

-¿Recuerdas el primer día que nos vimos? Yo tenía una maquina extraña que recibía mensajes raros de cualquier lado del universo o de otros-.

-Cierto...también me mencionaste que gracias a eso supiste que llegue aquí ¿Que paso ahora?-.

-Ayer en la mañana la maquina tenia este mensaje...no entendí que quería decir, pero supongo que tiene que ver contigo-. Rushdell saca un papel no muy grande su pantalón y me lo entrega.

Decía con letras cursivas:"Rueda Redonda"

El corazón se me detuvo...Applejack. El día en que mi Applejack y yo fuimos a una feria...así le pusimos a la rueda de la fortuna "Rueda Redonda", era algo que solo conocíamos ella y yo. Me alegre como nunca en mi vida. -¡Applejack!-. Grite -¡Es mi Applejack, está viva!......¡Debo regresar a Equestria cuanto antes!-.

Rushdell me dijo que la única forma de poder regresar era atreves de un espejo que se encontraba enfrente de Canterlot High, la estatua con el caballo (Que por cierto a simple vista se ve como algo majestuoso) Solo estaría abierto por durante 3 días y no volvería a abrirse en 30 lunas ósea en 2 años y 6 meses. Era una oportunidad única que debía aprovechar ahora pero...había algo que debía hacer antes de irme en el silencio de la noche. Solo quería volver sin decir adiós...solo hare la excepción con una persona.

-Despierta-. Dije hablando en voz baja. -Vamos despierta no tengo mucho tiempo, Fluttershy anda despierta-. Me encontraba en la habitación de mi mejor amiga

Fluttershy solo hace un par de gestos para después abrir los ojos. Estuvo a punto de gritar, pero cuando le puse la mano en la boca y vio que se trataba de mí, solo se tranquilizó. Era de noche, no había nada de luz más que la de la luna que entraba por la ventana. -Tranquila, sé que no es el mejor momento para tratar de hablar contigo pero debo hacerlo ahora-.

Ella se quita mi mano de encima -¿Esteban?-.Me ve confundida

Me dio tanta tristeza lo que estaba de decir y de hacer, en pocas palabras pasaba esto. El portal hacia Equestria se cerrara en 20 minutos, y solo tengo tiempo para poder decirle adiós. -Sí, yo y nadie más, como siempre ha sido desde hace unos meses que nos conocemos-.

Fluttershy se frota sus ojos para despertar y aclarar su visión, se sienta en el borde de la cama sin entender que pasa. -¿Porque estas aquí?-.

Mi silencio era suficiente para saber que se trataban de malas noticias, muchas que decir y tan poco tiempo. -¿Cómo decirlo?-Me rasco la cabeza sin poder concentrarme con el hambre que cargaba encima. Suspire como nunca lo había hecho en mi vida -.......Debo irme-.

-¿Irte? ¡¿A dónde?!-. Se altera, supongo que aún me guarda cierto resentimiento por irme ese día después del baile de invierno sin decir adiós, ahora es mi oportunidad para no cometer el mismo error dos veces.

Me arrodille para quedar a su altura, bueno, un tanto más abajo. -Debo irme a casa-.

-Te refieres a... ¿Equestria?-.

-Sí, ya sabrás por qué ¿No es así?-.

Fluttershy se distrae por unos instantes -Si, están siendo atacados ¿Verdad?-.

-Exacto...me necesitan más que nunca....soy el único que puedo ayudarlos-.

-Lose....-. En su silencio y destrozándole de nuevo su frágil corazón...ella llora, muy tranquila, parece que se está contenido demasiado, como si quisiera soltar un muy fuerte grito. -Yo...no quiero que te vayas...-.Su voz estaba destrozada.

Tanto me lastimaba hacerle daño de esta forma tan vil que no soporte más el llorar yo también -Créeme que yo tampoco quiero irme pero...Tengo cosas que hacer allá, ellos son mi familia así como tú. Están sufriendo y no puedo permitirlo más.- La luz de luna reflejaba sus pequeñas lágrimas como si fueran cristales en su rostro, las explicaciones están de más en estos momentos.

-No quise hacerte llorar, Fluttershy si estoy aquí es porque quiero que sepas que siempre te recordare, te llevare conmigo para siempre. La vida apenas empieza para ti. Sé que estoy echando todo a perder pero...debes seguir adelante por favor...puedes hacerlo sin mí.

-¡Yo no quiero hacerlo sin ti!-.

Me quede paralizado, debía hacer algo, no puedo irme dejándola con ese sentimiento de negación, como queriéndole hacerle sentir mal apropósito. Esta sería la primera vez que me pongo algo firme con ella. Me senté junto a ella. -Escucha, yo sé que va a ser duro, pero te lo dije en la carta que te deje en tu casa hace 6 meses. Te dije que si yo no vuelvo tú debes seguir adelante. Lo siento mucho pero me tengo que ir, debo dejar esto y enfrentar la verdad como debí hacerlo hace tiempo- Sujete fuertemente su mano -Te juro que pase lo que pase yo siempre te voy a recordar, para siempre ¿Me oyes?-.

Ella recarga su cabeza en mi hombro -Ellos....sí que son importantes para ti-.

-Yo haría todo por ellos, así como lo hice por ti-. Me puse de pie sabiendo que el tiempo era corto -Debo irme ahora, por favor....despídete de todos por mí-.

Ella solo me mira en completo silencio mientras sus ojos tomaban un pequeño tono rojizo debí a llorar en exceso al igual que su nariz. Sus mejillas mojadas por las lágrimas de un adiós. -¿Te volveré a ver?-.

Abrí la ventana de su habitación que fue por donde entre, el viento de la noche me ayuda a aclararme un poco más. Me quede callado. Sonreí para decirle -Claro que sí, pero....por favor sigue repartiendo esos volantes del refugio de animales, siempre puede haber un voluntario...quizás un chico llamado Rain...búscalo en la escuela, estoy seguro de que le encantara ayudarte-.

-Entiendo......................................Adiós Esteban-.

-Nos vemos....jamás te olvidare-. Salte del borde la ventana y me aleje corriendo, puesto que solo faltaban 2 minutos para que se cerrara el portal. En cuanto a esa chica claro que siguió adelante y por si misma....pero lloro toda esa noche.

He aprendido que las despedidas son algo horrible y se hacen peor dependiendo de las personas con las que conviviste. Más que nada, sé que no existen las despedidas, siempre habrá un talvez o un quizás que nos haga volver a encontrarnos con esas personas. No debemos llorar por el adiós, más bien tenemos que reírnos de vez en cuando por esos grandes momentos que nos dejó esa personas, esas huellas que sin duda quedaran en mi para siempre -Gracias por todo chicas-. Dije en voz alta mientras atravesé el portal corriendo justo 4 segundos antes de que este se cerrara.

Y así fue como retorne a Equestria.

¿Dónde estoy? ¿Funciono? Las dudas recorrían mi cabeza como un montón de abejas molestas zumbando sin parar, picando el sub cociente y preparadas para hacer un panal sobre mi cerebro. Pero no estaremos tanto. Lo que en verdad era insoportable, era el tremendo dolor que sentía, un dolor muscular por todos lados. Mis piernas se doblaban, mis dedos se comprimían para solo formar parte de mis huesos. El cabello me comenzó a crecer de manera rápida, lo más extraño fue como sentir el cambio sobre mi cabeza, como si toda mi medula ósea estuviera siendo modificada de manera brutal y sin compasión.

Y por último pero no menos importante, algo me empezó a sobresalir de la piel de mi espalda y violetamente me brotaron mis alas. Me quede quieto por el cambio repentino, como su hubiera olvidado hasta como caminar. Mantuve el equilibrio, me mire de arriba abajo, mi pecho, mi melena, mi cutie mark que esa maldita arma legendaria, mis cascos y mis patas. Como gran final....El tono azul en mi piel. Con todos estos cambios ya me es difícil distinguir acerca de quién soy yo.

Recuerdo mi primer día en Equestria, no tenía ni la más mínima idea acerca de quién era, acerca de mi identidad, si estoy en un sueño o en la vida real. Pero lo recuerdo, ya no importa si esto es verdad o no, yo soy Esteban y debo defender a todos los que lo necesitan aunque eso me cuesto morir y la pelea con Tandrius lo demuestra.

Estoy viendo un lugar vacío, lleno de basura, muebles cubiertas con mantas blancas pero negras por culpa de la suciedad. El piso estaba hecho de un material claramente inconfundible. Tan liso y podías ver tu propio reflejo en él y un par de líneas trazándose desde las orillas hasta el centro -Estoy en el imperio de cristal-. Susurre para mí mismo.

Salí, el castillo entero y sus pasillos se veían cubiertos por oscuridad como si fuera de noche, las ventanas no dejaban pasar ni la más mínima luz pero por dentro unas antorchas hechas con cráneos de ponis estaban iluminando el sendero incierto por todo esto lugar. Camine, empiezo a mover las alas para empezar a acostumbrarme de nuevo a ellas, llevaba un poco menos de un año que no podía volar. No había guardias pero en los momentos en los que asomaba la cabeza por las esquinas veía como había changelings de Chrysalis en lugar de los típicos guardias del imperio de cristal. Puedo suponer entonces en que esto lugar ha sido tomado...pero ¿Porque en especial este lugar?

Gracias a un milagro salí sin ser visto por nadie, no había casi ningún ruido, como si de plano no hubiera nadie aquí. Me escondí un callejón de la ciudad solo presenciar algo horrible. Los ponis de cristal tenían cadenas en sus cuerpos, todos en una hilera caminando con unas expresiones de suma tristeza, se veían como estaban decepcionados de la vida. Llegaban a un punto en que los Changelings solo les ponían unos cascos de mineros y les daban unos picos. Ahora sé por qué. El rey sombra desde un comienzo quiso esclavizar a los ponis de cristal para que ellos desenterraran algo que se encontraba debajo del reino de cristal, he olvidado de que se trataba pero se sabe de ante mano que no es para nada bueno.

Salí de ahí corriendo...me sentía molesto, esos ponis sufrían por culpa de Chrysalis y Sombra.

Tengo muchas dudas ¿De verdad mi Applejack estará viva? ¿Cómo fue que sobrevivió al incendio? ¿Dónde estarán mis amigas? ¿Qué les paso a las princesas? ¿Qué le habrá pasado a Discord?..............................................................¿Donde esta mi espada?

Extendí mis alas y emprendí vuelo hacia Ponyville listo para quizás...los momentos más difíciles a los que me tendré que enfrentar.



Fin del Capitulo...

My little pony: Un humano en PonyvilleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora