good luck, leah. [Kit Connor]

10. Moriremos vivas

Leah

Tw⚠️: Agresión, golpes, presuntos abusos. LEE BAJO TU PROPIA ADVERTENCIA NO PUEDE SER DE TU AGRADO.

Nos fuimos caminando y al salir del cuarto vimos que salían niñas de todas las habitaciones del pasillo todas de nuestra edad más o menos.

Todas protestaban o preguntaban, creo que nos comenzamos a asustar en el momento en que una dijo que se iba a regresar y que no quería ninguna bienvenida y una de estas la golpeó y se la llevó más adelante del cabello.

Mae agarro mi mano y no la volví a soltar. Daphne iba a un lado mío y eso mas que suficiente para sentirme un poco más segura.

¿Donde estás Kit?

Salimos de las habitaciones y solo dimos la vuelta a la izquierda y después abrimos otra puerta y también era un pasillo de la habitaciones solo que esta vez este pasillo no tenía salida.

Entramos a otra habitación que tenía un candado pero este estaba abierto ya, unas escaleras de piedra y ahí bajamos todas con cuidado porque eran muchas y sin barandal ahí fue como pudimos ver que parecía una cueva, hacía frío aquí como si estuviéramos en una cueva como Kit me describió el lugar, rocoso, frío, rojizo, y había cadenas en las paredes.

Al llegar al final comenzaron de una por una a ponernos esposas y ponernos sentadas contra la pared y ahí mismo encadenarnos.

Tal como con los niños, había dos niñas enfrente de nosotras.

— Leah. — Mae me susurró. — ¿Esa es la coordinadora?

— Tiene el mismo peinado. — Todos traían una máscara o una pañoleta y parecían ser como dijo Kit, los directivos.

— ¡Queremos que vean que se les hace a las personas que no obedecen y son castigadas por eso! — Comenzó a hablar lo que parecía una maestra.

Las niñas de enfrente estaban paradas y de igual manera encadenadas pero a una silla y fuerte. Ellas estaban mucho más asustadas que cualquiera de nosotras.

— Aquí se demuestran que ustedes mismas se castigan. — soltó una risa. — Literalmente. — y rio más. — Mi niña. — le dijo a una niña que estaba de su lado sin cadena claramente y le dio un cinturón.

Cualquier cosa qué pasó en las próximas dos horas, fueron insólitas. Completamente.

La niña que le dieron el cinturón, no dudo ni un poco para golpearla en el cuerpo. Solo una vez, luego las maestras que eran en su mayoría comenzaron a incitarla a más y esta no lo dudo... ni un poco.

La golpeaba con si le hubiera hecho algo tan horrible y así pudieran verla sangrar. En cuanto los golpes llegaron a la cara esta comenzó a sangrar por los rasguños que le generaba.

— ¡Suficiente! — y está paro. — ¡No las quiero ver llorar ni gritar ni lloriquear! — Lo dijo porque precisamente es lo que estaban haciendo todas.

Después un señor canoso se acercó a la otra chica y esta tenía un vestido de pijama.

Era él.

Mi vecino a unas calles, el señor que me daba escalofríos cada vez que lo veía. La última vez que lo vi fue cuando mi papá no me recogió y me tuve que ir sola a casa.

— Oh por Dios. — Daphne susurro casi para si misma.

La estaba desnudando.

— ¡Déjela! — Una niña del otro lado fue lo suficientemente valiente para gritarle y eso fue lo peor.

— Niña estupida. — Fue lo peor.

Lo peor.

Agarro un bate y la golpeo. Una vez. Una sola vez. No sabemos qué pasó porque estaba mucho más lejos de nosotros solo la vimos que las niñas de alrededor las trataban de despertar.