VIII

2.7K 471 121
                                    

La comida había transcurrido de forma cotidiana, con el único cambio de que ese día solo eran Han y Minho, los demás habían tenido pendientes y habían avisado que llegarían hasta la noche.

La vida con los Lee era así, ocupada, pero con mucha presencia con los otros.

Desde que se había decidido que vivirían ahí por un período no habían tenido tiempo para conversar solos, sin embargo, cuando Minho estaba en casa intentaba atender siempre a ese par.

-He traído más leche, Seungmin me ha explicado como debemos calentarla para que no tenga bacterias y Ahn pueda tomarla.- Dijo Minho recogiendo los platos que habían utilizado para comer.

Jisung articuló un "Gracias" que fue inaudible, pero que Minho había entendido.

-Jisung.- Tomó asiento frente a él.- Creo que tenemos que empezar a hacer algo respecto a esta situación.

El castaño frunció el ceño, no entendía a lo que se refería.

-Tu voz.- Lo miró fijamente.- tienes que recuperarla.

Durante toda la semana se habían adaptado para entenderse, el castaño articulaba las palabras o las escribía en una libreta de ser necesario y Minho lo entendía, así que se estaban acostumbrando, pero Jisung parecía simplemente haber aceptado que ya no podía hablar y Minho no iba a tolerar eso.

-A penas y pude conocer tu voz, la olvidaré pronto si no puedo escucharte de nuevo.- Era mentira, Minho revivía ese susurro todos los días.- Necesitas volver a hablar.

Jisung se encontraba frustrado, tomó su libreta y rápidamente escribió "¿Crees que no lo he intentado?"

-¿Crees que lo has intentando lo suficiente?- Le respondió arqueando una ceja.- Escucha, tengo una idea.- hizo una pausa antes de continuar.- ¿Te gustaría salir a caminar un rato?

Jisung se sorprendió, no había salido en una semana y realmente no quería hacerlo, así que negó rápidamente y artículo "Ahn".

-Claro que vendrá con nosotros, ve a protegerlo con una cobija y abrigalo, de todas formas el clima es muy bueno.- Minho no iba a rendirse.- Justo a esta hora se levanta de su siesta, creo que le encantará.

Jisung estaba nervioso, no quería salir y encontrarse con más personas, no quería que los vieran.- "Tienes que volver al trabajo".- le escribió.

Minho volvía a la casa para comer junto a los demás y regresaba al hospicio para seguir trabajando unas horas y finalmente regresar. Era algo que antes no solía hacer debido al tiempo perdido en el traslado y la poca practicidad de ello. Era algo que no hacía antes, pero ahora sí y Jisung lo desconocía.

-He decidido que hoy no.- se econgio de hombros.- Le avisaré al señor Hyunjin para que me mantenga al tanto y mañana retomaré.

Jisung no sabía bien en que trabajaba Minho, pero entendía que él era el jefe.

-"No tienes que preocuparte, no hace falta que no asistas al trabajo".- Insistía en su libreta.

-Han, por favor ve a alístarte.- Pidió Minho decidido y a Jisung no le quedó otra opción más que aceptar, no solía llamarlo por ese nombre.

Subió cuidadosamente y abrió la habitación de invitados dónde habían estado hospedados ese tiempo, encontró a Ahn en el fuerte de cobijas y almohadas que le habían creado Félix y Jeongin para que no se lastimara al dormir a petición del mayor "Son buenas personas" pensó y se acercó al pequeño.

Ahn tenía los ojos muy abiertos e intentaba levantarse empujando sus bracitos y estirando sus piernas, Jisung lo tomó en brazos.- "Hoy saldremos Ahn, se que no has visto mucho el mundo"- pensó pientras lo cargaba.

Susurros al viento [Minsung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora