El sonido de los niños jugando y divirtiéndose le dio una ola de melancolía que no esperaba. Añoraba aquellos días donde sus pequeños jugaban felices en Wakanda, sin ninguna preocupación o peligro que los alcanzara, lejos de las responsabilidades del trono, lejos de Killmonger, solo sus tres hijos siendo felices.
-¿Viene a ver a la maestra?- uno de los pequeños se acercó con una sonrisa en su pequeño rostro. Su acento era marcado, así que suponía que no era su acento natal. Ramonda simplemente asintió regresándole la sonrisa.- Venga- el pequeño la tomo de la mano corriendo llevándola al interior del lugar. No hacía falta decir que todo marchaba bien por ahí, el sitio era amplio y había diversas plantas decorativas. Algunos niños llevaban uniforme, otros no, algunos pintaban, otros parecían escribir algo, en general todos parecían pasarla más que bien.
El pequeño la guio por un pasillo y una vez ahí la soltó señalando al frente.
-Ahí esta- Ramonda desvió su mirada a la joven. Se encontraba con dos niñas, al parecer les explicaba algo sobre la vida marina, pues frente a ellas tenían una pecera. No pudo evitar sonreír al verla tan tranquila explicando, había pasado demasiado tiempo...
Sus ojos cayeron sobre la Reina, lo cual le causo una extrañeza. Dirigiéndose de nuevo a sus compañeras, Nakia les sonrió. Las pequeñas parecieron notar también la presencia de Ramonda, pues su atención fue directa a ella.
-¿Les parece si seguimos después?- pregunto mirando a las niñas. Estas asintieron- Vayan a jugar, ya casi será hora del almuerzo, no olviden estar en sus lugares- las pequeñas tomaron al niño y los tres se dirigieron al patio. Al estar las dos solas, Nakia no pudo evitar desviar su mirada al suelo.
-Me alegra tanto que estés bien... y que esto esté funcionando- una pequeña sonrisa de la morena lleno su rostro.
-Les enseñamos desde lo más básico hasta la vida de otros seres- comento orgullosa- Además manejamos talleres que ayudan a que descubran diversas habilidades- Ramonda se acercó a ella y sin más la abrazo con cariño. Nakia le correspondió de inmediato, sintiendo un gran cariño abordar su cuerpo.
-Extrañaba abrazarte- se separó de la joven manteniendo su rostro de felicidad.- Todos te extrañan y yo también...- Nakia bajo la mirada- Nos hiciste demasiada falta... pensé que te vería, ya sabes... en el funeral- la voz de la Reina se quebró tras decir estas palabras. Nakia por su parte sentía sus ojos cristalizarse. Sabía que el tema se tocaría al tener a Ramonda ahí, sin embargo no pensó que fuera tan pronto.
-Lo siento madre... intente hacerlo, pero no pude, lo siento madre- Ramonda tomo su rostro con delicadeza.
-Te entiendo... te entiendo perfectamente- Nakia tomo su mano dándole un apretón. De alguna forma, le tranquilizaba.
-Y, ¿Cómo están ellas? Shuri y Maiomi...- la expresión de Ramonda cambio drásticamente.
-Ellas... bueno, fueron secuestradas-
-¿Qué?-
-Nakia... Killmonger regreso- Nakia dio unos pasos atrás con algo de temor- Ataco a Shuri y Maiomi y...- se calló unos momentos para darse las fuerzas para continuar- hasta ahora Shuri se encuentra bajo el poder de un tal Namor- Nakia frunció el ceño- Es alguien nuevo... Rey de una nueva Nación, estaba dispuesto a querer declarar la batalla a Wakanda-
-¿Qué...? Pero...-
-Hay más Vibranium en el mundo Nakia, y Killmonger no se detendrá hasta obtenerlo, aunque eso nos lleve a una guerra- la joven trataba de procesar la información.
-Maiomi... ¿Qué paso con ella?- Ramonda guardo silencio. No era necesario que dijera más.
-No estamos seguros aun...-
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My Princess
Science FictionUna princesa cuya vida ha sido dura con ella, arrebatando de su lado a las personas que más amaba y siendo señalada por no pertenecer al reino de Wakanda. Un Rey que lo único que conoce es el sufrimiento y destrucción que trae la superficie. Maiomi...