Love Of Letters

Capitulo 017

Amelia Hawke

Desperté aturdida deseando que solo haya sido otro mal sueño, pero mis deseos fueron destruidos cuando vi el cuarto en el que me encontraba, parecía un sótano, quería ir a investigar mas sobre este cuarto, pero mi vista aun seguía borrosa y otros sentidos estaban muy aturdidos, no lograba entender lo que estaba pasando, me sentía perdida y asustada.

-Veo que ya despertaste- Escuche desde la esquina del cuarto, intente forzar la vista para verlo pero aun no me era posible, esa voz se me hacia conocida, ya la había escuchado antes, pero aun no la lograba reconocer.

-¿Que?- Cuestione intentando tallar mis ojos para ver pero la otra figura se aproximo hacia donde me encontraba sentándose en el colchón -¿Padre?- Cuestioné dudosa.

-No podía permitir que te alejaran de mi- Murmuró acariciando mi mejilla lentamente, mientras que poco a poco recobraba mi visión dándome cuenta que la persona que se encontraba frente mío tenía una máscara.

Ninguno de los dos volvió a hablar, la cabeza me daba vueltas aún me sentía muy aturdida, volte lentamente hacia la pequeña ventana que se encontraba en la parte superior del colchón seguí examinando cada parte del cuarto hasta que el volvió a hablar.

-Tendre que tenerte aquí por un rato, pero no tienes de que preocuparte, todo va estar bien- Dicho eso se levantó de su acomodo y salió del cuarto dejando la puerta cerrada.

Al fin había cobrado completamente la conciencia mientras que el miedo se apoderaba de mi, no sabía que estaba haciendo aquí, lo único de lo que estaba consciente, era de que mi padre estaba teniendo otro episodio.

(...)

No sé cuánto tiempo había pasado, tenía hambre y la luz por la ventana se empezaba a atenuar dando así sentido a que había pasado casi un día entero desde que me encontraba encerrada en este cuarto, el no había bajado en todo el día, supongo que está vez si se metió en un problema al secuestrar a su propia hija.

Mientras estaba encerrada me dió tiempo de pensar y cuestionar bastantes cosas sobre esto, ¿Mi padre es el raptor?¿Estoy en mi sótano?¿Que paso con los otros niños?¿Dónde está Vance?¿Por qué nunca me di cuenta? Mientras me hacía todo tipo de preguntas la luz se encendió y con ella la puerta se abrió, por instinto retrocedí quedando completamente pegada a la pared.

-Veo que ya te encuentras mejor, princesa- Comentó entrando al cuarto con una bandeja de comida, el olor inundó mis fosas nasales haciendo que mi cuerpo respondiera con el rugir de mi estómago.

-¿Dónde están los demás niños?- Solté sin dar rodeos aún pegada a la pared por miedo de que me fuera a hacer algo, ya que cuando tenía episodios normalmente su personalidad era más inestable que de costumbre.

Sin decir nada camino dos pasos más y dejo la bandeja en el piso y sin despegarme la mirada se sento en el colchón viejo en dónde yo me encontraba.

-Se que debes estar muriendo de hambre, pero no tenía muchas cosas así que te hice huevo- Hablo ignorando completamente la pregunta que había hecho.

-Te pregunté algo- Susurré lo suficientemente alto para que escuchará causando así una mueca en mi contrario siendo forzado a responder.

-Estan bien- Hizo una pausa dibujando una sonrisa que logré ver por la expresión de sus ojos -Por ahora...- Al escuchar lo último mi corazón empezó a latir aún más rápido de lo que ya lo hacía y mi respiración se aceleró haciéndome entrar en un ataque de pánico por el miedo que sentia en ese momento.

Mi padre simplemente se levantó con la misma sonrisa y camino hasta la puerta para salir de la habitación y cerrar la puerta detrás de el. Me quedé en la misma posición por unos minutos hasta que me aseguré de que no volvería a entrar y me dirigí a la bandeja de comida decidida a comer el huevo que se encontraba en el plato.

Estaba a punto de terminar el poco huevo que se encontraba en mi plato pero el sonido de un teléfono me aturdió, realmente sonaba muy agudo y era molesto, cosa que claramente me hizo descolgarlo para evitar que siguiera sonando, pero al acercarlo a mi oreja solo escuchaba una respiración.

-¿Hola?- Hable insegura por la tenebrosa respiración que se escuchaba de la otra línea, examine el teléfono de pared que no había visto antes, por lo aturdida y asustada que estaba viéndolo así como una ayuda para escapar.

Colgaron el teléfono dándome así la oportunidad de llamar al número de emergencia pero cuando lo acerque a mi oreja no se escuchaba nada, no timbraba, era como si el teléfono estuviera muerto así que solo lo colgué para ir por lo que restaba de comida, apenas me alejé unos pasos y el teléfono volvió a timbrar más agudo que antes así que lo tomé rápidamente.

-No sirve de nada que lo intentes- Hablo una voz del otro lado de la línea, sobresaltandome por la sorpresa.

-¿Qué?- Cuestioné con la voz temblorosa viendo hacia todos lados.

-Estos teléfonos son como una especie de interfon, solo sirven entre nosotros...- Murmuró la voz del otro lado de la línea.

-¿Nosotros?- Volví a cuestionar un poco más calmada.

-Si, lamento que estés aquí también- lamento después de haber afirmado mi pregunta cosa que solo hizo que me confundiera y me entristeciera.

Después de la pequeña conversación que tuve con ese niño algunas dudas se aclararon en mi, pero no me sentía feliz con la respuesta, yo sabía que mi padre era raro, pero nunca lo creí capaz de haber hecho esto, pero a pesar que al menos una duda se aclaró surgieron más, solo quiero ir con mi tío.

Hola chicos, perdón por haber desaparecido pero la inspiración no me había llegado antes, espero está semana actualizar aunque sea otros capítulos, les comento que estoy escribiendo una nueva historia sobre avatar, ¡Me gustaría saber sus comentarios sobre esto!