Wei WuXian abrió los ojos.
El mundo se sintió extraño y confuso. Una espina de mal humor lo pellizcó. La rutina de desmayarse y despertar se hizo una costumbre recurrente.
Bien, él era vago y perezoso.
¡Pero no le gustaba perder la consciencia cada tres días!
Trató de no pensar demasiado en el asunto. Cuando intentó girarse sobre la arena, sintió extraña calidez bajo su cabeza. Sus ojos lucharon por enfocarse en su entorno.
Lan WangJi, Lan Zhan, con un gesto hermoso y sereno, le había recostado en su regazo.
La realización lo sobrecogió. Alejándose alarmado como si le hubiese quemado.
Se maldijo, al notar la expresión de sorpresa y preocupación en su rostro de jade tallado.
"¡Me asustaste!"
"Me disculpo, fue impropio"
"No no, fue mí culpa, ¡Tan ridículo! No debí desmayarme en primer lugar" corrigió.
Lan WangJi apenas dio importancia al comentario anterior, sobre su debilidad para permanecer despierto.
Wei WuXian se anonadó.
Si bien, la bella deidad de la isla se había mostrado temperamental y, más tarde, aburrido en su recorrido, jamás pudo imaginar tomar una siesta sobre su regazo.
Wei Ying se lamentó no haber fingido mejor, para reposar en sus tiernos muslos durante más tiempo.
Wei WuXian apartó el pensamiento de un golpe.
Lan WangJi parecía tímido. Sus ojos lo evitaron y sus manos sacudieron los residuos de arena de su gasa y transparencias.
Evitó las bromas estúpidas y rogó por orientación. Lan WangJi no dio más explicaciones. Se puso en pie. Caminando en dirección de las montañas. Alo que Wei WuXian, que había estado pasmado de sorpresa, apenas registró la noche sobre su cabeza. La luna se alzó en gran belleza y las estrellas centellaron como joyas.
"Vamos" llamó WangJi.
Wei WuXian ansió preguntar 'dónde', y 'para qué'. Sin embargo, su voz se atascó en su garganta.
El encanto sublime, e inhumano en Lan WangJi, provocó un pensamiento divertido en Wei Ying.
'Sus prendas se asemejan a la danza de una medusa'
Aquel patriarca obligó a serenar el hilo travieso de sus pensamientos, cuando Lan Zhan se detuvo por un instante para registrar su presencia.
¡No me iré a ningún lado, Lan Zhan!, no dijo.
Tampoco es como si tuviese muchas alternativas de escape.
Wei Ying se preocupó.
Decir que estaba aterrorizado, fue decir poco. Se horrorizó en la idea de haber ofendido a una deidad. ¡Una verdadera deidad!
Lan WangJi pareció notar su inquietud, luchando por tranquilizarlo sin éxito. "Wei Ying no debería preocuparse, no le haré daño"
¡No es a ti a quien le tengo miedo!
Tras caminar por muchos li, llegaron a la cima de una montaña. Incluso en el fresco de la noche, las nubes se asentaron a faltas de la empinada. Por encima de la nubosidad, se presentó un cielo limpio, de estrellas puras y aire fresco. La luna iluminó el mundo. No fue en plata, sino en oro.

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Deidad del mar
FantasyTras ser arrojado lejos como una paria apenas terminar la guerra, Wei WuXian, el temido patriarca Yiling toma la (no muy inteligente) decisión de escapar a tierras lejanas. O- Casarse con una bonita deidad del mar.