Embarazoso

uno

—Ya, ya, cálmate, mira, se supone que te pongo esto aquí y listo.—decía Momo terminando de maquillar a su mejor amigo.

—¿Para qué es esto?—le preguntó mientras se veía al espejo preguntándose cómo seguía con ella. Que para ser sinceros, se veía bien hasta de chica.

Estaba evitando el tomarse fotos, luego sería raro que encontraran eso en su galería.

—¿No te gusta?—ella sí tomó fotos, pero disimuladamente.

—Obvio sí, soy hermoso, pero ¿para qué me maquillas?

—Sólo era para ver que tal funcionaba mi nuevo maquillaje, gracias.—guardó sus cosas y tomó su suéter.

—¿A dónde vas?—vió como su amiga tomaba todo y le dió miedo que lo fuera a dejar así, capaz entraba su mamá y no se creería lo de la prueba de maquillaje.

—Vamos.— le corrigió.—Te dije que hoy iríamos con Dahyun, pero para que no te quedaras solito ella llevará a su mejor amigo.—la chica le explicó sonriendo.

[...]

—Entonces me llamaste diciendo que era una emergencia, ¿sólo para avisarme que saldremos?—preguntó a su sonriente amiga.

—Exactamente.

—¿Con personas que ni idea de quién son?

—Así es.—volvió a afirmar sonriendo ampliamente.

—¿Qué dices, mamá?—decía con el celular en la mano, simulando tener en este momento una llamada—¿Quieres que vaya a limpiar la casa? Bien, ya que insis-

—Seungmin, tu celular está apagado, ¿recuerdas?—le quitó el dispositivo comprobando que estaba apagado.—Lo apagaste en cuanto llegaste para ahorrar batería.

—Pero no quiero salir.—dijo haciendo un puchero.—Me dijiste que era una emergencia, no esto.

—Piri ni qiiri silir.—lo imitó—.Te recuerdo que tu "emergencia" de hace un mes fue que no tenías qué ropa ponerte y querías que te ayudara a elegir.

—Pero...

—Pero nada, señorito, ahora mismo quitas ese mal humor y pones tu hermosa sonrisa de siempre.—Dahyun apretó los cachetes del otro.

—A veces me tratas como un bebé.—quitó las manos de la mayor de sus cachetes.

—Ah, ¿no lo eres?

—Que graciosa.

[...]

—No puede ser, llevamos diez minutos caminando y pasaste a todas las tiendas que hemos visto por aquí. Así que son diez minutos caminando, más quince en
cada tienda.

—Cálmate, que la que decidió salir fuiste tú, así que deja comprarme ese hermoso póster y ya es t-

—¡No! Chan, quedé de verme con ella hace una hora, ¿sabes qué pasará si no voy?

—Mmmh... no...

—Pues yo tampoco, pero no quiero saber, así que avanza.—tomó el brazo del menor y se lo llevó lo más rápido que pudo, y en menos de cinco minutos ya estaban llegando al lugar.

—¿Y si no van a venir?—preguntó Seungmin recargando su cabeza en la mesa.—Nosotros llegamos tarde, pero habían quedado de verse hace una hora. No, ya sé, capaz ella llegó temprano y como llegamos tarde se fueron, sí, creo que fue eso.