Una historia sobre la hija del director de un psiquiátrico y dos hombres, uno con sindrome maniaco y el otro enfermero.
Un hombre con complejo de adolescente irresponsable, un hombre con un humor muy alborotado, y una mujer enfocada en su vida labo...
—¡No pasé la entrevista! —se quejó Ki-do para seguidamente hacer una rabieta.
—Habrán más oportunidades. Esa no fue la única entrevista que harás en tu vida —tomo sus manos— relájate, lo harás mejor la próxima vez, no hay afán.
—Está bien —respondió automáticamente, mirándola casi que sin parpadear.
—Lo entendiste rápido —soltó sus manos al finalizar la oración.
Ella miró al interior de su empresa por el cristal, varios de los empleados los estaban mirando, en especial la pareja de recepción que estaban al frente.
Volteó a ver a Ki-do cuando lo escuchó murmurar algo, sólo que no le entendió.
—¿Qué dijiste?
—¿Quién? ¿yo?
—Obvio.
—No dije nada interesante.
—Hmm ¿bueno? —su teléfono sonó— ya debo volver.
—¿Qué harás ahora?
—Debo firmar unos papeles y evaluar a los nuevos.
—Ya veo. Nos vemos después —hizo una corta reverencia mientras sonreía.
—Nos vemos —repitió el gesto y se dirigió a la puerta giratoria para entrar, pero se detuvo al oír a Ki-do.
—No quería que me soltaras la mano —lo dijo en un tono bajo, se le medio entendió.
—¿Qué? —volteó a verlo con curiosidad.
—¡Qué ya no quería soltarte la mano! —sus mejillas enrojecieron al exclamar.
A ella se le formó una pequeña sonrisa en los labios:—Hasta luego, Ki-do.
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"—¿Podría decirme cual es el tipo de Eun-bi? —preguntó tímidamente Cha-yong al mayor.
—Yo no me meto mucho en eso, pero físicamente solo tiene que ser alto. Le importan más los sentimientos, alguien divertido, fiel y no egocéntrico porque ella ocupa ese papel.
A Cha-yong se le borró la pequeña sonrisita que tenía.
Él no era así.
—¿Está seguro que ese es su tipo?
—Todos sus ex novios han sido así, pero ella ya lleva un largo tiempo sin tener pareja.
—¿Puedo saber porqué?
—Su último novio la engañó antes de que se fuera al extranjero, desde ahí ella se mantiene diciendo que las relaciones amorosas no sirven para nada y que es más económico no tener pareja, y tiene razón —se rió un poco.
