Tu eres mi verdadero amor

XXXIV

- Bien es hora de abrir regalos - dije, serían casi las once de la noche. Los gemelos habrían dormido bastante así que era probable que estuvieran despiertos toda la noche -. ¿Quién quiere iniciar?

- ¡Yo! - grito Lila, todos la miramos sorprendidos -. Perdón se me salió.

- Dale comienza - dijo Nat, dejando a Billy en su cuna, Tommy nos esta viendo desde el corral, toma un regalo y se acerca a mí.

- Gracias preciosa - le di un abrazo y destruí en lo que venía en vuelto.

- Pensé que te gustaría - mis ojos se cristalizaron, me tape la cara.

- Te dije que no le gustaría.

- Claro que me gusta - dije, mire de nuevo el regalo -. ¡El maquillaje Lila Barton!

- Ay pues perdón... Pero, ¿Si te gusto?

- Claro - me limpie las lagrimas, solté una risa -, el primer regalo y ya estoy llorando.

- ¡Tomalá! ¡Te dije que le gustaría! - señaló a Clint y saltó de alegría.

- ¿Ya viste la parte de atrás? - preguntó Laura, voltee el saco y vi lo que decía.

- Maximoff little sis - me entraron más ganas de llorar, me levanté y abrace a Lila -. Gracias...

- Quería que recordaras de donde vienes - señalo a mi alrededor -, y para donde vas...

- ¿Desde cuando eres tan filosofa? - dijo Nat graciosa, me coloqué el saco. Al frente estaban unas siluetas de mi hermano y yo, navidad es una de las festividades más difíciles para mí porque siempre pasábamos juntos navidades y aunque se que ya han pasado ocho años siempre duele -. Bueno, es mi turno...

- ¿Para mí? - Clint parecía sorprendido cuando Nat le entregó el regalo. Nat volvió a sentarse a mi lado -. Es super grande...

- Dijiste que te gustaría, le pedí a don inteligente que lo diseñara - dijo Nat, Clint saco un arco. Parecia bastante emocionado, empezó a describir el arco y yo no entendía mucho la verdad.

- Muchas gracias Nat - se dieron un abrazo y se sonrieron un segundo.

Unos cuarenta minutos les toco a los gemelos los regalos. Claramente no entendían nada pero pues lo difrutaron.

- Dile gracias Lila - dije con Tommy en mis piernas. Escuchamos un balbuceo, le ayude a Tommy a destapar el regalo -. Mira amor.

Tommy de inmediato abrazo el peluche, y me dedico una mirada. Note un brillo en sus ojos que no habia visto, era un osito de peluche con un corazón en la pansa.

- Dile gracias Lila - dije Tommy me miro y me dedico una sonrisa.

- Ahora va el de Billy - dijo Lila, se lo entregó y era un gato de peluche. Billy soltó una carcajada.

- Gracias Lila - dijo Nat, le dedico una sonrisa y Lila asintió.

Siento la una de la madrugada, Nathaniel, los gemelos y Lila ya estaban durmiendo.

- ¿Nos divertimos? - dijo Nat sacando las botellas de licor.

- Si a todo - dijo Clint, levantando los brazos.

- Wanda si tu le das yo le doy - dijo Laura, lo pensé un segundo y asentí.

Empezamos con poco, y una se volvieron tres, las tres se volvieron diez, y así sucesivamente hasta que en la mañana cuando el sol salió. Estaba desnuda en el sofá, Nat también tirada en el suelo, mi cabeza dolia, mi estomago estaba revuelto. Busque mi ropa en el suelo, me la coloque y me encamine a subir las escaleras. Camine hacia la habitación principal donde estaban Laura y Clint acurrucados, y por lo que los rodeaba claramente se habrían divertido bastante. Cerre la puerta sin hacer ningún ruido, después me encamine a la habitación de los gemelos, entre y revise a los bebés. Los dos dormian con su peluche que la noche anterior les abría regalado Lila.