SYWLG | En donde Mar, ignorando completamente las reglas del viaje en el tiempo, decide investigar sobre su futuro.
Fanfic de Casi Ángeles
OBVIAMENTE Los personajes y la historia original no me pertenecen, son propiedad de Cris Morena. Hago esta ob...
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1 DE JULIO DEL 2030
DESPUÉS DEL VIDEO Y DE ENTERARSE QUE TENÍA OTRO HIJO, el cual iba a morir para convertirse en guardián de Eudamon, Mar había estado muy ocupada. Aún cuando habían transcurridos días desde que vieron ese maldito video, todos estaban tan nerviosos e irritables como si lo vieran a cada rato. Por lo tanto, Mar pasaba sus días entre clases, las peleas de sus amigos, ignorando a Camilo y Thiago, quienes parecían haberse puesto de acuerdo para prestarle atención justo cuando no la quería; y deseando que el Thiago adulto diera alguna señal de vida.
Su paciencia se estaba agotando con esa situación. Al principio lo había entendido, no se enojó con él ni fue a buscarlo para recriminarle (aunque en teoría no podría hacerlo porque no eran nada), pero después de enterarse de que él le oculto la verdad sobre su hijo y que encima le pidió a Mora que no digiera nada, las ganas de gritarle no faltaban.
Pero no iba hacerlo. En realidad, no podía hacerlo. No sabía manejar para ir a la estancia Bedoya Agüero; solo tenía Mandalays, que aunque eran muy efectivos en el campus dudaba que pudieran pagarle un pasaje de colectivo hasta allá y Thiago no le contestaba las llamadas ni mensajes.
Lo único que podía hacer era sentarse a esperar.
O ir hablar con Esperanza.
Mar no se iba hacer la víctima o la ocupada, la verdadera razón por la que no fue a hablar con Hope desde que le grito por no decirle la verdad de Bruno, era porque estaba enojada con ella. Un enojo temporal, claro. Y ahora que estaba más tranquila, notaba como Hope necesitaba hablar con alguien. Su sobrina podía fingir que estaba bien, pero Mar se daba cuenta que eso no era así y se sentía muy culpable por no estar para ella.
Esperanza estaba pasando por un momento muy difícil, su hermana podía estar a punto de morir y nadie se detuvo ni un solo segundo para consolarla.
Por eso, aprovechando que ese día no tenía clases a la mañana y que no había nadie en el spa, Mar preparo una bandeja con comida y se dirigió a donde estaba su bolida favorita.
—Traje comida y muchas ganas de hablar, ¿hacemos las paces? —dijo Mar, alzando un poco la bandeja que sostenía con sus dos manos, cuando Hope abrió la puerta.
Esperanza dudo durante unos minutos dejarla entrar pero al ver a Mar temblaba de frío, suspiro cansadamente y decidió dejarla pasar.
Mar le sonrió agradecida, antes de entrar y dejar la bandeja en la primera mesa que encontró vacía.
— ¿Qué te hizo querer hablarme? —preguntó Hope, cruzándose de brazos.
—El darme cuenta lo bolida que soy—Mar se dio la vuelta y miro a Hope. —Nos tenemos la una a la otra, podemos hablar de cualquier cosa y aún así, te estoy ignorando por algo que no fue tu decisión. —Mar jugo nerviosa con sus manos. —Lo que quiero decir es: perdón por cómo te trate y por no venir hablar antes con vos.
