No haré nada sin tu permiso, Yae...— susurro Sara, a milímetros de los labios de la nombrada.
...—.
Yae no respondió y Sara soltó su agarre, alejando su rostro, pero en un movimiento sorpresivo, la pelirrosa beso con necesidad y euforia los labios de la general, buscando profundizar el beso y el contacto entre sus cuerpos; Sara por su lado le correspondió y volvió a aprisionarla contra la pared, comenzando a mover su pierna; delineando con sus manos las curvas de Yae.
Se mantuvieron un par de minutos más así, explorandose con las manos mientras Sara sentía como su pierna se mojaba cada vez más por la excitación que le producía a la pelirrosa y está no dejaba de moverse encima de ella, suspirando y soltando pequeños gemidos de placer.
Yae...— se detuvo y se alejo un poco— no habrá vuelta atrás, estás segura?
Tsk! Esperas que te ruegue? Te aprovechas de la situación y mí estado para humillarme?— cuestionó con molestia.
Esto no sucede todos los días, ahora dime. Que quieres que haga?— agarrando sus muslos y ejerciendo presión contra su pierna.
Aahaa!!~~~— gimiendo y tomando el rostro de su captora— Sí es esto lo que quieres, te lo diré. Cógeme... Cógeme duro y fuerte, sácame los gemidos que desees pero ya deja de torturarme con esto— solicitó entre jadeos.
No esperaba menos de la gran Yae Miko, tus deseos son ordenes— alzandola entre sus brazos y recostando la en suelo.
En el sitio, Sara comenzó a besarla, mientras que desvestía la parte superior de su chica, al lograr su cometido; agarró las muñecas de está y las estampó sobre su cabeza, alejándose de su boca para contemplar la vista que le ofrecía el voluptuoso cuerpo que tenía enfrente.
No por nada hablan de tu cuerpo entre las Mikos y mis soldados, eres perfecta...
Años de entrenamiento y mantención, no esperes menos— sonrió orgullosa.
Je~ Tan vanidosa cómo siempre, me gusta...— acercándose nuevamente.
Sara comenzó con pequeños besos en su boca que poco a poco fueron descendiendo por su cuello, llegando a sus pechos, dónde se entretuvo con ellos, apretando y chupando sus duros pezones.
Los gemidos y suspiros casi se escuchaban; la pelinegra no soportaba la idea de que su nueva presa se contuviera y en un ataque sorpresivo mordió firmemente su pezón izquierdo, sacándole un gemido fuerte y logrando que se mojará aún más.
Uuungh!?!~~ No eres mala en esto...— comentó con voz entrecortada.
Ni te imaginas de lo que soy capaz— sonrió con lujuria y orgullo— que te parece si pasamos al plato principal?—
Veamos que puedes hacer con esa boca insolente, Kujou Sara— sonriéndole con picardía.
No quiero ver tus manos allá abajo o te castigaré, queda claro?— susurrándole al oído, mientras acariciaba suavemente con su mano la entrepierna de la Kitsune.
Uugh!?! Aahh!!~~— bramó un quejido de placer al tacto— lo que tú digas...
Sara se mantuvo encima de ella con su rostro escondido entre su cuello, mientras que con una de sus manos dibujaba el contorno de sus labios mayores y juguaba con su ingle con pequeños toques y caricias suaves; con la otra se divertía con sus pechos, la menor no paró de suspirarle pesadamente en el oído a la Kitsune y de vez en cuando le soltaba un gemido para prenderla aún más.
El ambiente se encontraba caluroso y Yae ya no era capaz de aguantar su calentura, haciendo caso omiso a la petición anterior e intentando tocarse su clítoris, siendo detenida en el momento e inmovilizada.
Mmnhh~~— soltó un quejido por el agarre en sus brazos.
Creo haber sido clara y aún así no me han hecho caso... Debería castigarte— mirándola seriamente y sonriendo con satisfacción.
... Sólo estás jugando conmigo!?! Uughh!!!— tratando de soltarse del agarre, sin exito— suéltame!!!
No te pongas así cariño, te pregunté si querías continuar y así lo decidiste— tomando una de las piernas de Yae y montando la en su hombro— No quiero berrinches.
No lo tendrás, porque esto se acaba aqu!!! Aahhh!!!..*jadeo*— la kitsune no alcanzo a terminar cuando sintió como su vulva era lamida con hambre, dejándola sin habla y solo pudiendo gemir en respuesta.
Sara se dedicó a estimularla, lamiendo y chupando todo su centro, y prestándole especial atención a su hinchado y erecto clítoris que no para de palmitar y generarle espasmos de placer a su dueña con cada lamida que se le propinaba; dentro del acto, la tengu tomó la otra pierna de la chica y la monto en su hombro, doblando la para que viera personalmente como era cogida.
Los jugos chorreaban a montones y Yae cada vez gemía más y más fuerte, apretando sus manos contra el suelo y contrayendo sus piernas contra la cabeza de Sara cada vez más fuerte, estaba a punto de llegar al clímax y eso la pelinegra lo sabía, por lo que se centro en el clítoris, serpenteando con su lengua sobre él y jugando con los pezones de está última; casi al final Sara presionó la punta del clítoris contra sus dientes y en un gemido agudo, Yae dobló su espalda y apretó aún más a Sara, chorreandose en su rostro.
Aaahhgg~ Aahh... Mmmm~~...— Pareciera que Yae intentaba hablar, pero le era imposible.
Quién te ha dicho que esto terminó?— cuestionó con autoridad.
Qu?!??— Yae fue alzada nuevamente y estampada contra un mueve dónde salvajemente fue penetrada por 2 de los dedos de Sara, sacándole gemidos y manchando el lugar con sus jugos; la susodicha comenzó a estimularla salvajemente mientras que con su pelvis figuraba follarla, cual perro en celo; sus dedos se movían en un entrada y salida al compás de sus embestidas, Yae aún no sé recuperaba de lo anterior y solo podía gemir y llorar de placer, mientras abrazaba con fuerza a la guerrera y le propinaba algunos arañazos en su espalda.
Sara continúo con su juego logrando que Yae se viniera otra vez y en esta ocasión más fuerte que antes, sacándole una sonrisa al lograr su cometido; se mantuvo dentro de ella con movimiento lentos y danzantes, a la vez que buscaba con deseo los labios de la mujer, besándola apasionadamente.
E- eso... Eso fue extremadamente placentero— comentaba entre besos.
Te tengo aún el postre— comento con una sonrisa.
Oohhh... Ju, ju~ quisiera servirme una porción doble si es posible— devolviéndole la sonrisa.
Sara bajó a Yae del mueble y la recostó sobre ella, dejando el centro de la chica en su rostro, comenzando a lamerla nuevamente con calma; haciéndola suspirar entrecortado mientras volvía a mojarse. La excitación volvió al cuerpo de Yae y al verse en una posición benéfica para ambas, no tardó en hacerse espacio entre la ropa de la tengu y darle sexo oral a ella también, sacándole un gemido a está última y deteniendo la en su labor.
O- oye...— intentó hablar.
Veo que estás casi igual que yo, veamos quién hace venir a quién ahora, General Kujou— guardando silencio y comiéndose la vulva húmeda de la pelinegra.
La kitsune no se fue con rodeos e introdujo 2 de sus dedos en el interior de Sara, mientras que con su boca se centraba únicamente en el clítoris de la chica; robándole gemidos y suspiros de placer, haciéndole aún más difícil la misión improvisada de hacer que se viniera antes que ella. Con dificultad, la pelinegra volvió al ring y comenzaron una batalla oral entre ambas.
Cada una dedicó su atención a dónde creían iba a darle la victoria y en esta ocasión, Sara se aprovechó y manoseó uno de los pechos, propinandole unos pellizcos a su pezón, mientras que sus dedos penetraban salvajemente el interior de Yae, haciendo que está dejará de lamer y se viniera de placer, apretando los muslos de la menor y mojando mucho más el rostro de esta; otorgándole la victoria a Sara.
Ni creas que por haberme ganado esto quedará así, Gnral. Kujou!!— bramó con dificultad y clavando su boca en la vulva de la pelinegra.
Y- Yae, espe~ nnmhh~~ aagghh...— Sara no podía parar de gemir al sentir como su interior era sacudido con fuerza y sin delicadeza mientras que su erecto clítoris recibía movimientos enérgicos de la lengua de la Kitsune, en menos de lo creído la tengu no pudo aguantar más y terminó corriendose exageradamente en la cara de la mayor, sintiendo como sus piernas tiritaban y jadeaba con dificultad.
No esperaba que te corrieras tan rapido— comento con burla.
Nngghhh... Haaa... No suelo tener experiencias como estas, casi siempre soy yo la que hace todo el trabajo, es la primera vez que alguien me toca de esa forma— se defendió con vergüenza.
Oohhh... Que interesante— sonrió para si misma.
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Temporada de celo.
Fanfiction¡¡¡¡Precaución!!!! (+18 explicit) Historia con sexo explícito, consensuado (a veces). Es Sara Kujou con Yae Miko, pasando por otras 2 chicas entremedio. Yuri hard o lésbico, cómo le conozcan. Sino te gusta pasa de la historia y no reporten. Primera...