Angel es un chico que padece Transtorno Obsesivo Compulsivo de manera en la que no deja que nadie lo toque. Pero todo comienza a cambiar cuando conoce a Aki Hayakawa.
~Los demonios no existen en este fanfic.
~Angel es bailarin de pole dance.
~Conte...
Angel era un chico con una severa condición. El tenía Trastorno Obsesivo Compulsivo. Detestaba la suciedad, el desorden y el contacto. Vivía usando guantes de látex transparentes, los cuales se cambiaba por un par nuevo al limpiar o tocar algo y solo se los quitaba en su casa. Era un chico solitario debido a que al ser mañoso y estricto con su forma de vivir la gente se alejaba. Jamás recibió un apretón de manos o un abrazo, se le hacía repugnante la idea de tocar a la gente. ¿Cómo podría saber si el otro estaba completamente limpio?
Fue así desde aquellos días de su niñez. Un día se enojó con sus padres y se fue de casa para nunca más volver. Solo tenía 15 años en ese entonces y antes de darse cuenta, a sus 17 años se enteró que ellos habían fallecido en un accidente automovilístico, aunque eso nunca le importó ni le afectó.
Ahora tenía 23 años y vivía en un departamento excesivamente ordenado y limpio bastante alejado del centro de su ciudad. Prefería estar así. Trabajaba en un bar. El era bailarín de pole dance. Al irse de casa a sus quince no tuvo de otra más que trabajar de lo que pudiera, juntar dinero y pagarse clases de aquella erótica danza. No es como si en aquel entonces el quisiese dedicar su vida a eso, fue la necesidad.
Se encontraba en el vestuario del bar, vestido con un traje pegado al cuerpo de color negro con detalles plateados. Su cabello rojizo y largo suelto hasta un poco más abajo de los hombros adornado con unas dos trenzas finitas con brillos. Sus ojos color rubí delineados en negro con más brillos debajo de ellos. Sus labios pintados color rojo carmín con un efecto brillo labial. Unos zapatos ballerina negros para estar cómodo y a la vez no tocar el suelo. Y por último, unos cuántos anillos y collares adornando su delicado cuerpo. Parecía todo un Ángel.
(Imágen para que se den una idea. La falda es más corta en esta historia si😈)
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Angel, es hora de ir- Dijo Himeno, la asistente de Angel. Era una chica de unos 25 años de cabello negro corto y llevaba un parche en su ojo, lo había perdido en un accidente.
Angel asintió cambiándose de guantes y tomando una botella de alcohol con un paño para salir de aquel lugar. Al llegar a la barra, empapó el paño en alcohol y comenzó a pasarlo por aquel tubo en el que bailaría para así desinfectarlo mientras el público mayormente masculino le silbaba, aplaudía y gritaba cosas. Dejó de lado el alcohol y el paño al escuchar la música para comenzar su coreografía.
