No había salido de mi casa más que para lo que me pedía mi madre y para la escuela, y sinceramente creo que estaba peor que antes.
-Doc. Creo que lo de quedarme en casa no es de mucha ayuda.
La verdad es que no tenía unos malos padres, me daban de comer, techo, recamara propia y si lo necesitaba me ayudaban con lo que les pidiera. El problema era que en casa no me sentía muy querida.
-Cuéntame, ¿Qué fue lo que pasó?
Siempre trataba de no pedir ayuda porque si lo hacía me hacían sentir como una inútil, me miraban mal o se la pasaban enojados todo el día. Si mis hermanos hacían algo mal, yo lo tenía que arreglar antes de que se dieran cuenta y por si no fuera suficiente, tenía las responsabilidades de la escuela, si no llegaba a casa con calificaciones perfectas todo era peor; no me pegan ni nada parecido, pero ese sentimiento de ser una buena para nada sigue ahí, y por cada día que pasa incrementa.
-Se me pasó decirle a mi hermano menor que lavara su plato y mamá estuvo de mal humor el resto del día.
- ¿Te hizo daño?
-¡No! Claro que no, ella es incapaz de hacer eso.
-Pero...
-Ya sabes, anduvo de malas y eso me arruinó el día. No entiendo cómo hace para que su mal humor se esparza por toda la casa y luego tengo que consolar a mis hermanos porque dicen que eso los pone "tristes".
-Eso es porque eres altamente empática.
- ¿Y eso cómo se quita?
-Me temo que no te puedo dar esa información.
- ¿Por?
-No creo que sea bueno en estos momentos.
Suspiré, me levanté y fui a la puerta.
- ¿Te vas tan pronto?
-Sí, no quiero que mamá se preocupe, no le dije que vendría.
-Pensé que no se lo decías a nadie.
-No, pero ahora que no he salido de casa creo que tal vez lo note.
-Cuídate.
-Eso intento.
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Psicología asesina
Short StoryA veces la policía no puede hacer su trabajo solos y tienen la necesidad de pedir ayuda a externos. Dylan es un simple estudiante al que le pidieron apoyo ya que ellos no lograban que una chica hablara, pero no sabía que iban a haber consecuencias a...