Cold

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-¡Stevieeee!- Le empezó a gritar Bucky a su novio para que se fuera a acostar a su lado.

Uno de los muchos problemas de vivir en la torre era el frío que hacía y eso a Bucky lo incomoda mucho. Con el suero uno de sus efectos secundarios son las bajas temperaturas corporales que tiene por el invierno y es todavía más incómodo al recordar las noches frías en las bases de Hydra.

Bucky estaba en el sillón de la sala envuelto como un burrito temblando por el frío. Steve le dijo que iba a ir por algo rápido pero ya llevaba más de diez minutos alejado de Bucky. Lo que para él es mucho tiempo.

-Ya mi amor ya estoy aquí...- Dijo Steve acercándose para hacerle cariños en la cabeza. Bucky estaba helado.

-Tengo frío.- Dijo el castaño y una lágrima empezó a correr por su rostro. Steve recorrió su mano para limpiársela y lo cargó para llevarlo a la habitación.

En todo el camino que era un poco largo Bucky escondido su cabeza en el cuello de su novio y podía sentir el latido de su corazón, ese sonido que le daba paz, ese sonido que al escucharlo se quedo aferrado a él y entendía que era su nuevo hogar.

Steve lo dejo en la cama con un calentador prendido con la temperatura más alta y colchones para calentarle los pies y la cabeza, en general todo lo necesario para a que Bucky pudiera estar calientito. Le preparo también un agua caliente y una película.

-Venté.- Dijo Bucky y empezó a hacerle espacio a Steve entre todas las cobijas.

-¿Quieres hablar mi vida?- Hubo un silencio por un momento, aunque ningún sonido era necesario para llenar el lugar, con su presencia ya se sentía el amor y claramente el calor.

-Yo quería chocolate caliente.- Steve lo volteó a ver un poco ofendido y Bucky soltó una risita.

-No podemos tener todo lo que queremos en este vida.-

-Por lo menos te tengo a ti... gracias.- Steve se acercó a su Buck y lo lleno de besos. Su barba le picaba un poco pero no le importo a Bucky.

Toda la tarde se quedaron acostados en la cama, viendo películas, escuchando música y besándose para demostrar su amor. Se metieron a bañar y fue sorprendente el poco tiempo que se tardaron, normalmente se tardan 20 minutos al estar juntos en la regadera, de todos modos el agua la paga Tony entonces no hay ningún problema.

-Steve...-

-¿Si mi amor?-

-¿Puedo mi chocolate?-

-No ya es muy tarde y te me alteras.- Sus miradas se encontraron y se sonrieron por un rato. -Ya duérmete.- Le dijo Steve a Bucky tapándole los ojos con su mano, Bucky no paraba de reír y eso le daba menso sueño a Steve, la risa de Bucky era como una fuente de energía. -¡Ya duérmete!- las risas siguieron hasta que se quedaron dormidos.

𝙸 𝚗𝚎𝚎𝚍 𝚢𝚘𝚞, 𝚒𝚍𝚒𝚘𝚝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora