Connie Spencer (+18) [3]✔️

Capítulo 18

Connie.

Matt agarro a James de los brazos, cuando aún estaba medio despertando y lo jalo hacia arriba.

—¿Que...?—dijo el, medio borracho.

—Callate idiota. Por cada palabra que digas va un golpe en la cara ¿Entiendes? — Matt le gruño—vamos a darte una ducha fría.

Lo jalo en dirección a las escaleras y de ahí ya no supimos que paso, solo se escucho la ducha y los sonidos de que efectivamente el agua estaba bien fría y no podía decir palabra porque no quería recibir un golpe en la cara.

Max dijo que no quería que yo tuviera que contar la historia de nuevo y por eso le dijo a sus papás y el mío lo que había pasado para que no me atacaran con preguntas al llegar.

Y unos momentos después mis tres padres aparecieron por la puerta y de inmediato David se acercó y me tomó de las mejillas, me apoye en sus brazos y de inmediato sentí que me rompería en mil pedazos.

—Nena— pronunció y pude percibir el dolor y la frustracion en su voz — no voy a decirte lo que abría hecho, porque el pasado no se puede cambiar y el hecho de que todos tuviéramos una idea muy diferente de el tampoco— asentí con la cabeza — pero si te puedo decir lo que voy a hacer ahora.—deje caer la cabeza, pero el la levantó— mirame, Connie. Lo voy a hundir en prisión. Voy a hacer que pague de todas las formas posibles lo que hizo. No voy a permitir que salga ileso de esto — David me dio un beso suave en la frente—lo prometo.

Yo suspiré sintiendo una lagrima cayendo por mi mejilla mientras todo lo demás se arreglaba a mi alrededor, porque yo sabía que en mi familia tampoco hacían promesas que no pudieran cumplir...

David me soltó y me dio una pequeña sonrisa.

—¿Tu mamá?

—Arriba.

David salió corriendo escaleras arriba y en ese momento Bet se acercó a mí. Me abrazo fuerte a su cuerpo y no dijo palabra. No hizo falta. Con solo que llorara tan fuerte y me abrazara de esa forma pude sentir todo lo que sentía. Entendí lo que quería decir, lo que sentía y al llorar y desahogarnos de esa forma me sentí en completa armonía con mi situación y con ella...

—Disculpa... — dijo tragando mocos— lo siento hermanita. Dame un segundo.

Asentí con la cabeza, sonriendo y mi hermana desapareció en la cocina.

Y llegó el momento más doloroso. Mi padre estaba a un metro de mi, mirandome con las lágrimas cayendo por sus mejillas y yo no sabía si moverme hacia el, huir, llorar o reír de felicidad por que el al fin lo supiera.

—Pa...

—Dame un abrazo... — me dijo— ven aquí mi niña.

Me aferre a él con fuerza. Abrazandolo por la cintura. Mi papá lloro, de rabia, de impotencia y yo lo hice por las razones alversas. Felicidad y consuelo.

—Mi vida no se cuando falle... — empezó a decir entre llantos— no supe cuando dejaste de confiar en mi, cuando me convertí en un bastardo y no logré que me dejaras ayudarte...

—Estaba asustada— le dije—no quería decepcionarte... Mamá jamas me apoyo y pensé que...

—Jamas, Connie— me abrazo fuerte— yo jamas habría permitido esto y tu madre también va a pagar por esto—me alejo y empezó a limpiar las lágrimas de mis mejillas— yo pensé que todo estaba bien, que nos amábamos y que eramos felices, pero todo está roto y me importa una mierda. Yo no soy hombre antes de ser padre. Me importan una mierda sus estúpidas razones. Ambos van a pagar por todo esto...