Corazón y alma

Capítulo 65

Pasaron varios momentos antes de que Fleur pudiera atrapar a Hermione, justo en la base de las escaleras que conducían a la torre de Gryffindor.

"¿Qué te pasa, Hermione?" preguntó, mientras extendía la mano para agarrar el codo de Hermione.

La chica más joven se giró y miró a Fleur, con emoción en sus ojos. Pero pasaron varios momentos de respiraciones entrecortadas antes de que pudiera recuperar el aliento lo suficiente como para soltar: "¡Creo que sé cómo podemos ayudar a Harry!"

"Creo que mencionaste eso", dijo Fleur con algo de paciencia. "¿Qué quieres decir?"

"No hay tiempo", dijo Hermione por encima del hombro mientras comenzaba a alejarse de nuevo. "Busquemos a Harry; luego podemos encontrar un salón de clases vacío y te diré cuál es mi idea".

Claramente era una situación en la que Hermione no se movería, tan decidida estaba a encontrar a Harry y compartir su idea con él. Suspirando, Fleur corrió para alcanzar a su amiga y luego se colocó a su lado, igualando su ritmo rápido. Fleur tenía un sano respeto por la inteligencia y las habilidades de Hermione, pero se preguntaba qué había descubierto la otra chica, o qué creía haber descubierto. El conocimiento de libros de Hermione era insuperable, pero no era precisamente innovadora en sus patrones de pensamiento: absorbía más lo que aprendía como una esponja que tomaba el conocimiento que había adquirido y lo mejoraba.

También estaba entusiasmada cuando se trataba de su conocimiento y la oportunidad de aprender más, y era muy curiosa. Por lo general, tampoco era propensa a exagerar demasiado, lo que llevó a Fleur a creer que si Hermione pensaba que había descubierto algo, era probable que realmente lo hubiera hecho. La idea de encontrar una solución al problema del horrocrux de Harry también provocó en Fleur un nivel no pequeño de emoción, pero lo moderó, sabiendo que aún no sabía nada de la idea de Hermione, y no quería sentirse demasiado decepcionada si no funcionaba.

"Sabes, es bastante irónico", dijo Hermione mientras se apresuraban a subir las escaleras. "Si mi idea funciona, es debido a esos imbéciles mini-Death Muncher y su incapacidad para mantener sus estúpidas bocas cerradas".

Fleur miró con curiosidad a su amiga. "¿Qué quieres decir?"

"Te lo diré en un minuto", respondió Hermione mientras se apresuraba hacia el retrato y daba la contraseña. "Quiero que Harry lo escuche también."

Entraron en la sala común y notaron que estaba más ocupada de lo que había estado quince minutos antes, cuando Fleur se había ido. Estaba más cerca del toque de queda, por lo que no fue una sorpresa. Una rápida mirada alrededor de la habitación les mostró que Harry no estaba allí.

"Dijo que quería dar un paseo y pensar en las cosas", dijo Fleur, mientras Hermione escaneaba la habitación en busca de su amiga.

"Tal vez todavía está en el dormitorio", respondió Hermione.

Se volvió hacia Ron, que estaba sentado en uno de los sofás cerca de la chimenea, y le ordenó: "¡Ron! Ve a tus dormitorios y mira si Harry todavía está allí".

Aunque Ron se sorprendió, obedeció de inmediato, se puso de pie de un salto y subió corriendo las escaleras. Solo se había ido un momento cuando los gemelos se acercaron a ellos.

"¿Estás buscando a Harry?" preguntó uno.

Ante su asentimiento afirmativo, el otro dijo: "Se fue hace más de diez minutos".

En ese momento, Ron regresó a la sala común. "Él no está allí".

Mirando a escondidas alrededor de la sala común, Hermione se inclinó hacia adelante y en voz baja dijo: "Creo que podría haber descubierto una solución al... umm... problema de Harry".