✪ᴄʀʏ ғᴏʀ ᴍᴇ✪ (MattTom)

⋆❔⋆W-What? ٭❔⋆

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★Tom, tuvo un largo y agotador día en la ciudad de Londres.

★El británico menor, llegó a casa, algo cansado del insoportable ruido del exterior. Dejó sus pertenencias en el sofá, simplemente sosteniendo su teléfono en manos.

★Subió las escaleras. Sintiendo así, algo de pesadez en su lento caminar. Lo único que quería, era ir a su habitación, y al fin descansar.

★Pasó lentamente por los desolados pasillos, acariciando la pintura de las paredes. Notó las luces apagadas, dándole una extraña sensación de preocupación. Afirmó el agarre en su celular, para posteriormente encender la linterna de este. Y al apuntar al frente, se encontró con terrible escena.

─¿¡Pero qué carajos Matt!? ─ gritó eufórico el menor, captando la atención de aquellos besándose.

─T-Tom! Oh mierda..─ Soltó rápidamente a Edd. Para mirar a su novio. ─Tommie.. E-Esto no es lo qu- ─ no terminó de hablar, puesto a que el menor, rompió a llorar terriblemente.

─¡Cierra la Boca! ¡Está más  que claro lo que estaban haciendo!...─ Su voz, se tornarnaba quebradiza, dejando un total ambiente de angustia y desesperación. Se notaba, que al ver semejante escena, lo dejó fatal.

─¡Tom! Por favor.. D-Deja que te explique.. ─ se acercaba a paso lento hacía el menor, con un gran nudo en la garganta, que casi no lo dejaba hablar.

—¡No quiero oír nada! ¡Y-ya sé que eso sólo será un torpe intento de convencerme de que no estaban por cojer!.. ─ atinaba a tapar torpemente su rostro, tratando de parecer fuerte, cuando claramente su corazón se caía a pedazos.

★Nunca se lo había visto venir. Menos de su mejor amigo. Se sentía devastado. ¿Como podían hacerle esto?, si ambos estaban concientes de la relación que mantenía el con el Narcisista. ¿Por qué mierda Edd hizo eso? .

★No aguantó más. Salió corriendo a su habitación, y se encerró en ella, por más que el castaño y el pelinaranja le gritaban que se detuviera.

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★Los minutos pasaban, la almohada de Thomas, se humedece con sus lágrimas.

★Los golpes en la puerta de su recámara no cesaban, ni las voces de su amigo y pareja, suplicando a gritos que saliera. Todo se tornaba más oscuro de lo normal, a pesar de que la luz de la Luna, atravesara la ventana, iluminando la habitación.

★Dudó un poco, pero se decidió a llamar a Tord. Por más que no se llevarán tan bien, ellos mantenían una amistad sincera, y ambos sabían que podían confiar en el otro, pase lo que pase.

★Tomó nuevamente su teléfono, y marcó el número del noruego.

"¿Halo?". Resonó aquella voz, con ese característico acento noruego.

─H-Hola Tord... Te llamaba p-para saber si podrias venir antes a casa... ─ su voz volvía a quebrajearse, claramente, alarmando al cuernudo.

"¿Pasa algo?". Preguntó dudoso, notando los innumerables sollozos del de cuencas.

─S-Si... Pero necesito que vengas lo a-antes posible... ─ miraba nervioso a su puerta, notando la desesperación del ojiazul. ─Tord.. P-Por favor, ven a casa..─ suplicó, de una manera tan desgarradora, que le partió el alma a Larsson.

"....Voy en camino... Hagas lo que hagas, No te mates.. ". Dicho esto, cortó la llamada, dejando un poco más calmado al de azul.

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★A los pocos minutos, resonó en el primer piso, el ruido de la puerta siendo abierta, alarmando a los dos mayores que se encontraban detrás de la puerta del de cuencas, alejándose casi instantáneamente de la habitación.

★Tord, cerró rápidamente la puerta, para así, subir las escaleras, repitiendo casi a susurros, el nombre de el de azul. Al caminar por los estrechos pasillos, y toparse con la puerta del cuarto de quien buscaba, tocó algo desesperado, sin recibir respuesta alguna.

─Testigo, soy yo.. Tord. ─ se mantuvo en silencio, hasta oír al menor acercarse y abrir la puerta. Miró detenidamente las facciones del Testigo, dándole algo de pena al ver sus 'ojos' inchados de tanto llorar.

─T-Tord.. ─ lo llamó, alzando levemente su cabeza, para poder verlo a los ojos.

─¿Sí, Tom?.. ─ quedó mudo, al ver cómo el otro lo abrazaba, y lloraba desconsoladamente en su pecho. Correspondió aquel abrazo, acariciando su cabeza a forma de consuelo.

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★Ya habían pasado un par de horas, y el británico se quedó dormido en el pecho del mayor, ambos ya dentro de la habitación. Tord no se podía creer lo que había hecho Matt. Lo había llenado de furia, porque por su culpa, Su 'Querido Testigo de Jehová', había llorado toda la noche, por las atrocidades que cometió aquel Narcisista. De verdad que ahora, estaba furioso, seguro que al próximo día que lo vea... Le partiría la puta cara de un solo golpe, para que se le quite lo atrevido.

─N-No Tord... Concéntrate─ Susurró para sí mismo, procurando no despertar a su acompañante. Volvió a mirarlo, pero esta vez más detalladamente. Miró aquellas cuencas, que yacían cerradas, algo inchadas y rojas, supuso que era debido a todo el llanto, bajó su mirada, dirigiendola hasta los carnosos labios rosados del alcohólico, y pensó. ¿Matt de verdad había sido tan imbécil como para botar a la basura todos esos años de relación, los cariños, besos, y el tiempo de Tom? Sus dedos subieron, y se posaron acariciando los labios de aquel chico.

"Son suaves" . Pensó, e inmediatamente alejó sus dedos. "¿¡Qué carajos estoy haciendo!?" el noruego se sonrojó al instante. ¿Será que le gustaba Tom? Tal vez, pero aún no había forma para comprobarlo. Entró en un debate mental, que duró... Aproximadamente más de una hora, a su vez, dejándolo completamente exhausto; así que por fin, se dignó a dormir. Se acomodó en aquella estrecha cama, abrazando al menor, y cubriendo a ambos con las sábanas.

─Descansa Testigo.─ ya dicho ésto, depósito un beso en su frente, y cerró sus ojos, cayendo lentamente dormido.

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963 palabras.

(Editado)