Dime si a mi - Karlnap

𝑅𝑒𝒶𝓁𝒾𝒹𝒶𝒹

— Si pero es mejor con agua — Reprochaba Rodrigo mientras se cruzaba de brazos y hacia un puchero expresando su enojo

—¿Como mierda te va a gustar la oreo con agua?— Dijo Ivan mientras arrugaba su cara en señal de asco por lo que decía Rodri

Karl soltó una risita — Carre tienes gustos bien extraños, obviamente saben mejor con Mosnter

Ahora Ivan miraba de mala manera a su par de amigos subnormales que se gastaba por desgracia

El debate seguía antes de que un mensaje le cayera a Karl, este tomó su teléfono y echó y vistazo y tal como sospechaba era un mensaje de Sapnap

—Chicos, voy a comprar otro jugo— Anuncio Karl mientras se marchaba

—Hey Ivancito no has visto a Carlos muy raro últimamente — Dijo Carre mientras robaba del almuerzo de Spreen

— La verdad si, tal vez se haya conseguido una novia o algo — Dijo Spreen mientras miraba la puerta donde había salido su amigo segundos antes

Karl caminaba al lugar citado, como siempre atrás de las escaleras del campo de fútbol. Miro que nadie lo viese entrar y es que para su suerte esa zona se mantenía siempre vacía

Cuando llego ahí estaba él. Sapnap estaba recargado en la pared de brazos cruzados esperándolo, una sonrisa de oreja a oreja cruzó por los labios de Karl quien apenas lo divisó corrió a abrazarlo

Sapnap no era mucho del contacto físico, él lenguaje del amor de Karl era por medio de este tipo de contacto y para muchos hubiera sido sorprendente el echo de que Sapnap dejaba que Karl hiciese lo que quisiese e incluso a habido veces en donde intento corresponder

— Sappy ~

— Karl, nadie te miro llegar?

— Nop — Dijo Karl mientras miraba a Sapnap a los ojos y este llevó sus manos hacia su mejilla y la acarició lentamente, este tipo de contacto hacía que las mariposas en el estómago de Karl revolotearan

— Entonces cuéntame, como va tu día — Preguntó Sapnap y eso era algo que Karl amaba

Sapnap era muy atento con Karl, le preguntaba sobre su día, sobre las clases e incluso si había comido; algo realmente tierno

Karl sin más comenzó a platicarle a Sapnap todo, con el tiempo el miedo que logró tenerle desapareció por completo y es que ahora podían mantener una conversación con total naturalidad, en un ambiente que ambos apreciaban tanto

Los dos disfrutaban la presencia del otro, demasiado incluso a tal punto de pensar que ninguna persona del mundo jamás los comprendería tal como ellos lo hacían

Pasaron algunos minutos hablando antes de que el celular se Sapnap vibrara

Karl se quedó mirando atento y supo quien era cuando miro que Sapnap arrugaba la cara

— Es ella?

— Si, me tengo que ir

Ahí fue cuando Karl cayó en cuenta de la realidad y su dulce fantasía llegaba a su fin

Sapnap notó la mirada decaída y triste de Karl. Suspiró y se acercó a él para depositarle un suave beso en los labios

El corazón de Karl se detuvo al sentir el contacto de los labios de Sapnap sobre los suyos

— Nos vemos a la hora de salida e iremos a mi casa a pasar el rato ¿Te parece?

Karl asintió y sin mas miro como Sapnap se marchaba. Como siempre se tenia que quedar algunos minutos ahí antes de irse también para no levantar sospechas