Casado con mi mejor amigo- EunHae

Capítulo Seis Hyukjae

Sabía que me estaba pasando de la raya con todo el asunto de estar casados, usar los anillos, decírselo a otras personas y demás, pero es que me sentía... raro al respecto.

No "malo-raro", ni nada en contra de Donghae, solo... "bien-raro". Un poco como "Es-raro-pero-está-bien-raro".

Me estaba dando vueltas, y cuando no sabía cómo lidiar con algo o qué hacer con ello, generalmente me volvía un poco desagradable al respecto. Tenía suerte de que Donghae me hubiese aguantado durante tanto tiempo. Siempre había sido un amigo loco.

Después de la cena y el postre, volvimos a nuestra suite, nos pusimos pantalones cortos de dormir y nos acostamos en la cama, viendo programas de crímenes reales hasta que nos quedamos dormidos. Ambos éramos unos aficionados a toda esa mierda y siempre lo habíamos sido.

Ahora era de mañana. Podía sentir el sol calentando la habitación, un rayo de luz a través de la cama y... el cuerpo de Donghae debajo del mío. No bajo el mío, pero sí debajo de mí... él estaba de lado y yo me había acurrucado contra su espalda con mi polla acariciándole el trasero.

No era la primera vez que accidentalmente terminábamos abrazándonos. ¿Cómo no habríamos de hacerlo cuando habíamos pasado gran parte de nuestras vidas compartiendo una cama? Pero se sentía diferente con el peso del anillo de bodas en mi dedo.

En serio, si alguna vez nos casáramos de verdad, me aseguraría de que eligiéramos una representación mucho mejor que esta.

¿Si alguna vez nos casáramos de verdad? No se suponía que eso fuera una posibilidad. Y no se suponía que fuera algo que yo consideraría, porque yo era heterosexual y quería seguir soltero.

—Tu pene se está volviendo un poco amistoso con mi trasero allá atrás, fortachón —dijo Donghae, su voz ronca y soñolienta.

—Es una erección matutina, idiota. No tiene nada que ver contigo, y me gusta que me llames fortachón. ¿Es porque estás sintiendo mi paquete?

—¡Oh Dios mío! —Donghae gimió —. ¿Por qué soy amigo tuyo?

—Porque me amas. —Ambos nos pusimos rígidos ante mis palabras... más allá de mi polla, claro está.

Ninguno de nosotros debería haberse sorprendido. Definitivamente yo era el boquiabierto y con el pie insertado en nuestra relación, y Donghae me amaba y yo lo amaba a él.

Pero ahora que estábamos casados, y me había estado sintiendo extrañamente raro con Sungjaeass todo lo que podía pensar era en esa noche cuando Donghae me confesó que estaba enamorado de mí.

Lo había ignorado durante años, pensando que era solo había sido algo al azar, pero dada nuestra situación actual, decir que él me amaba se sentía como ir demasiado lejos.

—¿La polla de quién está presionada contra el culo de quién? —preguntó Donghae, rompiendo efectivamente la tensión.

—¡Que es una erección matutina! —dije de nuevo —. Estoy seguro de que estás en la misma situación. —Mis dedos se crisparon porque... um... ¿Quería sentir y ver si estaba en lo correcto?

Como si me hubiera electrocutado, me sacudí y rodé lejos.

Donghae suspiró. —En ese caso, voy a ir al baño.

—Donghae —le dije mientras se levantaba de la cama. Estaba molesto. Podía verlo, y lo había oído en la agudeza de su voz —. Donghae — lo llamé de nuevo.

Se giró antes de entrar al baño. —Tengo que orinar, Hyukjae. No es gran cosa.

Pero lo era. Herí sus sentimientos al alejarme de él, y eso no era algo que quisiera hacer. Odiaba sentir que lo había decepcionado de cualquier manera.