♾Infinity♾//Sung Jin-Woo [II]✔

Capitulo 22

Narra Tn

Tal vez no estaba en un sitio en el cual quisiera estar, pero aun asi, habiendo recuperado mis recuerdos y verdadero origen, podría ayudar desde esta parte, atrapada pero sin rendirme. No dejaría a Jin-Woo hacer esto solo.

[EL CODIGO DE EXTINCION SE HA INTRODUCIDO EN EL SISTEMA DE CRECIMIENTO DEL JUGADOR]

[El sistema va a ser borrado]

[Se levantaran todas las restricciones de potencia en el Jugador]

Comencé mandando las señales y notificaciones adecuadas, le daría todo a mi alcance, lo supe, cuando murió y Ashborn se comunico con el. Significaría tal vez que ya no existiría nunca mas, no volvería y seria borrada, pero pondría de mi parte como siempre lo hice.

[Después de la elevación de las restricciones de poder del jugador, todos los soldados de sombra de nivel de comandante obtendrán sus poderes originales]

Usaba la computadora, tecleaba y ponía las claves y quitaba las restricciones una por una, devolviendo todo el poder a los soldados que aparecían, como un hacker desde un lugar distante. Una matrix controlando.

[El actual monarca de las sombras Ashborn ha regresado al mundo eterno de la vida]

Mis manos temblaban, sabia que todo lo que hacia llegaba hacia el pelinegro, aun asi... mi existencia fue creada con el único propósito de ayudarlo, y acompañarlo de forma indirecta en su nivelación y construcción. No sabia que elegiría, pero aun asi, siempre supe los riesgos y como terminaría.

[¿QUIERES BORRAR EL SISTEMA? Si/No]

[Si]

Sonreí cuando lei lo elegido. La computadora que estaba frente a mi comenzó a titilar y se apago. Luego comenzó a borrarse. Me levante de la silla mientras las luces también titilaban, salí de la habitación, todo se borraba de a poco.

- Tn, cariño- dijo mama, la pase de largo, luego se borro.

Mire por la ventana del edificio como todo se iba borrando de a poco, salí de allí y me quede de pie en el medio de la calle, todo se desintegraba y titilaba como cuando un juego se pausaba o no tenias buen internet. El cielo era completamente blanco y el resto desaparecía.

Sentía mi cuerpo un poco mas liviano, ya no había tanto peso. El poder se borraba al igual que todo lo creado con mi poder. Cerré los ojos esperando, había sido una hermosa experiencia el saber como era estar uno vivo, y lo había disfrutado, Sung Jin-Woo ya no me necesitaba.

Abri los ojos sin entender, mire a mi alrededor notando todo blanco. Nada mas que yo en la nada misma. Gire mi cuerpo, mire mis manos, no entendía que sucedía. Al levantar la vista, note un edificio a lo lejos. El complejo de entrenamiento del gremio Scarvenger.

- ¿Por que no me borre?- pregunte para mi misma. Sin mas, comencé a caminar hacia el edificio a lo lejos.

Narrador omnisciente

En la realidad y en el mundo, se pudo ver el surgimiento del monarca de las Sombras. Y como este derrotaba a los dos monstruos sobrantes con facilidad a la ultima vez, luego de haber muerto. Tal vez sus mentes no entenderían todo, pero era mejor asi.

El pelinegro busco a la persona faltante allí. Tn no estaba, pero luego la buscaría. Siguió el rastro de sangre que había en el suelo y escombros hasta llegar donde solo había una persona mientras se desintegraba de a poco.

- ¿Pensaste que no sabría que te irías asi?- dijo caminando hacia el- ¿Vas a irte otra vez sin decir nada?- lo miro con seriedad- padre..

El mayor, mientras estaba en el suelo, lo único que pudo fue explicar todo lo que había sucedido y el como había llegado allí, desde lo mandado hasta sus propias decisiones de protegerlo. Nadie que ama a su familia en su sano juicio querría deshacerse de ella.

-¿Me odias?- pregunto mirando a su hijo.

-...Si- respondio el pelinegro- pero solamente abecés- asintió.

- Lo siento- respondio bajando la cabeza.

- Cuando comencé como cazador, cuando escape de la muerte, y cuando volvía a casa a salvo con Jin-Ah y mama... siempre pensé en ti- comenzó a decir- incluso si lo hacia, te odiaba y... te extrañaba- admitió. Los ojos del mayor se abrieron de golpe ante eso.

Las emociones cubriendo a ambos, el enojo, la nostalgia, el respeto, el amor.

-¿Que hay de ti papa?- pregunto- me extrañaste.. digo ¿A nosotros?

- Yo...- las lagrimas comenzaron a bajar por las mejillas del mayor- los extrañe siempre- admitió mientras lloraba- tanto que no podrías imaginarte- siguió diciendo, ya se había desintegrado por completo su brazo izquierdo- Estaba feliz de tan solo verte desde lejos- se levanto y con las pocas fuerzas abrazo a su hijo, ambos llorando el reencuentro pero también despedida- te has convertido en un buen hombre.

-¿Fueron los gobernantes?¿Son ellos los que te utilizaron y te dejaron morir?- pregunto Jin-Woo.

-Lo único que hicieron fue darme la oportunidad de elegir- respondio el mayor- elegí protegerte, y lo volvería a hacer- respondio con una sonrisa- quería hablar mas tiempo, quería quedarme un poco mas, busca el sobre y el otro anillo- dijo con una sonrisa, su cuerpo brillaba y cada vez quedaba menos- No fui un buen padre... lo siento- dijo ultimo para simplemente desaparecer.

Con el pasar de los días, el mundo hablaba de lo que había sucedido en Corea y la aparición de aquellos monstruos. Muchos heridos, muertos y desaparecidos, entre ellos la cazadora de rango Nacional Park Tn.

Los portales habían aparecido en todo el mundo, solo se esperaba a que abrieran. Ahora, Sung Jin-Woo caminaba por los pasillos de un edificio buscando una habitación especifica, al llegar toco la puerta. Del otro lado estaba Thomas Andre con un mapa.

- ¿Sin señales?- pregunto al mayor. Este desde que todo había terminado se había dedicado a buscar a la cazadora, pero seguía sin tener rastros, Sung Jin-Woo también lo intento con sus sombras pero cada que estaba cerca, desaparecía.

- No las hay aun- dijo algo cansado- miro al contrario- se siguen reportando muertes de varios cazadores de rangos importantes, no quería decirlo pero... los esta cazando, uno por uno- dijo el contrario- lo se por la forma en la que se encuentran los cadáveres.

El pelinegro miro el mapa, suspiro. Sabia que es lo que había pasado, no era Tn. Akira había tomado el control del cuerpo de la chica.

- ¿Revisaron su apartamento?- pregunto el pelinegro.

- No dejo que entre nadie- dijo de forma seca el cazador- pero tampoco quise entrar allí- apunto hacia una mesada donde había una pequeña bandeja con llaves- la dorada es de su casa- dijo- puedes ir, si encuentras algo solo dímelo.

El pelinegro asintió y se acerco tomando la llave. El mayor le dio la dirección y este emprendió viaje hacia allí.